Antigüedad
Inscripciones chinas Shang
Inscripciones oraculares chinas Shang
La dinastía Shang (chino: 商, Wade-Giles: Shang1, pinyin: Shāng) (1766a.c–1122a.c), 商 quiere decir “comercio”, por lo tanto, quiere decir “la dinastía comercial”. También conocida como dinastía Yin (殷), (殷 también quiere decir ardiente o apasionado) es la segunda dinastía en la historia de China y la primera cuya existencia histórica está documentada. Su extensión territorial abarcaba el valle del río Amarillo.
Hasta el siglo XX muchos expertos dudaban de la existencia real de la dinastía Shang, dado que no se disponía de evidencias al respecto; todas las menciones a los reyes Shang aparecían en obras chinas escritas muchos siglos después, durante la época Zhou. Sin embargo, numerosos descubrimientos arqueológicos realizados a lo largo del siglo XX confirmaron la existencia de esta dinastía y por tanto la fiabilidad de los textos del periodo Zhou.
Los principales hallazgos arqueológicos en el valle del río Amarillo que han confirmado la existencia de los reyes Shang son los objetos rituales de bronce y, muy en especial, los huesos oraculares, caparazones de tortuga (plastrones) y grandes omóplatos de animales (en su mayor parte de ganado bovino) sobre los que se realizaban y escribían predicciones oraculares basadas en la piromancia.
Estas inscripciones tenían típicamente tres secciones: una pregunta para el oráculo, la contestación del oráculo, y el resultado que reflejaba si el oráculo tenía razón. Estos textos escritos en los huesos oraculares son la forma más antigua que se ha conservado de la escritura china y han desempeñado un papel fundamental en las investigaciones recientes sobre el origen y desarrollo de los caracteres chinos. La información proporcionada por los huesos oraculares provee una visión privilegiada de las primeras etapas de la civilización china sobre variados aspectos, como política, economía, cultura, religión, geografía, astronomía, calendario, arte y medicina.
Yinxü y Las inscripciones sobre caparazones de tortugas
La existencia de la civilización china se ha registrado durante el transcurso de miles de años, y ha podido ser comprobada en los tiempos actuales de muy rica sobre todo en reservas subterráneas. A partir del siglo 20 en que se introdujo en China la arqueología contemporánea, se han producido muchos e importantes descubrimientos arqueológicos.
En el municipio An´yang de la provincia de Henán, en el centro de nuestro país, existe una ruina metropolitana de 24 kilómetros cuadrados de superficie, mundialmente reconocida como la ruina Yinxü. Conforme a los registros históricos, en el siglo 14 antes de nuestra era, el rey de la dinastía Shang, Pan Geng, trasladó hasta allí la capital desde Qüfu, provincia de Shandong. En los 300 años posteriores ese lugar resultó el centro político, cultural y económico de la dinastía.En el año 1046 a.n.e., el rey Wu de la dinastía Zhou, derrotó al último rey Zhou de la dinastía Shang, de modo que este lugar fue convertido en una ruina. Como la dinastía Shang se nombraba Yin, y la palbra ruina se pronuncia en chino como Xü, de ahí se derivó el nombre de Yinxü, el que mantiene desde entonces.
(foto: Yinxü)
La exploración y descubrimiento de Yinxü, ha sido el logro arqueológico más importante del siglo 20. Se han desenterrado gran cantidad de reliquias, incluidas las inscripciones sobre caparazones de tortugas, objetos de bronce, entre otros. El primer descubrimiento ha sido clasificado como uno de los grandes eventos en la historia arqueológica del mundo.
(foto: las inscripciones sobre caparazones de tortugas)
Esas inscripciones son letras antiguas inscritas en las cubiertas y los huesos de los animales. Para lograr tal hecho, primeramente se extraía la sangre y la carne de los huesos y se cortaban, luego eran grabados con alguna herramienta de corte, en la parte interior del caparazón o la parte exterior del hueso del animal. Los grabados se realizan por medio de ordenanzas. Los divinatorios, o sea, los encantadores, esculpen su nombre, la fecha de adivinación y las preguntas a plantear en el caparazón o hueso. Queman luego las grabaduras, que al ser calentadas, se agrietan y esas aberturas son llamadas “zhao”. Los encantadores analizan las direcciones de esas grietas y dan finalmente un resultado. Esculpen también las envolturas o los esqueletos de ser exactos los resultados de la adivinación. Finalmente esos caparazones o huesos con toda grabadura son conservados como archivos oficiales.
En Yinxu, se han desenterrado hasta la fecha más de 16,000 pedazos de caparazones y huesos, algunos completos, y otros, pedazos sin escrituras. Según estadísticas realizadas, los diversos tipos de caracteres grabados en ellos, totalizan más de 4,000, y aproximadamente 3,000 han sido estudiados e investigados por los eruditos, los que mediante sus explicaciones han planteado que solamente han identificado mil de esos caracteres, pues los restantes no se encuentran legibles, presentando grandes divergencias por parte de los eruditos. A pesar de esto, a través de estos mil caracteres, la gente ha podido conocer en general la política, economía, cultura, entre otros, de la dinastía Shang.
