Archivo mensual: junio 2022
Mapa de T en O
Mapa de T en O
San Isidoro de Sevilla, patrón de topógrafos y geodestas
San Isidoro de Sevilla, patrón de los topógrafos (fuente WikiMedia)
San Isidoro de Sevilla nació en Cartagena en el año 556 y falleció en Sevilla el año 636. Mientras que su padre era un hispano-romano de elevada condición social, su madre era una visigoda emparentada con la realeza. Cuando Cartagena fue tomada por los bizantinos, la familia de Isidoro tuvo que huir de la misma debido a que estos apoyaban al rey godo Agila I frente a Atanagildo (aliado de los bizantinos).
En su familia destacan sus hermanos Leandro (a quien Isidoro sucedió como Arzobispo de Sevilla), Fulgencio (quien llegó a ser obispo de Cartagena y Écija) y Florentina (de quien se dice que llegó a ser abadesa de más de cuarenta conventos). Los cuatro hermanos fueron canonizados y actualmente son los santos patrones de la diócesis de Cartagena, motivo por el cual se los conoce como los Cuatro Santos de Cartagena.
La época en la que vivió San Isidoro es la marcada por el final de la Edad Antigua, representada por la cultura romana, y el inicio de la Edad Media, representada por las nuevas nacionalidades de origen germano. El santo se propuso recomponer las debilitadas estructuras culturales de Hispania para contrarrestar las influencias culturales de los bárbaros. Propició el desarrollo de las artes liberales, del Derecho y de las ciencias, y en el Cuarto Concilio Nacional de Toledo, iniciado el 5 de diciembre del 633, estableció las bases de un decreto que impuso una política educativa obligatoria para todos los obispos del reino.
Su obra más conocida se llama Etimologías (627-630), la cual es un tratado en el cual se recoge todo el conocimiento de su tiempo (teología, historia, literatura, arte, derecho, gramática, cosmología, ciencias naturales…). Esta obra hizo posible la conservación de la cultura romana y su transmisión a la España visigoda y fue la base de la educación universitaria durante la Edad Media y el Renacimiento (los tres primeros volúmenes hacen referencia a los saberes englobados en el Trivium -gramática, retórica y dialéctica- y en el Quadrivium -aritmética, geometría, astronomía y música-).
Es en esta obra donde aparece por primera vez el mapa de T en O, también conocido como Orbis Terrarum, mapamundi de gran difusión en la Edad Media caracterizado por su gran contenido teológico.
Mapamundi de T en O realizado por Isidoro de Sevilla en Etimologías (fuente WikiMedia)
En estos mapas la O representa el mundo de forma circular (forma geométrica perfecta) rodeado por el océano. La T representa la articulación del espacio interior y la cruz, representando su eje vertical al Mar Mediterráneo (que separa Europa y África) y su eje horizontal, de derecha a izquierda, el Río Nilo, el Mar Negro y el río Don (que separan Europa y África). El mundo habitable (denominado Oikumene) está abarcado por Asia en la parte superior del mapa (el mapa está orientado al Este), Europa en el cuadrante inferior izquierdo y África en el cuadrante inferior derecho. Cada continente aparece marcado por cada uno de los descendientes de Noé: Sem (Asia), Jafet (Europa) y Cam (África).
Jerusalén ocupa el centro del mapa, el ombligo del mundo.
Debido a esta obra, se considera a San Isidoro santo patrón de topógrafos, cartógrafos y geodesias.
Reproducción facsímil en fotografía del Mapamundi que acompaña a las Etimologías de San Isidoro, en el manuscrito del códice de San Millán de la Cogolla, del año 946, conservado en la Biblioteca de la Real Academia de la Historia (Códice 25/2).
Fecha aproximada por la de otras fotografías de Madrid con el sello oval estampado al dorso: “Hauser y Menet. Ballesta, 30. Madrid” (véanse en el Archivo de la Nobleza).
Fotografía de un mapamundi, en color sepia de varias tonalidades, a mayor tamaño que el original.
Sumario: Fotografía de un mapamundi de T en O, conservado en el manuscrito Etymologiarum libri XX, de San Isidoro de Sevilla, del códice del monasterio de San Millán de la Cogolla del año 946.
Ámbito geográfico: Mapa del mundo conocido en 946
El mapa de T en O
Este tipo de mapamundi es más una representación simbólica que cartográfica y representa una visión simplificada del mundo físico. Incluye distintos contenidos teológicos y simbólicos: La T es la cruz, y la O es el orbe, el mundo conocido —«Oikumene»— que a su vez está rodeado por agua, el mar océano. Todo ello en una representación circular, la forma geométrica perfecta.
El este se coloca en la parte superior del mapa y eso hace que el Paraíso Terrenal, situado en Asia y el territorio perfecto, esté localizado en la parte alta del mapa. El centro es normalmente Jerusalén, la ciudad santa del Cristianismo y umbelicus mundi, el ombligo del mundo. Los continentes pueden aparecer como los dominios de los hijos de Noé: Sem (Asia), Cam (África) y Jafet (Europa). El tamaño de Asia es similar al de Europa y África juntas. La T está formada por el Mediterráneo o por el Mediterráneo, el Nilo y el Don (antiguamente llamado el Tanais).
El mapa de T en O se consideraba una proyección aceptable de las partes habitadas del planeta puesto que Aristóteles había divido el planeta en zonas climáticas, con un clima gélido en los polos, una zona mortal de clima tórrido en el ecuador y unas zonas de temperatura suave y tierra habitable entre ambas. El desconocido hemisferio sur se consideraba deshabitado o inalcanzable por lo que no había gran interés en incluirlo en una representación del mundo, el Orbis Terrarum (las dos mismas iniciales del mapa).
El primero que dibuja este tipo de mapas es Isidoro de Sevilla que en sus Etimologías —una especie de enciclopedia de la época— tiene un capítulo XIV dedicado a «de terra et partibus», «de la Tierra y sus partes» donde hace esta representación geográfica del mundo.
Orbis a rotunditate circuli dictus, quia sicut rota est […] Undique enim Oceanus circumfluens eius in circulo ambit fines. Divisus est autem trifarie: e quibus una pars Asia, altera Europa, tertia Africa nuncupatur.
Las ideas de Isidoro no eran originales y se basaban en textos antiguos en particular del romano Plinio. Posteriormente recibe las aportaciones del inglés Bede (673-735) y el alemán Rabanus Maurus (776-856). Con el paso de los siglos los mapas de T en O se van haciendo más complejos, incorporan la figura de Jesucristo u otros personajes históricos o legendarios y van incluyendo localizaciones de lugares bíblicos como el Paraíso Terrenal, seres mitológicos o términos geográficos reales, como ciudades, ríos o montañas.
Representación impresa del mapa de T en O por Günther Zainer, Augsburgo, 1472, ilustrando la primera página del capítulo XIV de las Etimologías de Isidoro de Sevilla, donde los continentes aparecen como dominios de los hijos de Noé: Sem (Sem), Iafeth (Jafet) y Cham (Cam). El Mar Mediterráneo aparece muy esquemáticamente representado como una cruz Tau: el sector horizontal es llamado en latín «río Maremagnum» o «río Mar Grandioso» y el sector vertical es llamado Mediterráneo; los límites perfectamente circulares de tal mapa son el en esa época casi desconocido «río» o, en el caso de este “mapa” mar Océano -más allá del mismo se solía hipotetizar al Caos-. En otros mapas medievales muy similares al de la imagen aquí expuesta; sobre la T era frecuente dibujar, en lo que se suponía el centro de Asia al Paraíso Terrenal o Edén.
Por mapa de T en O, o mapa Orbis Terrarum, se conoce a un tipo de mapamundi, realizado en la Edad Media, caracterizado por su alta carga teológica. Las tierras emergidas y el océano que las rodea tienen forma circular, la «O», mientras que los mares que las dividen forman una «T» inscrita.