Además de las inscripciones realizadas en la dinastía Shang, últimamente se han descubierto otros idénticos grabados de más temprana edad, pertenecientes a la dinastía Zhou del Oeste. Pero no catalogados de tanta importancia como los de la dinastía Shang, por su poco contenido y cantidad.
El significado más importante del desenterramiento en Yinxü, no reside sólo en las letras en los caparazones y los huesos, ya que los arqueólogos han descubierto allí más de 50 ruinas de palacios, templos y otras construcciones, 12 tumbas de emperadores, miles de cementerios de aristócratas y plebes, mil fosas de sacrificio, cinco talleres de artesanía, más de 30 hoyas de carretas y caballos, así como gran cantidad de objetos de bronce, jade, cerámica, hueso, todo lo cual ha ofrecido una representación e imagen de la sociedad antigua de nuestro país.
Algunos descubrimientos arqueológicos se correlacionan poco con relatos escritos acerca de la dinastía Shang, que gobernó desde la caída de la dinastía Xia hasta la época de la Dinastía Zhou de alrededor de 700 años, hasta alrededor de 1000 a.C. La fecha es sólo aproximada porque los historiadores no están de acuerdo en la datación. Los principales relatos antiguos están en las Actas del Gran Historiador que fueron escritos entre aproximadamente 109 a.C y 91 a.C por Sima Qian y otro texto que se llama los Anales de bambú (竹 书 纪年) que era un texto que se dice que fue enterrado con el rey de Wei, que murió en el 296 a.C y fue redescubierto en el 281 d.C, durante la dinastía Jin. El texto fue escrito en piezas planas de bambú, y es por eso que se llama los Anales de bambú. Sin embargo, al igual que las historias acerca de la dinastía Xia, las historias sobre Shang puede ser mitos o fábulas simplemente que estaban vigentes en la época de los Reinos Combatientes. A diferencia de la dinastía Xia, en la dinastía Shang había registros escritos en forma de inscripciones sobre huesos y objetos de bronce. El Imperio Shang tenía una jerarquía gobernante, un alto nivel de la artesanía de bronce, y un sistema de escritura jeroglífica.
Los Antiguos Registros Escritos
Está escrito que el rey Tang de la tribu Shang (1675-1646) vio caer al ultimo gobernante Xia. El último rey Xia, Jie, fue nombrado, y vivía en el lujo y la decadencia, y además él era opresivo. Así que empezó a atacar el pueblo de Xia, Tang empleó hombres sabios para que lo ayudaran. Hubo una rebelión, y Tang Shang conquistó a los Xia en el año 1600 antes de Cristo. El propio pueblo de Jie se puso del lado de los Shang. Se dice que él gobernó bien, porque bajó los impuestos y las tribus periféricas se convirtieron en vasallos. Su territorio se incrementó de manera que incluyó territorios mucho más al sur y llegó hasta el mar.
El último rey Shang se llamó Shang Zhou. Una tribu vecina se llamaba Zhou. Al igual que el rey Jie de la Dinastía Xia, fue derrotado por los gobernantes Zhou debido a esto su propia gente se rebeló. Sus propias tropas y los esclavos se unieron a los Zhou en la última batalla. El nuevo gobernador Zhou fue llamado Zhou Wu. Él permitió que el hijo de Shang Zhou gobernase el pueblo Shang como vasallos. Los gobernantes Zhou también desterraron a personas destacadas de los Shang a otros lugares.
Descubrimientos Arqueológicos de la Era de Cultura Shang
Se han encontrado ciudades de la era Shang alrededor de todo el río Amarillo y al sur, cerca del río Yangtze. Estos pueblos, aparentemente compartían una cultura similar. Las ciudades tenían murallas para su defensa. Se cree que la ciudad Yin de la dinastía Shang fue nombrada capital. Se encontró cerca de Anyang. El sitio se llama las Ruinas de Yin. Las tumbas Yin y lugares rituales contenían armas y los restos de los seres humanos y los animales sacrificados. El pueblo Shang practicaba el sacrificio humano. Fueron encontrados miles de huesos del oráculo con inscripciones. Los huesos de oráculo son los huesos en los que las personas inscribían jeroglíficos. Se cree que estos huesos fueron utilizados para la adivinación o la magia. Los jeroglíficos muestran que las personas tenían un lenguaje escrito.
En 1976, los arqueólogos abrieron una tumba sin saquear llamada Tumba 5. Era la tumba de Lady Fu Hao. Ella tuvo una carrera militar, y un historiador llamado Robert Thorp dijo que la variedad de armas en su tumba se correlacionan con las inscripciones de huesos del oráculo. Las vasijas de bronce y herramientas demostraron que la gente Shang tenía un alto nivel de tecnología de la metalurgia del bronce. Ellos fueron capaces de producir grandes ollas.