Los mapas de T en O irían ganando complejidad con el paso del tiempo. Un ejemplo son los mapamundis de los Beatos, siendo el más famoso el Mapa Mundi de Beato de Liébana, originados en los Comentarios al Apocalipsis de San Juan, del siglo VIII, que contienen numerosas ilustraciones acompañando al texto. El diseño pasa en ellos a ser oval o elíptico, representándose las tierras conocidas en torno al Mediterráneo. En algunas miniaturas a partir del siglo XIII el propio mundo, en su forma circular, aparece como el cuerpo de Jesucristo que en ocasiones se encuentra sentado sobre él, como creador, principio y fin del mundo que gobierna desde el trono en que se convierte el propio orbe. En el mapamundi del Salterio de la abadía de Westminster Cristo aparece sobre el mundo, bendiciéndolo con la mano derecha y llevando en la izquierda otro pequeño orbe con la división en T. También en ocasiones se introduce el paraíso terrenal, localizado al oriente, en Asia, como puede verse en los mapamundis de Ebstorf y Hereford, ambos de hacia 1300, y las antipodas, más allá del océano y habitadas por seres fantásticos.
Mapa provenzal de San Isidoro
Mapa de T en O, con escritura árabe del folio 116v del Códice toledano.
Este tipo de mapas tuvo una influencia básica en los llamados: mapas de los Beatos.
Mapamundi de Cosmas Indicopleustes
Mapamundi de Cosmas Indicopleustes
Nacimiento: Siglo VIjuliano; Alejandría (Egipto)
Fallecimiento: 550; Alejandría (Egipto)
Religión: Nestorianismo
Ocupación: Explorador, astrónomo, escritor y geógrafo
Mapamundi antiguo de la Topographia Christiana, por Cosmas Indicopleustes. El mapa está orientado con el norte en la parte superior.
Cosmas Indicopleustes (en griego, Κόσμας Ἰνδικοπλεύστης, “navegante del Índico”) fue un marino griego de Alejandría que navegó a Etiopía, la India y Sri Lanka en la primera mitad del siglo VI. Posteriormente se hizo monje, quizá nestoriano, y hacia el año 550 escribió un extraño libro, llamado Topographia Christiana, que ilustró profusamente. La obra está dividida en doce libros.
Biografía
Cosmas, natural de Egipto —y probablemente de Alejandría—, se dedicó al comercio desde su infancia, pero, descontento de las condiciones del comercio en su propio país, emprendió una serie de viajes lejanos, en cuyo transcurso visitó las orillas del mar Negro, la península del Sinaí, Etiopía (Abisinia), y acaso Ceilán.1
El objeto fundamental de su Topographia Christiana no ofrece gran interés, sino sus informaciones geográficas, históricas y mercantiles, ya que Cosmas se proponía demostrar a los cristianos que, a pesar del Almagesto de Claudio Ptolomeo, la Tierra no poseía forma esférica, sino más bien la de una caja rectangular alargada y semejante al altar del tabernáculo de Moisés. Sostenía, además, que el Universo entero posee una forma semejante a la de dicho tabernáculo.1
La Topographia Christiana se ha conservado en dos copias manuscritas en griego, una en la Biblioteca Laurenciana de Florencia y otra en la Biblioteca Vaticana, en Roma, que son importantes no solo por el texto, sino por sus preciosas miniaturas, que parecen proceder de otras originales del arquetipo. La obra fue muy pronto traducida a las lenguas eslavas, en particular al ruso. A partir del siglo XVIII se hicieron varias ediciones de la obra, acompañadas de traducciones al latín, al francés y al inglés. La obra está dividida en doce libros y es una descripción de la Tierra realizada partiendo de una interpretación literal de los textos bíblicos. Según Cosmas Indicopleustes la Tierra es plana (la idea de la redondez de la Tierra es desacreditada como pagana) y tiene forma rectangular, con la misma forma y proporciones que el Tabernáculo que se describe en el Antiguo Testamento. Cosmas Indicopleustes y Lactancio son los dos únicos autores cristianos de la Antigüedad y del medievo de los que se sabe con certeza que mantuvieron la idea de una Tierra plana.
El libro de Cosmas prueba la existencia de tráfico comercial entre el Imperio bizantino y la India. También recoge valiosas informaciones oculares acerca del reino de Aksum, como la Inscripción de Adulis (Monumentum Adulitanum), y otras inscripciones en Nubia y las costas del mar Rojo, sobre el archipiélago de Zanzíbar y sobre Sri Lanka (llamado en distintas épocas Ceilán y Trapobana), cuya importancia comercial en la Alta Edad Media hace notar: en el siglo VI, Ceilán era un centro de comercio internacional entre China por una parte y por otra el África, Persia y, a través de Persia, Bizancio. Según Cosmas, «la isla, estando, como está, en una situación central, es muy frecuentada por naves que proceden de todas las partes de la India, y de Persia, y de Etiopía». Son interesantes también los datos que proporciona acerca de la difusión del cristianismo en la India. En la India septentrional y meridional se han descubierto monedas con el cuño de los emperadores bizantinos de los siglos IV, V y VI, es decir, Arcadio, Teodosio I, Teodosio II, Marciano, León I, Zenón, Anastasio I, Justino I y Justino II. Ello se debió a que en la economía internacional del siglo VI el Imperio bizantino desempeñaba un papel tan importante que, según Cosmas, «todas las naciones hacen su comercio con la moneda romana [la pieza de oro bizantina, nomisma o solidus], de una extremidad a otra de la Tierra. Esta moneda es mirada con admiración por todos los habitantes, cualquiera que sea el Estado a que pertenezca, porque no hay Estado alguno donde exista otra semejante».1
Como historiador es fuente fiable: informa concienzudamente al lector de las fuentes que ha usado, y da una apreciación muy completa de cada una de ellas, separando sus propias observaciones («hechas por un testigo ocular») de los informes de otros testigos oculares y de los recogidos de versiones del boca en boca. Habla también de la fauna africana e india.1
Otras cuatro obras de Cosmas de las que hay noticia se han perdido: serían una cosmografía, un tratado de astronomía y sendos comentarios sobre los Cánticos y los Salmos.
Saber más: http://chroniclesofmalabar.blogspot.com/2012/01/cosmas-indicopleustes-christian.html
Topographia Christiana
Topographia Christiana (en griego antiguo, Χριστιανικὴ Τοπογραφία) es una obra del siglo VI, uno de los primeros ensayos en geografía científica escritos por un autor cristiano. Originalmente constaba de cinco libros escritos por Cosmas Indicopleustes y se expandió a diez y, finalmente, a doce libros alrededor del año 550 d. C.1
Cosmología
Cosmas Indicopleustes, autor de la Topographia, propuso la idea de que el mundo es plano. Originalmente escrito en griego con ilustraciones y mapas, su visión acerca de la tierra plana puede haber sido influenciada por algunos contemporáneos judíos y orientales.2 Si bien la mayoría de los cristianos de la misma época sostenían que la Tierra era una esfera,1 la obra avanza en la idea de que el mundo es plano y que los cielos tienen la forma de una caja con tapa curva, y ataca especialmente la idea de que los cielos eran esféricos y en movimiento, ahora conocido como el modelo geocéntrico del universo. El autor cita pasajes de las Escrituras que interpreta originalmente para respaldar su tesis e intenta defender la idea de una tierra esférica estigmatizándola como pagana. Una de las primeras referencias que se conservan de la obra es la del Patriarca Focio I de Constantinopla en el siglo IX d. C., quien condenó el estilo y la sintaxis del texto, así como la honestidad del autor. Los autores más recientes tienden a estar de acuerdo con Focio en los puntos estilísticos, pero encuentran al autor generalmente confiable para referencias geográficas e históricas. Edward Gibbon, por ejemplo, dijo que «el sinsentido del monje se mezcló, sin embargo, con el conocimiento práctico del viajero» y lo utilizó al escribir la Historia de la decadencia y caída del Imperio romano.3
El mundo según el libro es un paralelogramo.
Geografía
Además de los elementos cosmológicos del libro, Topographia Christiana proporciona información sobre el conocimiento geográfico de Bizancio, también es la única obra griega con texto e ilustraciones que sobreviven desde el siglo VI.4 «Indicopleustes» significa «El que ha navegado a la India».5 Si bien se sabe por literatura clásica que hubo comercio entre el Imperio romano y la India, Cosmas fue una de las personas que realmente hizo el viaje.6 De hecho, aprendemos de su libro que había viajado por gran parte de la costa del mar Rojo y hasta la actual Sri Lanka. Describió y bosquejó algo de lo que vio en su Topographia. Algunos de estos bosquejos se han copiado en los manuscritos existentes.