De acuerdo a los relatos históricos, la civilización en la región se desarrolló alrededor del río Amarillo bajo el reinado de las dinastías Xia, Shang y Zhou. No hay mención de ningún otro reino avanzado en la región. Sin embargo, los arqueólogos han descubierto otras culturas la Edad del Bronce que desmienten la idea de que la civilización de los pueblos de la región sólo se desarrolló a lo largo del río Amarillo.
Sanxingdui (2000-1250 a.C)
La más importante de las civilizaciones la Edad del Bronce que existieron contemporáneamente con la cultura Shang que se llama la cultura de Sanxingdui. Fue descubierta hace unos 25 años. La tecnología del bronce de este reino era diferente a la del pueblo Shang y tal vez más avanzada. Esta cultura también construyó grandes ciudades amuralladas. Sin embargo, la cultura era muy diferente. Arqueólogos chinos descubrieron esta civilización en el año 1986. El sitio arqueológico se encuentra en la provincia de Sichuan unos 40 kilómetros al noreste de Chengdu. Análisis de plomo y otros metales en las piezas fundidas de bronce indica que algunos de los metales se obtienen de los mismos lugares que las personas Shang obtuvieron su metal. Al parecer, hubo un contacto entre los dos pueblos, pero la gente Sanxingdui no se menciona en los relatos antiguos, como los Anales de bambú. Esto contradice la historicidad de los antiguos registros escritos.
La civilización tuvo la alta tecnología de fundición de bronce, y fueron capaces de hacer objetos de bronce inusualmente grandes y finamente diseñados, mediante la adición de plomo para hacer la aleación de bronce. No hay textos o no se han encontrado inscripciones, y no hay ninguna mención de esta cultura en los registros de otras culturas. Esta cultura sigue siendo intrigante y misteriosa. Lea más en Sanxingdui.
Desarrollo de Escritura china en Dinastía Shang
Los escritos en la zona se remontan a los jeroglíficos que se usaron en la dinastía Shang. No se sabe mucho acerca de la dinastía Shang, o su escritura. No se han encontrado documentos, apenas sólo unos miles de jeroglíficos escritos en objetos de bronce y los huesos del oráculo. Los primeros textos que se han descubierto datan de la dinastía Zhou (1045-256 a.C), que conquistó la dinastía Shang. El sistema de escritura jeroglífica más tarde evolucionó en los caracteres chinos ideográficos y parcialmente fonéticos que se utilizan hoy en día. Lea más sobre la escritura china.
Profecías chinas
Las inscripciones tienen más de 3.000 años de antigüedad. (Museo Nacional de Escritura China)
El Museo Nacional de Escritura China de Anyang, en la provincia de Henan, solicita ayuda. Lleva ya años estancado con unas escrituras de más de 3.000 años de antigüedad. Tienen miles de caracteres tallados en huesos y conchas, quizá los primeros registros de la civilización china, esperando a ser traducidos, pero no hay manera. A estas alturas, se les hace bola, nadie en el departamento sabe qué significan y, por eso, el museo ha difundido un SOS global en busca de auxilio y ha ofrecido una jugosa recompensa para aquellos que resuelvan el misterio: nada menos que 100.000 yuanes, alrededor de 13.000 euros, por cada símbolo descifrado.
Aunque las inscripciones, que se remontan a los tiempos de la dinastía Shang (reinó desde el 1766 a.C. hasta el 1122 a.C.), se parecen a los caracteres de la escritura china moderna, llevan siendo un enigma durante siglos. Aquí no hay piedra Rosetta ni nada que se le parezca. No obstante, los investigadores ya han logrado descifrar alrededor de 2.000 caracteres, y son los 3.000 restantes los que se les atascan. Se cree que los símbolos fueros esculpidos en conchas de tortuga y omóplatos de bueyes por adivinos y que registran predicciones de todo tipo, desde el clima o los impuestos de la época hasta el paso de un cometa o un eclipse.
Si traducimos un sustantivo o verbo, el hallazgo puede resucitar el estudio de otras escrituras y ayudarnos a entender la historia
El museo espera que los 13.000 euros de recompensa sean incentivo suficiente para que los expertos emerjan. Asimismo, ofrece 50.000 yuanes, unos 6.300 euros, para cualquiera que proporcione una explicación definitiva para uno de los caracteres en disputa. En este sentido, las autoridades chinas alientan a estos futuros investigadores a utilizar, junto con los métodos más tradicionales, las técnicas que la tecnología ofrece (como los big data y la nube), para comprender y compartir los progresos que se vayan produciendo. Aquellos que soliciten la recompensa tendrán que escribir un informe que debe ser recomendado al menos por dos especialistas de alto nivel antes de su presentación.
Quedan más de 3.000 símbolos por descifrar. (Museo Nacional de Escritura China)
Nombres de personas o lugares
La teoría principal hasta ahora asegura que la mayoría de los caracteres que quedan por traducir hacen referencia a nombres de personas o lugares. “Los textos se escribieron hace miles de años y muchos lugares han cambiado sus nombres, por eso es difícil verificarlos”, señala Liu Fenghua, especialista de la Universidad de Zhenghou, en el diario ‘Chengdu Economic Daily’.
Se cree que los símbolos fueros esculpidos por adivinos y que registran predicciones sobre el clima o los impuestos de la época
Dada la expectación que gira en torno a los extraños símbolos, dar significado a uno de ellos sería un logro considerable en la carrera de cualquier científico. “Si interpretamos un sustantivo o un verbo, el hallazgo puede resucitar la investigación de muchas escrituras de este tipo y nos puede ayudar a entender mejor la historia antigua”, asegura Zhu Yanmin, profesor de historia de la Unviersidad de Nankai, en el ‘Beijin Youth Daily’. Sin embargo, el proceso está durando más de la cuenta y, como señala Fenghua, “muchos investigadores han cambiado su foco de investigación a otros temas por razones económicas”.
Una nueva era de la arqueología
El misterio pervive no solo desde que se inició la investigación, sino que se conoce desde hace siglos, cuando los huesos fueron desenterrados por unos granjeros de la provincia de Henan. Muchos de ellos se vendieron en los mercados de medicina tradicional y no fue hasta 1899 cuando el anticuario chino Wang Yirong hizo públicas las inscripciones talladas en lo que se creía que eran “huesos de dragón”.
Entrada del museo. (Museo Nacional de Escritura China)
El descubrimiento provocó un gran interés entre los coleccionistas ricos, a muchos de los cuales se les dio gato por liebre y terminaron comprando falsificaciones. El misterio se adormeció hasta 1920, cuando la Academia de las Ciencia de China descubrió más huesos que se remontan al comienzo de la Edad de Bronce y, en concreto, a la dinastía Shang. Desde entonces, se han desenterrado cerca de 200.000 fragmentos óseos y cerca de un cuarto de ellos tienen inscripciones.
De superar el punto muerto en el que se encuentra la investigación ahora, se iniciaría así una nueva era en la que gracias a las nuevas tecnologías y la ayuda de personas fuera de los círculos habituales del museo o académicos se podría encontrar solución a los enigmas que aún plantean los artefactos de la antigüedad.
Los siete sabios de Grecia
Los siete sabios de Grecia
La denominación de Siete Sabios fue el título dado por la tradición griega a siete antiguos sabios griegos (alrededor del 620 — 550 adC), renombrados por su sabiduría práctica que consistía en una serie de aforismos y dictámenes memorables. Merecieron dicho nombre a debido a que sus enseñanzas o frases son una guía de la vida de los hombres. Este conjunto incluye tanto a filósofos como a estadistas o legisladores.
Los siete sabios de Grecia: Quilón de Esparta, Bías de Priene, Cleóbulo de Lindos, Periandro de Corinto, Pítaco de Mitilene, Solón de Atenas, Tales de Mileto.
Mosaico de los 7 sabios en Mérida
Les dejo también, para su edificación moral, las sentencias de los siete sabios:
Sentencias de los Siete Sabios
Recopiladas por Demetrio de Falero
- Cleobulo de Lindos, hijo de Evágoras, dijo:
La medida es lo mejor.
Debes respetar a tu padre.
Manten bien el cuerpo y el alma.
Sé amigo de escuchar y no muy hablador.
Aconseja lo mejor a los ciudadanos.
Domina el placer.
No hagas nada por la violencia.
Considera tu adversario al enemigo del pueblo.
No pelearse con la mujer propia ni acariciarla en exceso delante de otros, pues lo uno puede parecer embobamiento y lo otro desvarío.
No castigues a los criados mientras bebes, pues parecerá que no sabes soportar el vino.
Cásate con mujer de tu rango, pues si la tomas entre las de clase más alta, ganarás amos y no parientes.
No te rías en compañía del burlón, pues te ganarás el odio de los burlados.
En el éxito no te ufanes, en la desdicha no te humilles.
- Solón de Atenas, hijo de Ejecéstides, dijo:
Nada en demasía.
No hagas de juez; en ese caso, te enemistarás con el juzgado.
Huye del placer que procura pesar.
Guarda la bondad de carácter, que es más segura que el juramento.
Sella tus palabras con el silencio, y el silencio con la oportunidad. No mientas, sino manten la verdad.
Ocúpate en cosas serias.
No digas cosas más justas que tus padres.
No adquieras amigos deprisa, y no rechaces deprisa a los que tienes.
Si aprendes a obedecer sabrás mandar.
Cuando exijas que otros presenten cuentas, ofrécelas tú también.
Aconseja no lo más agradable, sino lo mejor a los- ciudadanos.
No trates con los malos.
No digas lo que no has visto.