Cuando no expone su cosmología, Cosmas demuestra ser una guía interesante y confiable, proporcionando una ventana a un mundo que desde entonces ha desaparecido. Estaba en Etiopía cuando el rey de Axum estaba preparando una expedición militar 522 o 525 d. C. para atacar a los judíos árabes en Yemen. Registró inscripciones ahora desaparecidas como el Monumentum Adulitanum (que atribuyó erróneamente a Ptolomeo III).
Manuscritos
Se sabe que existen tres manuscritos casi completos. El más antiguo y el mejor es del siglo IX y se encuentra en la Biblioteca Vaticana. Este texto contiene solo diez libros. Dos manuscritos del siglo XI estrechamente relacionados, uno del monasterio de Santa Catalina y el otro probablemente originario del monasterio de Iviron del Monte Athos, contienen doce libros y comentan sobre los profetas en el mismo orden que Teodoro de Mopsuestia prefirió en lugar del orden de la Septuaginta. como en la copia de la Biblioteca Vaticana.4 Los libros undécimo y duodécimo pueden haber sido originalmente parte de otras obras del mismo autor. Partes del libro cinco aparecen con mayor frecuencia como un comentario marginal sobre los salmos, y es el nombre que se le da al autor en estos comentarios el que se usa ahora.
Influencia
David C. Lindberg afirma: «Cosmas no fue particularmente influyente en Bizancio, pero es importante para nosotros porque se ha utilizado comúnmente para respaldar la afirmación de que todos (o la mayoría) de las personas de la edad media creían que vivían en una tierra plana. Esta afirmación… es totalmente falsa. Cosmas es, de hecho, el único europeo medieval conocido que ha defendido una cosmología de la tierra plana, mientras que es seguro asumir que todos los europeos occidentales educados (y casi el cien por cien de los bizantinos educados), así como los marineros y viajeros, creían en la esfericidad de la tierra».7
“Una característica importante de su Topografía es la cosmovisión de Cosmas de que el mundo es plano y que los cielos tienen la forma de una caja con una tapa curva, una visión que tomó de interpretaciones no convencionales de las escrituras. Cosmas pretendía demostrar que antes Los geógrafos cristianos se habían equivocado al afirmar que la tierra era esférica y que, de hecho, se inspiró en el tabernáculo, la casa de adoración que Dios describió a Moisés durante el éxodo judío de Egipto” (artículo de Wikipedia sobre Early World Maps, consultado el 11- 26-2008).
El autor proporciona una descripción de la India y Sri Lanka durante del siglo VI. Parece haber visitado personalmente el Reino de Axum. en la moderna Etiopía y Eritrea , India y Sri Lanka. En 522 EC, visitó la costa de Malabar. (India del Sur).
A: Provincia de Uva, Sri Lanka, B: Gobernación de Sinaí del Sur, Egipto, C: Aksum, Tigray, Etiopía , D: Asmara, Central, Eritrea.
Diversas representaciones del mapamundi.
Carta de Paulo Orosio
Carta de Paulo Orosio
Nacimiento:c. 385; Braga (Portugal)
Religión: Iglesia católica
Ocupación: Historiador, escritor, teólogo y sacerdote católico
Paulo Orosio (en latín, Paulus Orosius) (¿Braga, provincia de Gallaecia?, c. 383-¿?, c. 420) fue un sacerdote, historiador y teólogo hispano, posiblemente natural de Bracara Augusta (lo que hoy se conoce como Braga, Portugal).1 Aunque hay algunos interrogantes sobre su biografía, como la fecha exacta de nacimiento, se sabe que fue una figura de gran prestigio desde el punto de vista cultural, dado que tuvo contacto con las grandes personalidades de su época, como Agustín de Hipona o Jerónimo de Estridón. Para relacionarse con ellos viajó por ciudades de la costa meridional del mar Mediterráneo, como Hipona o Alejandría.
Dichos viajes determinaron su vida y su producción intelectual. Con san Agustín no solo conversó sobre temas teológicos, sino que pudo colaborar con él en la elaboración de la obra La ciudad de Dios.2 Además, este lo eligió en 415 para viajar a Palestina e intercambiar información con otros autores, lo que también le permitió participar en un concilio en Jerusalén y, de vuelta, portar las reliquias de san Esteban. Finalmente, su fecha de fallecimiento tampoco se sabe con exactitud, aunque, en cualquier caso, no parece posterior a 423.3
A lo largo de su vida escribió tres obras, de entre las cuales sobresale la llamada Historiæ adversus paganos. Se trata de uno de los libros con más repercusión de la historiografía en el paso de la Edad Antigua a la Edad Media, así como de la hispana de todos los tiempos. Además, es el escrito en el que el autor pone de manifiesto su metodología histórica. Es básicamente una narración histórica desde los primeros tiempos hasta el momento en el que vive, aunque dando un papel preeminente a los pueblos paganos.4
Paulo Orosio fue una figura altamente influyente tanto desde el punto de vista divulgativo (Historiæ adversus paganos fue una de las principales obras utilizadas hasta el Renacimiento para estudiar la Antigüedad) como historiográfico (su metodología histórica tuvo gran repercusión en historiadores posteriores).56
Fuentes para su estudio
A pesar de que su obra ha tenido una gran repercusión, su biografía está cargada de interrogantes que impiden reconstruirla con precisión y seguridad. Dichos interrogantes, por la escasez de fuentes, son especialmente pronunciados en su nacimiento y su fallecimiento.7 No obstante, se trata de un autor ampliamente estudiado y por tanto existen diversos estudios que proponen fechas para ambos sucesos.
Las principales referencias para la biografía de Orosio provienen de los escritos de Genadio de Marsella y Braulio de Zaragoza, aunque no hay que olvidarse de sus propias obras.7 Además, Orosio es mencionado en algunas cartas de san Agustín.
Primeros años
A pesar de la escasez de fuentes al respecto, si se da por buena la fecha de nacimiento del apartado anterior —o, al menos, la horquilla de diez años entre 375 y 385— habría que enmarcar a Paulo Orosio en un momento de auge cultural junto a Hidacio, los Avitos o el propio Orosio.15 También hay que tener presente que el priscilianismo estaba en pleno desarrollo.
Las teorías clásicas plantean que Paulo Orosio podría pertenecer a una familia de buena posición social,16 lo cual le permitió acceder a una buena formación. Esta se desarrolló en términos cristianos, aunque Orosio, aceptando que nació en Braga, tuvo siempre un fuerte conocimiento de la cultura rural del momento.
La historiografía contemporánea señala que desde la juventud de Orosio se tenía la imagen de que era locuaz y erudito,17 aludiendo a afirmaciones tanto de san Agustín como del papa Gelasio I. En cualquier caso, todo lo referente a la juventud del autor no son más que hipótesis y conjeturas, pues, como ya se ha dicho, junto a su desaparición, es la época peor conocida de su biografía.
Viaje a África
Mapa esquemático con todos los viajes de Paulo Orosio.18
En principio, es seguro que Paulo Orosio vivió en Gallaecia (Hispania noroccidental) hasta 409, pero a partir de ahí, y hasta 415, no hay ninguna fecha segura. La cronología tradicional, o al menos la más extendida,19 plantea la sucesión de hechos que se desgranará en los siguientes párrafos.
Al parecer, Orosio tuvo que salir de Braga a raíz de las invasiones germanas. La fecha en que esto se produjo no está clara, pero lo que no se pone en duda es que salió de allí abruptamente. Incluso, el propio Orosio afirma que fue perseguido hasta la misma playa en la que embarcó.20
De entre todas las fechas planteadas para la salida de Braga, que van desde 409 hasta 414, lo más operativo es quedarse con las dos más aceptadas:
- 410: sostenida por G. Fainck. Así, Orosio tendría un margen de cinco años para colaborar con san Agustín antes de su viaje a Palestina.
- 414: la más aceptada. La propia obra de Orosio, Commonitorium, que data de 414, habla de su llegada, su encuentro con san Agustín, etcétera.
Lo cierto es que una vez Orosio salió de la península ibérica tenía claro que su destino era Hipona, para encontrarse con el mayor intelectual de la época: san Agustín. Desde su llegada, Orosio pasaría a formar parte del equipo que trabajaba junto a Agustín de Hipona, por lo que es posible que el autor colaborase en la elaboración de La ciudad de Dios o que al menos conociese la obra.2
En 415, san Agustín encargó a Orosio una tarea que solo podía realizar alguien de su más profunda confianza: viajar a Palestina para encontrarse con Jerónimo de Estridón, otro escritor con el que las relaciones no eran precisamente buenas.