Sabe y calla.
Sé suave con los tuyos.
Conjetura lo invisible por lo visible.
- Quilón de Esparta, hijo de Damageto, dijo:
Conócete a ti mismo.
Cuando bebas no hables mucho; porque te equivocarás. A los convites de los amigos ve despacio, y a sus desgracias deprisa.
Celebra tus bodas sin gran gasto. Considera feliz al que ha muerto. Honra al de más edad.
Elige antes un castigo que una ganancia vergonzosa. Pues lo uno aflige una sola vez, y lo otro para siempre.
No te rías del desgraciado.
Que tu lengua no se anticipe a tu mente.
Domina tu carácter.
En el camino no te apresures en adelantar.
No ansies lo imposible.
No muevas las manos al hablar, que es de locos.
Obedece a las leyes.
Si eres injuriado, responde con justicia; si maltratado, toma tu venganza.
- Tales de Mileto, hijo de Examias, dijo:
Da fianza, y ya tienes ruina.
Acuérdate de tus amigos, presentes y ausentes.
No embellezcas tu aspecto, sé hermoso en tus actos.
No te enriquezcas mal.
No dudes en adular a tus padres.
Como los regalos que ofrezcas a tus padres, tales serán
los que tú, en tu vejez, recibirás de tus hijos.
Es difícil conocerse a sí mismo.
Lo más dulce es conseguir lo que deseas.
La actividad es un tormento.
La intemperancia es dañina.
La falta de educación es pesada.
No estés inactivo, ni aunque seas rico.
Oculta tus males en casa.
Mejor ser envidiado que compadecido.
Usa la medida.
No creas a cualquiera.
- Pitaco de Lesbos, hijo de Hirras, dijo:
Conoce el momento oportuno.
Lo que quieras hacer, no lo digas; pues si fallas se burlarán de ti.
Cuando castigues al vecino, no lo hagas personalmente.
Devuelve los préstamos.
No hables mal del amigo, ni bien del enemigo; que no es consecuente eso.
Firme la tierra, inseguro el mar.
La ganancia es insaciable.
- Bías de Priene, hijo de Teutámides, dijo:
La gran mayoría de los hombres son malos.
Debes mirarte al espejo. Si eres hermoso, haz bellas obras; si eres feo, corrige el defecto de tu naturaleza con la belleza de tu conducta.
Ponte a la obra lentamente; pero lo que comiences, asegúralo.
No seas ni bonachón ni taimado.
Acerca de los dioses di que existen.
Escucha mucho.
Habla lo oportuno.
Siendo pobre no censures a los ricos, a no ser que saques gran provecho.
No alabes a un hombre indigno por su riqueza.
Gana después de persuadir, no haciendo violencia.
Lo que te salga bien, atribuyelo a los dioses, no a ti mismo.
- Periandro de Corinto, hijo de Cípselo.
Todo es práctica.
La serenidad es algo hermoso.
La precipitación es resbaladiza.
Los placeres son mortales, las virtudes inmortales.
La democracia es mejor que la tiranía.
En la ventura sé moderado, en la desdicha prudente.
Muéstrate digno de tus progenitores.
Busca el elogio para tu vida, y la felicidad tras la muerte.
Para tus amigos, felices o desdichados, sé el mismo. No hagas ninguna revelación de cosas secretas.
Insulta como si fueras a hacerte pronto amigo.
Sírvete de leyes antiguas y de alimentos frescos.
No sólo castiga a los que delinquen, sino deten a los que quieren hacerlo.
Oculta tus desgracias para no regocijar a tus enemigos.
(Estobeo, 3,1, 172)
La tradición de los siete sabios se mantuvo a lo largo de los siglos. Por ejemplo, Plutarco compondría un Ágape para siete sabios. Aunque la relación de sabios ha sufrido cambios, la más moderna incluye a los siguientes:
- Cleóbulo de Lindos: se le atribuye la máxima La moderación es lo mejor. Gobernó como tirano de Lindos, en la isla griega de Rodas, c. 600 a.C. También se conoce su aforismo Aceptar la injusticia no es una virtud, sino todo lo contrario.
- Solón de Atenas: acuñó la máxima Nada en exceso para guiar el comportamiento práctico de los hombres. Solón (640 a.C. – 559 a.C.) adquirió fama como legislador y reformador social en Atenas. Otro aforismo atribuido a él es No tengas prisa en buscar nuevos amigos, pero una vez encontrados no tengas prisa en deshacerte de ellos
- Quilón de Esparta: autor de la máxima No desees lo imposible. Político del s. VI a.C., intenta mejorar los sistemas para controlar mejor a los más altos funcionarios del estado. Asimismo, se le atribuye la militarización de la vida civil de Esparta y las primeras medidas para la educación castrense de la juventud.
- Bías de Priene: La mayoría de los hombres son malos, indica la máxima atribuida a este político griego que alcanzó gran fama como legislador en el s. VI a.C.
- Tales de Mileto: Filósofo y matemático, destacó gracias a su sabiduría práctica, a su notable capacidad política y a la gran cantidad de conocimientos que poseía. La máxima que se le atribuye, que figuraba en el frontón del templo de Apolo en Delfos, es Conócete a tí mismo.
- Pitaco de Mitilene: fue un estadista griego (c. 650 a.C.) que gobernó en Mitilene (Lesbos), junto con el tirano Mirsilo. Pitaco intentó restringir el poder de la nobleza, y ejerció el poder apoyándose en las clases populares. El aforismo por el que se le conoce es Debes saber escoger la oportunidad.
- Periandro de Corinto: como tirano de Corinto, intentó mantener la estabilidad política interna y propició la prosperidad del país durante el período entre los s. VII-VI a.C. Se ocupó de reglamentar y humanizar el trabajo de los esclavos, protegió a la clase social de los campesinos pobres y obligó a la nobleza a reducir la suntuosidad de sus gastos. También llevó a cabo una sistemática política colonial de conquistas. La larga estabilidad de que gozó Corinto bajo su mandato contribuyó a que fuera incluido en el grupo de los sabios de Grecia. Es autor de la máxima Sé previsor con todas las cosas
Sócrates se refiere oblicuamente a un cuento de los Siete Sabios que apunta a que la humildad es la madre de la sabiduría (la historia es registrada por Diógenes Laercio). La historia cuenta que unos pescadores de la isla de Cos encontraron entre sus redes el trípode de Helena de Troya, la cual lo echó al agua en su viaje de retorno desde Troya a Esparta. Los pescadores habían vendido por anticipado el contenido de sus redes a unos viajeros de Mileto, pero al encontrar el trípode se negaron a dárselo a los viajeros de Mileto. De esta forma, estalló una guerra entre Cos y Mileto. Viendo que la guerra no tenía fin, los combatientes acudieron al Oráculo de Delfos, para saber qué hacer con el trípode. El oráculo mandó que el trípode fuese entregado al hombre más sabio, así que aquel fue entregado a Tales de Mileto. Sin embargo, modestamente rechazó el título y le mandó el trípode a Bías de Priene, el cual también rechazó el honor y se lo envió a otro miembro del grupo. Al final, el trípode fue dedicado a Apolo.
Quilón de Esparta
Bías de Pirene
Cleóbulo de Lindos
Periandro de Corinto
Pítaco de Mitilene
Solón de Atenas
Tales de Mileto
Cuevas de Ellora
Cuevas de Ellora
Vista de una gruta jaina.
Coordenadas: 20°01′35″N 75°10′45″E; India
N.° identificación: 243
Año de inscripción
Ellora o Ellorā es una localidad de la India, antiguamente conocida con el sobrenombre de Elapurā, se encuentra a 30 km de la ciudad de Aurangābād en el distrito homónimo, en el pradesh o estado federal de Maharashtra.También se conoce como Elapura en la literatura Rashtrakutakannada
Ellora es célebre por su arquitectura rupestre, con monasterios y templos budistas (grupo A: grutas 1 a 12 que datan del aproximadamente el año 500 a aproximadamente el 650), hinduistas (grupo B: grutas 13 a 29 establecidas entre los siglos VII y VIII) y jainas (grupo C: construidos entre los siglos VIII y XIII).
Estas estructuras han sido excavadas en un precipicio de los montes Charanandri, siendo su número total 34, de las cuales 12 son budistas, 17 hinduistas y 5 jainistas. La coexistencia de estas edificaciones demuestra cierto grado de tolerancia interreligiosa en la India hasta la llegada del Islam.
Las grutas budistas son las estructuras más antiguas y consisten principalmente en vihāras y monasterios, algunos de estos son verdaderos santuarios exornados por una imagen del Buda. En este conjunto la joya del lugar es el templo de Kailāsanātha (725–755), se trata de un edificio en forma de templo, completamente excavado en la roca.
Vista del templo de Kailāsanātha.
La costumbre dicta que los templos levantados por nuestros antepasados se construían piedra a piedra. Con todo tipo de materiales, uniones y técnicas. Por eso resulta tan sorprendente encontrarse y comprender el templo de Kailasa, el gran tesoro de las cuevas de Ellora. Su espectacularidad radica en que está formado por una sola roca, lo que la convierte en la escultura monolítica más grande del planeta. El templo Kailasa se esculpió empezando por la parte superior de una escarpadura hasta convertirse en la perla de las 34 cuevas de Ellora, el culmen de la arquitectura sobre roca de India.
El viaje de un joven oficial británico en 1810 dio a conocer al mundo uno de los monumentos más fascinantes de la India: las cuevas de Ellora
En el año 1983, Ellorā ha sido declarado Patrimonio Mundial de la Humanidad por la Unesco.