Viajes a Palestina
El viaje a Palestina respondía a un doble motivo: el interés de Orosio, que quería tratar con Jerónimo de Estridón diferentes temas teológicos —en especial el relacionado con el origen del alma— y el interés de san Agustín, que le mandaba para estrechar lazos con dicho intelectual y para recabar información sobre la herejía pelagianista.21
De hecho, en 415, una vez instalado en Belén junto a Jerónimo, Paulo Orosio se entrevistó con el propio Pelagio por mandato de san Agustín. Además de recabar información sobre el pelagianismo, Orosio participó en 415 en un concilio en Jerusalén, en el cual Orosio mantuvo un enfrentamiento con Juan II —obispo de Jerusalén—, que le acusó de hereje ante todo el cónclave. Para defenderse, Orosio escribió su segunda obra, Liber apologeticus, en la cual rechazaba dicha afirmación de manera tajante.22
Lo primero que hizo Orosio al encontrarse con Jerónimo fue entregarle la correspondencia que traía para él de parte de san Agustín, lo que implicaba que el viaje estaba concebido desde el primer momento como de ida y vuelta, pues también debía entregar la correspondencia de Jerónimo a san Agustín a su vuelta. En paralelo a esto, a fines de 415 aparecieron las reliquias de san Esteban, y parte de estas fueron encomendadas a Orosio para que las trasladase hasta Braga.23 Eso marcaría tanto el inicio de su viaje de regreso como, desde el punto de vista actual, de una nueva época de su vida carente de fuentes para su estudio.
Últimos años
Dado que las reliquias de san Esteban aparecieron el 26 de diciembre de 415, Orosio no pudo partir con anterioridad a esta fecha. Aunque su idea era ir a Braga, tenía que pasar a la fuerza por Hipona —de hecho llevaba escritos de Jerónimo para san Agustín—, y también hay constancia de que pasó por Jerusalén y por Alejandría, aunque esto último no se sabe si lo hizo a la ida, a la vuelta o en ambas ocasiones.24
Durante su segunda estancia en Hipona, mantuvo una larga entrevista con san Agustín, en la que le entregó la correspondencia que portaba de parte de Jerónimo y le informó del encuentro que tuvo con Pelagio.25 Durante este reencuentro con san Agustín se gestó la gran obra de Paulo Orosio, las Historiæ adversus paganos. Sin embargo, surgen problemas a la hora de datar tanto la elaboración como la finalización del libro, para lo cual hay opiniones de diversos tipos:
- La hipótesis tradicional dice que el libro se llevó a cabo entre 416 y 417.26 La fecha se apoya en que en el Liber apologeticus aún no dice nada de su labor como historiador, y que en el prólogo habla del libro XI de la Ciudad de Dios de san Agustín, el cual no se publica hasta 416. Para justificar que Orosio escribiese siete libros en tan poco tiempo, se dice que pudo usar resúmenes.
- Una hipótesis más moderna, sostenida por Torres Rodríguez, dice que Orosio paró por segunda vez en Hipona un tiempo muy breve, para intentar volver a Hispania, cosa que no consiguió, y escribir el libro en una tercera estancia en Hipona, lo cual explicaría que en sus Historias se hable de sucesos ocurridos en Hispania en 417.
- Una tercera teoría ya clásica, sostenida por T. von Mörner y G. Fainck, habla de que se realizó un trabajo previo por parte de Orosio antes de viajar a Palestina. De hecho, esta idea ha sido reactivada por M. P. Annaud-Lindet en fechas más recientes, aunque con la variante de que Orosio habría escrito durante su regreso desde Palestina.
Desaparición
Tras la publicación de las Historias, no hay apenas información sobre Paulo Orosio. Se sabe que estuvo en Menorca, pero se desconoce la fecha en que falleció. Esta ausencia de referencias a Orosio pudo deberse a un distanciamiento con san Agustín, el cual no hace ninguna referencia clara a las Historias de Orosio una vez publicadas. Genadio de Marsella indica que el autor vivió, al menos, hasta el fin del mandato del emperador Flavio Honorio, que se prolongó hasta 423, pero no hay ninguna noticia de Orosio desde 417, y parece poco probable que un autor tan activo estuviese seis años sin dar noticias.3
Existen más posibilidades, desde una posible muerte repentina hasta una suerte de leyenda que habla de que Orosio finalmente llegó a Hispania, fundó un monasterio cerca del Cabo de Palos y terminó allí sus ideas, algo que hoy por hoy parece poco probable.3
Obras
Historiae adversus paganos, 1561
- Consultatio sive commonitorium ad Augustinum de errore Priscillianistarum et Origenistarum, en Migne, J. Patrología latina. París, 1844-1864, vol. 31, cols. 1212-1216. 1884
- Historia contra los paganos. Barcelona: Biblioteca Universitaria, 1983. 1983
- Historiarum adversis paganos. Leipzig, 1889. 1889
- Historiarum adversus paganos libri VII, en Migne, J. Patrología latina. París, 1844-1864, vol. 31, cols. 663-1174. 1844
- Liber apologeticus contra pelagianos de arbitrii libertate, en Migne, J. Patrología latina. París, 1844-1864, vol. 31, cols. 1173-1212. 1844
- Ratio orthographiae, en Migne, J. Patrología latina. París, 1844-1864, vol. 31, cols 661, s. 1844
- Seven books of History against the Pagans. Nueva York: [s.n.], 1936. 1936
- Variae dedicationes, en Migne, J. Patrología latina. París, 1844-1864, vol. 31, cols. 643-654 1884.
Commonitorium y Liber apologeticus
El Commonitorium y las Historias responden, al menos en origen, a la influencia directa que san Agustín ejerció sobre Orosio.27
Aunque el escrito más importante de Paulo Orosio fueron las Historiæ adversus paganos, también hay que tener en cuenta las otras dos obras que se conservan del autor, conocidas generalmente como Commonitorium y Liber apologeticus.28
El nombre completo del primer libro es Consultatio sive commonitorium ad Augustinum de errore Priscillianistarum et Origenistarum (en español: Consulta o advertencias de Agustín acerca del error de los priscilianistas y de los origenistas).27
Importancia de la geografía
Paulo Orosio concede, y esto también es digno de ser destacado, una gran importancia a la Geografía para su labor como historiador.58 La muestra de esto es la descripción geográfica del mundo que hace Orosio en el segundo capítulo del primero de los siete libros que componen las Historias.58
Colofón de un incunable de las Historiæ adversus paganos de Paulo Orosio, uno de los libros más copiados del Medievo.6
A pesar de que la descripción geográfica cuenta con algunas imprecisiones, como las referidas al empleo excesivo del sustantivo «Cáucaso» para referirse a otras cordilleras al margen de esta,59 es destacable que se incluya un capítulo geográfico. Esto ha conferido valor, en la historiografía moderna, a la obra de Orosio, gracias a autores como Lucien Febvre o Fernand Braudel.
Repercusión de la obra orosiana
Tomando por cierto el supuesto distanciamiento entre Paulo Orosio y Agustín de Hipona en los tramos finales de la vida del primero, esto no tuvo que producirse en ningún caso a raíz de las Historias, y de hecho no afectó en absoluto a su distribución y repercusión.60
A pesar de todo lo que se ha dicho anteriormente sobre la obra de Orosio, respecto a que en algunas ocasiones ha recibido críticas concretas, esta tuvo éxito prácticamente desde su confección, y hasta el Renacimiento fue tomada como una de las principales obras de la historiografía hispana.5 Este éxito hizo en buena medida que también se conservaran los otros dos escritos del autor.