Uno de los templos de la cueva en Ellora
Ellora es un lugar arqueológico que se encuentra a unos 30 kilómetros de la ciudad de Aurangabad, y fue construido por los gobernantes Rashtrakutta. Este lugar es muy conocido por sus cuevas monumentales, las cuales son consideradas Patrimonio de la Humanidad.
De entre ellos destaca el ya mencionado templo de Kailasa, nombre que recibe la supuesta morada de Siva en el Himalaya. El rey Krishna I está detrás de la decisión de excavarlo en el año 760 a la mayor gloria del dios. Sus paredes ennegrecidas, siglos después, siguen representando escenas del Ramayana, la epopeya atribuida a Valmiki, o el Mahabharata.
En el templo de Kailasa, Templos y cuevas de Ellora.
A menos de 100 kilómetros de las cuevas de Ajanta, se trata de un conjunto de construcciones excavadas a lo largo de dos kilómetros en una escarpadura de basalto. Comprender lo que ocurrió entre los años 600 d.C. y 1000 d.C. conlleva visualizar a generaciones y generaciones de monjes excavando laboriosamente en esta pequeña pendiente bajo las órdenes de quien tenía en su cabeza un plano que le mostraba el templo que se encontraba dentro de esa montaña. Solo había que retirar lo que sobraba.
Budistas, hinduistas y jainíes excavaron sus monasterios y templos a lo largo de dos kilómetros que conforman las cuevas de Ellora.
Estas cuevas representan el punto álgido de la arquitectura en roca de la India. Las 34 cuevas de Ellora son en realidad estructuras excavadas en la cara vertical de los cerros Charanandri, y son monasterios y templos budistas, hinduistas y jainíes que se construyeron entre los siglos V y X.
Pequeña cascada sobre varios templo hinduistas, Templos y cuevas de Ellora
Las profusas esculturas que adornan las cuevas de Ellora hablan también de la fraternidad entre religiones en India, pues de las 34 excavaciones se sabe lo siguiente. Que 12 son de factura budista de entre los años 600 y 800 d.C.; que 17 tienen impreso el carácter hindú de sus constructores entre los siglos VII y X d.C.; y que tras los cinco restantes está el esfuerzo jainita de los últimos doscientos años del primer milenio. Todos construyendo a la vez sus templos y guaridas para venerar a sus dioses, mirándose de reojo a lo largo de siglos en una carrera de fondo que ha acabado por beneficiar a la vista del visitante.
Pinturas en Ellora
A diferencia de las cuevas de Ajanta, conocidas por la belleza de sus pinturas murales, los templos excavados en la roca de Ellora destacan por sus numerosas esculturas y relieves. Pero en algunos templos, como el Kailash, aún se conservan restos de frescos que recrean episodios mitológicos, como el que aquí se reproduce.
Un dios furioso
Uno de los templos hinduistas más interesantes de Ellora es la cueva número 29, llamada Dumar Lena, datada en el siglo VIII y decorada con relieves escultóricos que recrean episodios de la vida de Shiva, como éste, en que el malvado demonio Ravana es castigado por un enfadado dios.
En las laderas de los montes Charanandri, en la región del Decán (actual estado indio de Maharashtra), y a lo largo de una línea continua de dos kilómetros, se excavaron entre los siglos VII y XI una serie de monasterios y templos pertenecientes a tres de las grandes religiones del subcontinente: hinduismo, budismo y jainismo. A diferencia de otros lugares de la India, como las vecinas cuevas de Ajanta, Ellora nunca dejó de ser visitada. Recién estrenado el siglo XVIII, el médico y viajero veneciano Niccolao Manucci, al servicio de la corte mogola, había llegado hasta allí y se había sorprendido de la calidad artística de sus esculturas y pinturas. Incluso cronistas mogoles como Muhammad Kazim admiraron la habilidad y sofisticación de los artistas que excavaron Ellora.
Un viaje peligroso
A principios del siglo XIX, John B. Seely, un oficial británico acantonado en Bombay, oyó hablar de las cuevas de Ellora, con sus magníficas esculturas y pinturas, y decidió visitarlas. Seely era un joven inquieto, curioso y apasionado por aquella India tan distinta a su Inglaterra natal. Sus superiores en Bombay intentaron disuadirle y le advirtieron de los peligros que corría, pero no lograron frenar su entusiasmo ante la que consideraba la aventura de su vida.
El 10 de septiembre de 1810, Seely emprendió un viaje que le llevaría 500 kilómetros al norte de Bombay, a través de tierras dominadas por bandidos, selvas infestadas de mosquitos, altos pasos de montaña y ríos infranqueables, bajo unas temperaturas de más de 40 grados y el acoso constante de nativos hostiles. Le acompañaba una extensa comitiva: bueyes para transportar su tienda, porteadores que llevaban su cama de campaña y su escritorio, varios sirvientes y una escolta armada de seis cipayos y un cabo. Tras varios días de agotador viaje llegaron a Poona, la cosmopolita capital de la confederación mahratta, un reino indio independiente. En Seroor, Seely cambió la guardia y compró nuevos bueyes y un camello, pero en Toka sufrió unas fiebres y tuvo que descansar varios días. Parcialmente recuperado, Seely atravesó la jungla, y por fin, a lo lejos, observó la aguja de un templo. Estaba en Grishneshwar, un pueblecito cercano a Ellora.