Historiæ adversus paganos es una obra citada por todo tipo de autores, desde san Braulio hasta Dante Alighieri. Incluso, el propio Lope de Vega le dio un papel a Paulo Orosio en su obra El cardenal de Belén, lo que da buena cuenta de la longevidad de la fama de Orosio.6 De hecho, la obra no solo fue citada por doquier, sino que fue uno de los principales libros escolásticos para el estudio de la historia antigua durante toda la Edad Media.6
La obra ha sido ampliamente copiada, y se conservan nada menos que 82 manuscritos y 28 incunables de los primeros tiempos de la imprenta.6 Después se siguió copiando, e incluso se han conservado ediciones de la obra del siglo XVI en italiano y alemán.6
Respecto a las ediciones más actuales, desde el siglo XIX hay de todo tipo. En el caso de este artículo se ha trabajado sobre la edición de Torres Rodríguez, pero existen otras muchas igualmente válidas, tanto en castellano como en otros idiomas.
Mundo de Macrobio
Mundo de Macrobio
Macrobio
Macrobio presentando su obra a su hijo Eustacio
Información personal
Nombre de nacimiento: Macrobius Ambrosius Theodosius
Nombre en latín: Ambrosius Macrobius Theodosius
Nacimiento: Último cuarto del s. IV d. C.; Al-Kāf (Túnez)
Fallecimiento: 430
Información profesional
Ocupación: Escritor y gramático
Seudónimo: Macrobio
Obras notables: Saturnalia, Commentarii in Somnium Scipionis, De differentiis et societatibus Graeci Latinique verbi
Macrobio, escritor y gramático romano, del último cuarto del siglo IV, de cuyos datos biográficos poco se conoce con certeza.
Vida y cronología
Denominación
El nombre que consta en latín en los manuscritos más antiguos del Comentario al Sueño de Escipión de Cicerón es el de Macrobius Ambrosius Theodosius, sin embargo existe una variación tanto en el orden de los tres nombres como en la vigencia de los mismos, dado que a veces se omite Ambrosius, otras Theodosius, e incluso ambos, aludiéndose simplemente a Macrobius.
Por otra parte, para nombrar a una persona en el Bajo Imperio era costumbre citar el último de sus nombres, con lo que existe a su vez una elevada probabilidad de que se le nombrara como Theodosius.
Sea como fuere, desde la Edad Media se le conoce como Macrobius o Macrobio, salvo alguna pequeña excepción en la que se le nombra como Macrobius Theodosius.
A partir de lo expuesto, predomina la ausencia de certeza sobre la evidencia.
Origen
Tampoco es certero su lugar de nacimiento, exponiéndose de nuevo ante la duda el recurso a la hipótesis. El único dato fidedigno, corroborado por el propio Macrobio, es que no es de procedencia latinoparlante, con lo que Italia queda descartada. Grecia tampoco es referente dada la mayor familiaridad con la literatura latina y la preferencia de citar a los autores griegos en Latín. Lo más plausible es que proceda de alguna de las provincias más latinizadas del Imperio romano: África, Sur de Italia, Hispania o Egipto.
Se le atribuye el doble título de vir clarissimus et illustris,1 es decir, era de rango senatorial y había accedido a las más altas funciones del Estado.
Cronología
Finalmente tampoco es posible concretar una fecha fidedigna tanto respecto a su nacimiento como a la composición de sus tres obras.
Se barajan dos hipótesis, de las cuales, la segunda, la más tardía, tiene visos de mayor probabilidad:
- Nacimiento: 350–360, elaboración del Comentario y de las Saturnales: 384–395, y del Tratado Gramatical: 395–400.
- Nacimiento: 385–390, elaboración del Tratado Gramatical: 420–425, y del Comentario y de los Saturnales: 430–440.
Obra
Macrobio es autor de tres obras:
Saturnalia o Saturnales
Un simposio literario incompleto en siete libros, donde teniendo como contexto las fiestas saturnales varios senadores dialogan con el gramático Servio sobre temática antigua, con especial énfasis en Virgilio.
Commentarii in Somnium Scipionis o Comentario al Sueño de Escipión de Cicerón
Obra que sí nos ha llegado intacta y que además ha permitido recuperar un fragmento de la obra De república de Cicerón, conocida gracias a Macrobio.
De differentiis et societatibus Graeci Latinique verbi o Sobre las diferencias y semejanzas del griego y del latín
Un tratado gramatical perdido, donde se compara el verbo griego con el latino.
El mundo de Macrobio
Regresando al ámbito romano, y con posterioridad a Mela, Macrobio (s. IV-V) en el Comentario al Sueño de Escipión V 23 también se hace eco de esta teoría: expone que existían más continentes, a los que llamaba mundos, además de la tierra habitada. Según este autor, dichos mundos estaban situados, cada uno, en una parte del globo, simétricamente a los nuestros. Sostiene que, si en la Tierra conocida hay vida, también tendría que haber en los mundos opuestos al nuestro (Comentario al Sueño de Escipión V 24-27).
En realidad la teoría de Macrobio también se basa en la de los cuatro mundos habitados que ya había formulado Crates de Malos. Esta teoría se basa en la simetría: si en el Hemisferio Norte existen dos mundos habitados (Asia por un lado y Europa-África por otro) es lógico pensar que en la zona templada del hemisferio Sur también existan dos continentes similares a los nuestros, separados por un supuesto Océano que discurre a lo largo del Ecuador.
Cientos de manuscritos que podemos fechar entre los años 1200 y 1500 y que incluyen este esquemático mapa ilustran las teorías de Macrobio. La imprenta contribuyó a difundirlo y el mapamundi se imprime por primera vez en Brescia en 1483.
El mundo según Macrobio, Comentario al Sueño de Escipión 32-37
Mapamundi del Océano y las regiones habitadas según Macrobio Comentario al Sueño de Escipìón II 9, 1-7 (Macrobio, Comentario al Sueño de Escipión, trad. Fernando Navarro, Gredos, 2006, p. 384).
Macrobio es uno de los responsables de que entre los geógrafos medievales persistiera la creencia en la esfericidad de la Tierra, idea que tan importante fue, siglos después, para el descubrimiento del Nuevo Mundo. Introduce un concepto geográfico que difiere extraordinariamente del de Ptolomeo.
No obstante, los mapas de Macrobius se han estudiado mucho menos que los mapas ecuménicos, y su tratamiento ha sido con frecuencia superficial. En consecuencia, aunque la gran cantidad de mapas existentes en los manuscritos medievales de Macrobio Comentario Se han observado a menudo (estimado en alrededor de 150, aunque se desconoce el número exacto), persisten varios malentendidos acerca de estos mapas.
Este modelo de globo terrestre tuvo mucha aceptación entre los filósofos tardorromanos y medievales, como Agustín de Hipona, quien realiza razonamientos sobre si puede haber habitantes antípodas, ya que no se nombran en la Biblia y las barreras naturales son infranqueables.
Confluyen los aspectos mitológicos-teológicos, con las leyendas que aportan las cruzadas del mediterráneo oriental y se expanden. Por ejemplo la ficción en torno al famoso Preste Juan perduró durante muchos años, los cuatro ríos que nacían en el Paraíso, emblema de los mapamundis medievales, permanecieron incluso en numerosos mapas del S XVI. Durante el siglo XII eran frecuentes documentos literarios donde se describen rutas o itinerarios tanto terrestres como marítimos. Esta aspiración viajera bajomedieval incitó además, el contacto, acercamiento y relación con los avanzados conocimientos árabes.
La enigmática Caja de Christainsen
La enigmática Caja de Christainsen
Un afortunado encontró esta caja-maletín en la basura, resulta que está llena de maravillosas y extrañas ilustraciones. Artículo publicado en 5 junio, 2019.
La misteriosa caja con planos y dibujos de extraterrestres con alas fechada en julio del año 1977.
Su antiguo propietario era Daniel J. Christainsen de Holanda, pero que vive al parecer en Florida.
Es evidente que algo le pasó a este chico que era muy memorable. La caja mide aproximadamente 29″ por 38″ y casi todos los dibujos son muy grandes, algunos fechados hace mas de 60 años. En total 209 documentos entre los que llama poderosamente la atención los dibujos de ovnis, extraterrestres y seres alados, incluyendo transcripciones que son muy detalladas.
¿Vivió algún tipo de contacto extraterrestre este joven?, ¿Cual será la intrigante historia detrás de esta misteriosa caja?
Lo seguro es que esta historia hará las delicias de cualquiera con ganas de investigar.
Puede ver la colección completa de documentos (aquí) (102) y (aquí) (107)
Una caja que se ha hallado contiene planos de entes alienígenas, un OVNI, y las transcripciones que exploran la relación entre encuentros con alienígenas y las religiones antiguas.
Un usuario de la red social Imgur ha publicado una serie de imágenes que exponen el contenido de una vieja caja de madera, alrededor de 29 centímetros por 38 centímetros, que según el, su amigo localizó en la basura. El sitio hoy en día y después de unas 20 horas de ser publicado ya cuenta con más de 250.000 puntos de vista de los visitantes de esa red social.
Las imágenes no solo contienen pistas, sino que además plantean gran cantidad cuestiones, es todo un enigma.
El pudo haber sido un veterinario de la segunda guerra mundial, la caja contenía un papel en blanco con la leyenda de La Administración de Veteranos Medical Center. El pudo haber sido un ingeniero, al parecer el pudo haber tenido un encuentro alienígena.
Se habla de un encuentro en la Bahía de Tampa, el 7 de julio de 1977.
Se señala a los alienígenas y los explica, cada uno tenia cuatro caras y cada uno poseía cuatro alas. Una de las caras parece un humanoide, mientras que los diferentes tres aparecen como un animal con figura de vaca o como una criatura en figura de pájaro, y las figuras humanoides tienen cascos en los pies y cabeza.
Christiansen recuerda referencias bíblicas que siente se refieren a encuentros con alienígenas. No está claro si sus dibujos se relacionan con sus propias experiencias o si son representaciones de los relatos históricos. Además hace mención a un avistamiento en Brasil en 1967 por un turista americano.
Escribe en mención al relato bíblico de Ezequiel: «El fuego que poseía el color de ámbar poseía que esperar el día en que las luces eléctricas estaban disponibles en la tierra anteriormente de que se pueda hacer una interpretación literal, de modo que lo haría a los ojos de las criaturas.
«Sería, de hecho, es necesario esperar a los demasiados inventos tecnológicos anteriormente de interpretar los 2.500 años de experiencia antigua, que Ezequiel localizó conveniente llamar visiones.»
Las figuras con las cabezas de animales recuerdan figuras de pinturas y esculturas antiguas, que se localizan en distintos partes del mundo.
En el Tíbet y diferentes religiones, las deidades se simbolizan a veces con la cabeza de un caballo u otro animal. En alguna ocasión, la cabeza de animal representaba al jefe principal, los dibujos además recuerdan al minotauro griego, y a distintos esculturas de distintos civilizaciones.
La entrada La misteriosa caja con planos y dibujos de extraterrestres con alas fechada en julio del año 1977 se publicó primero en Mundo oculto.
Todo apunta a un montaje, y un fraude.
Tabula Peutingeriana
Tabula Peutingeriana
Conrad Peutinger, por quien se da el nombre al mapa.
La Tabula Peutingeriana (‘Tabla de Peutinger’) es un itinerario que muestra la red de carreteras del Imperio romano. Se puede contemplar una de las copias en la Biblioteca Nacional de Austria en Viena. El mapa original, del que solamente han sobrevivido copias, fue realizado a partir del siglo IV, ya que aparece Constantinopla, que fue refundada en el año 328. Cubre Europa, partes de Asia (India) y África del Norte. El nombre del mapa proviene de Konrad Peutinger, un humanista alemán de los siglos XV y XVI.
Transmisión y contenido
La copia más antigua de la Tabula Peutingeriana que ha llegado a nuestros días fue realizada por un monje de Colmar en el siglo XIII. Es un rollo de pergamino de 0,34 m de altura y 6,75 m de longitud, que fue dividido en 12 hojas o segmentos. La primera de ellas, que reproduciría a Hispania (España y Portugal) y la parte occidental de las islas británicas, ha desaparecido. Se conservan las 11 hojas originales restantes. La página faltante fue reconstruida en 1898 por Konrad Miller.1
Es un mapa muy esquemático: las masas de tierra están distorsionadas, especialmente en la dirección este-oeste. Muestra muchos asentamientos romanos, las carreteras que los unen, ríos, montañas y mares. También incluye las distancias entre los asentamientos. Las ciudades más importantes del imperio, Roma, Constantinopla y Antioquía, están representadas con una decoración especial.
Sin embargo, una vaga similitud con la tierra de Ptolomeo da argumentos a los que defienden que el desconocido autor procuraba hacer una representación más o menos fiel de la Tierra.
Mapa
La Tabula Peutingeriana, desde Iberia al oeste, hasta India al este.
Aproximación a la realidad cartográfica de los 12 segmentos de la Tabula Peutingeriana
Contraída para ser visible.
Para saber más en: https://www.despertaferro-ediciones.com/2018/la-tabula-peutingeriana-y-el-orbis-romanvm-378-ad/
Visión completa de la Tabula:
https://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/5/50/TabulaPeutingeriana.jpg
Tabula Peutingeriana (sección) – de arriba a abajo: costa dálmata, mar Adriático, Italia Meridional, Sicilia, costa mediterránea de África
La copia más antigua de la Tabula Peutingeriana que ha llegado a nuestros días fue realizada por un monje de Colmar en el siglo XIII. Es un rollo de pergamino de 0,34 m de alto y 6,75 m de largo. Es un mapa muy esquemático: las masas de tierra están distorsionadas, especialmente en la dirección este-oeste. Muestra muchos asentamientos romanos, las carreteras que los unen, ríos, montañas y mares. Las distancias entre los asentamientos también están incluidos. Las ciudades más importantes del imperio, Roma, Constantinopla y Antioquía, están representadas con una decoración especial.
Polémica
Existen dudas a cerca de si se debería llamara mapa a la Tabula Peutingeriana, ya que no intenta representar las formas reales del terreno. Se cree que la Tabula se basa en “itinerarios”, o listas de destinos a lo largo de las calzadas romanas. Los viajeros no poseían nada tan sofisticado como un mapa, pero necesitaban saber lo que tenían por delante en la calzada y a cuanto quedaba. La Tabula Peutingeriana representa estas calzadas como una serie de líneas paralelas a lo largo de las cuales se han marcado los destinos. La forma de las páginas del pergamino explica la forma rectangular.
Sin embargo, una vaga similitud con la tierra de Ptolomeo da argumentos a los que defienden que el desconocido autor procuraba hacer una representación más o menos fiel de la tierra.
La Tabula Peutingeriana es un rollo de pergamino de casi 7 metros (por aquel entonces todavía no se había inventado el formato «libro») que muestra toda la red de vías y calzadas que conectaban el Imperio Romano, desde Hispania y Mauretania (actualmente Marruecos), hasta Egipto y la India.
Lamentablemente, el original no sobrevivió y la copia más antigua que ha llegado a nuestros días fue realizada por un monje de Colmar (Alsacia, Francia) en el S. XIII, que se conserva en la Biblioteca Nacional de Viena.
El documento está dividido en unos 12 segmentos de los cuales, los correspondientes a Hispania (España y Portugal) y la parte occidental de las islas británicas, desapareció (y fue posteriormente rehecha en 1898 por Konrad Miller.
La Tabula Peutingeriana sigue un esquema, como las leyendas de los mapas actuales, aunque es muy básico:
- Las calzadas principales están marcadas en rojo
- Hay marcas en el mapa que señalan las jornadas de viaje
- Se marcan las posadas, termas y otros lugares de descanso
- Y también las mansio, cuya traducción es: «lugar donde pasar la noche después de un viaje»
Como mapa es muy esquemático: las masas de tierra están distorsionadas y están supeditadas al dibujo del mapa. Eso sí, las ciudades romanas más importantes como Roma o Constantinopla (actual Estambul), se plasman con una decoración especial.
Fragmento de la Tabula Peutingeriana
A lo largo de los 12 sectores puede contemplarse la vertebración de las vías de comunicación por las que se extendía el imperio romano. De esta forma, cada hoja hace referencia a una parte del territorio y permite conocer las vías y nodos de conexión entre vías para acceder a ciudades y lugares. Cartográficamente hablando, una réplica en papiro de los actuales análisis de redes.
Puede consultarse algunas de las secciones territoriales Tabula Peutingeriana desde la colección de antigüedades de la Biblioteca Augustana, pudiendo acceder a diversas versiones de este peculiar “mapa” y su red de caminos romanos. También puedes descargar la totalidad de la Tabula desde aquí en formato TIF.
Dedo humano fosilizado en Canadá
Dedo humano fosilizado en Canadá
En un estrato de 110 millones de años.
Similar al encontrado en Texas?
Dedo humano fósil de entre 100 y 110 millones de años hallado en una isla del Ártico de Canadá; la imagen inferior es su radiografía
Este fósil, identificado como DM93-083, pertenece a una colección personal y fue hallado en la Isla Axel Heiberg, en el ártico Canadiense. Está datado en unos 100 a 110 millones de años atrás, época que corresponde al Cretáceo. Debajo de la foto se ve una imagen radiográfica, en la que se observan los huesos, que al tener menor densidad que la parte petrificada del exterior se ven en tono mucho más oscuro.
Según algunas fuentes:
Para que el dedo fuese estudiado debidamente se tuvo que cortar con una sierra de diamante. En su interior se podían apreciar los distintivos círculos concéntricos.
El escaneo reveló la presencia de huesos, articulaciones y tendones en el interior del dedo. Esto se podía constatar por las diferencias de tonalidades entre claras y oscuras que se presentaron en las radiografías.
Fraude
Karahan Tepe
Karahan Tepe
Región¨Provincia de Sanliurfa
Coordenadas: 37°05′30″N 39°18′10″E
País: Turquía
Historia del sitio
Fecha construcción: 9.400 a. C.
Mapa de localización
Karahan Tepe
Ubicación (Turquía).
Karahantepe es un yacimiento arqueológico prehistórico en la provincia de Şanlıurfa en Turquía. Se encuentra cercano a Göbekli Tepe y los arqueólogos también han hallado estelas en forma de T en ambos lugares. Según Daily Sabah, «las excavaciones han descubierto 250 obeliscos que presentan figuras animales»1 y, según algunos científicos, podría tratarse de uno de los primeros poblados al estar datado en el año 9.400 antes de Cristo.2
El yacimiento está ubicado cerca de Yağmurlu, a aproximadamente 35 kilómetros al este de Göbekli Tepe, a menudo se le conoce como el yacimiento hermano de Göbekli Tepe. Forma parte del proyecto Cultura Göbeklitepe y Excavaciones Karahantepe, y las excavaciones comenzaron en 2019 por la Universidad de Estambul. El área es denominada como «Keçilitepe» por los nativos de la zona.3
Excavaciones
Aunque las antiguas estructuras de Karahan Tepe fueron descubiertas en 1997 por «investigadores cerca del barrio de Kargalı en el parque nacional de las Montañas Tek Tek»,4 las excavaciones no comenzaron hasta el año 2019. Necmi Karul, un arqueólogo de la Universidad de Estambul, relató a la Agencia Anadolu en 2019 que «el último año, se retomaron los trabajos de excavación en Karahantepe (Kectepe), a unos 60 kilómetros de Gobeklitepe, y encontramos restos de estructuras especiales, obeliscos, esculturas de animales, descripciones, así como simbolismo similar».5
La Universidad de Estambul desveló en 2021 que, durante el proceso de abandono del yacimiento, algunas estatuas humanas fueron decapitadas, se les cortó la nariz y sus cabezas se colocaron al revés mirando hacia las paredes. La gran sala central alberga unas dimensiones de 23 metros de diámetro, cuyos muros estaban mantenidos por dos grandes pilares en forma de T, actualmente derruidos en el pavimento. Se cree que en este recinto era donde estaría ubicado el trono del líder del poblado o la divinidad en cuestión. Aunque se han encontrado tanto esculturas de animales como de humanos en piedra caliza, en una segunda fase desaparecen las figuras zoomórficas en favor de las antropomórficas.2
Turquía desvela los espectaculares restos descubiertos en Karahantepe
La Universidad de Estambul acaba de revelar al mundo las magníficas piezas encontradas en este yacimiento del sureste de Turquía. Aunque las excavaciones empezaron en 2019 tras la desescalada de conflicto sirio, no ha sido hasta este año que el equipo del profesor Karul Necmi ha alcanzado el nivel de los templos y desenterrado centenares de pilares y esculturas.
Foto: Francesc Cervera
Los inicios del Neolítico fueron una época en la que surgieron numerosos asentamientos en Anatolia y Mesopotamia. Cerca de la actual Sanliurfa se construyeron a mediados del siglo X a.C. un conjunto de templos en Göbekli Tepe, lugar que se convirtió en el epicentro de una cultura en la que destacaban los templos circulares de piedra decorados con columnas antropomorfas talladas con todo tipo de imágenes animales.
Fue en esa época cuando en la colina de Karahan (o Karahantepe), a solo 32 kilómetros, se fundó otro poblado que para muchos científicos es el primer poblado de la historia al contar con residencias fechadas en torno al 9400 a.C y articuladas en torno a un santuario.
El agua era esencial en los rituales celebrados en Karahantepe, en la imagen piscina ritual decorada con pilares tallados con forma de hombres y animales.
Foto: Ministerio de Cultura de Turquía
Un descubrimiento reciente
Aunque este lugar ya se conocía desde 1997, no ha sido hasta tiempos recientes que el Ministerio de Cultura turco ha empezado a excavar el sitio sacando a la luz un extenso complejo sagrado que rivaliza con el famoso Göbekli Tepe.
Iniciados en 2019 los trabajos han continuado hasta el presente. Si bien las primeras capas no fueron muy prometedoras las últimas campañas han desenterrado más de 300 estelas y pilares junto con muchísimas esculturas de todo tipo talladas en piedra caliza.
Todos estos objetos no se encontraron de cualquier manera sino que los habitantes los enterraron de manera cuidadosa cuando cubrieron ritualmente el lugar en el momento de su abandono. Así las estatuas humanas fueron decapitadas, se les cortó la nariz y sus cabezas fueron puestas del revés, mirando hacia las paredes.
Al tratarse de una representación de un ser humano al completo esta escultura es una de las obras más revolucionarias del yacimiento, al ser una evolución de los pilares antropomorfos todavía imita la postura tradicional con las manos en el bajo vientre.
Foto: Francesc Cervera
Curiosa estatuilla con dos cabezas de la que se conserva la parte superior. Presenta algunas innovaciones artísticas como una banda que le sujeta el pelo o el hecho de que sus cabellos hayan sido tallados con forma de estrías cerebrales. Al tener dos caras podría representar a alguna dualidad (joven-viejo, hombre-mujer, bueno-malo).
Foto: Francesc Cervera
Un santuario complejo
En el centro del área excavada se erige una gran sala circular de 23 metros de diámetro. Al igual que las de Göbekli Tepe el peso de su techo de madera lo sostenían dos grandes pilares con forma de T hoy caídos y rotos por la presión del sedimento. Según los investigadores, en las paredes de dispusieron unos pilares algo más pequeños separados por bancos tallados en la roca o construidos con losas.
Al fondo de este gran recinto había un podio decorado con estelas y tótems en el que se levantaba un trono desde el que el líder del poblado o la divinidad presidía las reuniones de su comunidad.
Junto a esta estancia los antiguos pobladores del lugar tallaron dos piscinas en la roca alimentadas por canalizaciones que recogían el agua de la lluvia. Una de ellas, presidida por un misterioso rostro masculino y profusamente decorada con estelas, conectaba con el salón por una pequeña ventana por la que, según el profesor Necmi, los creyentes descendían para darse un baño purificador tras el que ascendían a la luz por una escalera tallada en la roca.
Este aplanado rostro era la parte superior de una estela en sustitución de los animales. Tras la cara se puede ver un agujero por el que quizás colgaba del techo. Este tipo de piezas son habituales en el lugar.
Foto: Francesc Cervera
Diversas cabezas de animales (leopardo, zorro,…) halladas en el yacimiento y que, al encontrarse cortadas por el cuello, los arqueólogos creen que eran parte de estelas y tótems antes de ser decapitadas y enterradas. Primera fase de ocupación.
El hombre y la bestia
Al igual que sucede en el resto de yacimientos contemporáneos las primeras producciones artísticas del poblado se centraron en los animales, algo típico para una cultura seminómada basada en la caza de gacelas y la recolección de frutos y cereales silvestres.
De este modo las esculturas de los inicios de Karahantepe combinan a hombres con depredadores, como se puede ver en los numerosos tótems encontrados en el lugar. Estas representaciones se situaban a veces mirando hacia la entrada de la habitación, para espantar con su fiero aspecto todo lo que quisiera entrar sin permiso en las vidas de los locales, desde catástrofes naturales a malos espíritus.
Este gran tótem leopardo es la pieza más espectacular encontrada en el yacimiento. Milagrosamente intacta fue hallada en actitud de guardián mirando hacia la puerta. Como es habitual en este tipo de piezas representa a un hombre cargando a cuestas con un leopardo, un animal muy representado en Karahantepe que podría considerarse su espíritu protector o símbolo.
Foto: Francesc Cervera
Sin embargo, con el tiempo la extensión de la agricultura separó al hombre de sus raíces nómadas, con lo que los animales fueron desapareciendo de la iconografía religiosa en favor de una visión más antropocéntrica. Máscaras y retratos humanos suplantaron pues a los depredadores, cuya influencia sobre las vidas de los habitantes iba disminuyendo conforme se dominaba la tierra.
Así pues los recientes descubrimientos realizados en los últimos dos años han desvelado al mundo un yacimiento de suma importancia. Tan relevante como lo fue Göbekli Tepe en los años noventa, el conjunto de santuarios de Karahantepe permitirán a los investigadores comprender mejor esta curiosa cultura surgida hace más de 11.000 años en la parte más septentrional del Creciente Fértil.
Se dice que Karahan Tepe es mucho mayor que Göbekli Tepe
Los arqueólogos han estado trabajando en el Karahan Tepe sitio de, que a menudo se llama el sitio hermano de sitio de Göbekli Tepe Göbekli Tepe, desde 1997. El sitio está ubicado cerca de Yağmurlu y aproximadamente a 35 kilómetros al este del de 12.000 años de antigüedad.
A lo largo de los años, los arqueólogos han realizado una serie de descubrimientos asombrosos en el sitio de Karahan Tepe. En particular, toneladas de enterrados en forma de T obeliscos, similares a los tallados con animales salvajes en Göbekli Tepe, han llevado a los investigadores a concluir que Karahan Tepe “es mucho mayor” que su “hermana menor”, Göbekli Tepe.
Los arqueólogos ya han encontrado tallas de animales en Karahan Tepe similares a la conocida Piedra del Buitre y otras en Göbekli Tepe. (Sue Fleckney / CC BY-SA 2.0)
El jefe de excavaciones en Karahan Tepe, el profesor Dr. Necmi Karul, dijo a Hurriyet que “se conocen en la región 12 lugares estimados en el mismo período que Göbekli Tepe, uno de los cuales es Karahan Tepe”.
Hablando en el X Congreso Internacional de Turismo Turístico, el Cultura y Turismo ministro de , Mehmet Nuri Ersoy, dijo que un “programa de excavación rápida e intensiva” continúa en Karahan Tepe, que hasta la fecha ha producido “250 obeliscos con figuras de animales”. Ersoy afirma que las excavaciones planificadas probarán que el asentamiento en Karahan Tepe “será mucho más antiguo que el Göbekli Tepe de 12.000 años”.
Las excavaciones en curso en Karahan Tepe probablemente revelarán más obeliscos en forma de T en el centro del sitio como estos en Göbekli Tepe. (Joaquín / Adobe Stock)
Karahan Tepe puede restablecer “El punto cero de la historia mundial”
El alcalde de Haliliye, Mehmet Canpolat, le dijo a Hurriyet que hay muchas similitudes entre Karahan Tepe y Göbekli Tepe, que dijo “arrojan luz sobre la historia mundial”, lo que representa el primer templo conocido jamás construido.
¡Karahan Tepe bien podría ser la hermana mayor de Göbekli Tepe!
Si bien Göbekli Tepe tiene el récord mundial en los titulares de los medios y en otros lugares como el templo más antiguo de su tipo jamás descubierto, hay varios otros aspirantes a esta corona en Turquía. Según Jens Notroff, arqueólogo del Instituto Arqueológico Alemán que está trabajando en el sitio de Göbekli Tepe, “se han encontrado versiones más pequeñas de los pilares, símbolos y arquitectura tallados en piedra en Göbekli Tepe en asentamientos hasta a 200 kilómetros de distancia”, incluido Karahan. Tepe.
Stone Hills
La región de estos asentamientos se llama “Taş Tepeler”, que significa literalmente Stone Hills. Con una superficie de 200 kilómetros de un extremo a otro, Taş Tepeler es un territorio de Anatolia y Mesopotamia Superior que albergó las primeras comunidades asentadas.
Taş Tepeler cuenta con 12 sitios principales, incluido Göbeklitepe. Unos siete de estos sitios grandes y pequeños son ahora sitios de excavación que arrojarán luz sobre un período histórico crucial pero poco conocido.
Entre los sitios de Taş Tepeler se encuentran Karahantepe, Harbetsuvan, Gürcütepe, Kurttepesi, Taşlıtepe, Sefertepe, Ayanlar, Yoğunburç, Sayburç, Çakmaktepe y Yenimahalle. Hasta donde sabemos, Taş Tepeler es el primer ejemplo de sedentarismo y unión social en la tierra. En Taş Tepeler, los seres humanos experimentaron con ejemplos de trabajo organizado y especialización por primera vez.
Estelas en Karahantepe, Sanliurfa. Foto: AA
Limes en Rumania
Limes en Rumania
Rumania
Hay tres vallas en Rumania, en el centro-sur de Dobruja, que se extienden desde el Danubio hasta la costa del Mar Negro. Si bien la cronología relativa del complejo es ampliamente aceptada, la fecha exacta de cada fortificación está actualmente en disputa. Los eruditos colocan su erección en diferentes fechas en el período medieval temprano, en la segunda mitad del primer milenio. En lo que respecta a los constructores, dos teorías han ganado aceptación, con partidarios divididos, en gran medida, en líneas nacionales. Así, la historiografía búlgara considera que las fortificaciones fueron construidas por el Primer Imperio Búlgaro como una defensa contra los diversos grupos nómadas que deambulan por las estepas del norte del Ponto. Por otro lado, varios historiadores rumanos han tratado de atribuir al menos parte de los muros al Imperio bizantino bajo los emperadores Juan I Tzimisces y Basilio II, que controlaron la región en la segunda parte del siglo X y durante todo el siglo XI.
El vallum más antiguo y más pequeño, el pequeño dique de tierra, tiene 61 km de longitud, que se extiende desde Cetatea Pătulului en el Danubio hasta Constanţa en la costa del mar. Totalmente hecho de tierra, no tiene construcciones defensivas construidas sobre él, pero tiene un foso en su lado sur. Esta característica ha sido interpretada como indicativa de construcción por una población que vive al norte del movimiento de tierras, para protegerse de un enemigo en el sur.[2]
El segundo vallum, el Gran Dique de Tierra, de 54 km de longitud, se superpone al más pequeño en algunas secciones. Comienza en el Danubio, sigue el valle de Carasu y termina en Palas, al oeste de Constanza. Su altura promedio es de 3.5 m, y tiene fosos en ambos lados. En él se construyen 63 fortificaciones: 35 más grandes (castra) y 28 más pequeñas (castella). La distancia media entre fortificaciones es de 1 km. El vallum muestra signos de reconstrucción.
El último vallum que se construyó, el Stone Dyke, también está hecho de tierra, pero tiene un muro de piedra en su cresta. Tiene una longitud de 59 km y se extiende desde el sur de Axiópolis hasta la costa del Mar Negro, en un punto a 75 m al sur del pequeño muro de tierra. El agger tiene aproximadamente 1,5 m de altura, mientras que el muro de piedra en la parte superior tiene una altura promedio de 2 m. Tiene un foso en su lado norte y 26 fortificaciones, la distancia entre ellas varía de 1 a 4 km.
La comuna Valu lui Traian (anteriormente Hasancea) lleva el nombre del vallum.
En la parte norte de Dobrogea, en la orilla sur del Danubio, había un muro, probablemente construido por Trajano. El muro fue construido entre hoy Tulcea y la antigua ciudad de Halmyris (60 km) en el este. El muro fue descubierto mediante fotografías aéreas [3]
Cetatea Pătulului es una fortificación romano-bizantina, identificada por algunos con el nombre romano FLAVIANA (no Flaviana Castra),[1] situada a 2 km al noroeste de Cochirleni, comuna de Rasova, Rumania.[2]
Rasova es una comuna en el condado de Constanța, en el norte de Dobruja, Rumania .
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