Seely se dirigió rápidamente a Ellora, que se hallaba a un kilómetro y medio. Cuando por fin alcanzó su objetivo, quedó extasiado ante lo que vio: «Es totalmente imposible describir los sentimientos de admiración y asombro suscitados en mi mente al advertir por primera vez aquellas maravillosas excavaciones […] ver los magníficos edificios entre los que la gente hormiguea».
Hay 34 templos en Ellora: 17 hinduistas, 12 budistas y 5 jainistas. La mayoría son cuevas abiertas en la montaña, y sólo dos son templos aislados, también excavados en la roca pero separados gradualmente hasta quedar prácticamente exentos. Uno de ellos es el templo hinduista más grande y extraordinario de la India: el Kailashanta o Kailash, que significa «montaña sagrada», la residencia de Shiva, dios de la creación y de la destrucción. El colosal templo fue construido por el rey Krishna I en el siglo VIII en un solo bloque monolítico, y se excavó desde la cima de la montaña hacia abajo. De 30 metros de alto, su entrada está flanqueada por dos columnas de 15 metros cada una y todo el edificio está repleto de intrincados relieves escultóricos. Seely hizo montar su tienda frente al Kailash, que fue el primer templo que exploró, y pasó el día siguiente escalando las galerías y penetrando en los templos más pequeños, donde registró y dibujó todo lo que veía. En una de sus incursiones, Seely descubrió el Lankeswar, una enorme capilla excavada en la roca y mayor que todo el conjunto del propio Kailash, con 27 columnas pétreas macizas que sostenían el techo.
Un lugar impactante
La profusión y belleza de tallas, relieves y esculturas de budas gigantescos en el interior de los templos budistas impresionaron al joven oficial. En el Teen Tal, un templo de tres pisos, encontró una hilera de siete budas en posición de enseñar y que aún mantenían parte de su policromía original. Seely tuvo que cruzar un kilómetro y medio de terreno escarpado para visitar los templos jainistas. En el de Indra Sabha contempló una enorme estatua sedente de Mahavira, el 24 y último tirthankara (ser que ha alcanzado la trascendencia) del jainismo.
Pero el esfuerzo de explorar todos y cada uno de los rincones de Ellora, llenos de polvo y alimañas, empezó a pasar factura a Seely, que decidió abandonar el lugar. Nunca regresó. A pesar de no ser un erudito, Seely realizó una descripción minuciosa y precisa de todo lo que vio en su libro Maravillas de Ellora, publicado en Londres en 1824, pocos años después de que el italiano Giovanni Belzoni diera a conocer al mundo los templos de Abu Simbel. En su libro, Seely habla con pasión de aquel lugar que le marcó tan profundamente: «En mi humilde opinión no existen monumentos de la Antigüedad comparables a las cuevas de Ellora […] Lector, ¿no es una completa maravilla? ¿O es de menor categoría que los lugares mencionados por Belzoni?».
Ellora era un centro comercial histórico importante de la región de Deccan, situada en una ruta comercial antigua del sur de Asia. Las cuevas de Ellora sirvieron como monasterios para monjes, templos para oraciones y un lugar para descansar de los peregrinos, pero ahora es un sitio arqueológico donde contemplar esta maravilla de la arquitectura india. Las cuevas de Ellora, junto con las cercanas cuevas de Ajanta, forman una de las principales atracciones turísticas de la región de Maharashtra.
Entrada a las cuevas de Ellora
LAS CUEVAS BUDISTAS
Cuevas budistas (1-13). Datan del siglo V al VII.
En un principio se pensó que las cuevas budistas fueron las primeras estructuras creadas entre los siglos V y VIII, pero ahora está claro para los estudiosos modernos que algunas cuevas hindúes preceden a estas cuevas. Como primera cueva budista podemos citar la número 6, y como últimas las número 11 y 12. Todas las cuevas budistas fueron construidas entre los años 630 y 700.
Estas estructuras son mayoritariamente viharas o monasterios de varios pisos. Son grandes edificios tallados en la cara de la montaña donde se incluyen viviendas, dormitorios, cocinas y otras habitaciones. En algunas de estas cuevas hay esculturas de Buda, de Bodhisattvas y otras divinidades. Y en otras cuevas, los escultores se han esforzado por dar a la piedra el aspecto de la madera.
La cueva más conocida de todas es la número 10, conocida como el Salón Chaitya o Cueva de Vishvakarma, popularmente bautizada con el nombre de la Cueva del Carpintero. La cueva del Carpintero es famosa por la estructura del techo, en que se reproduce, tallando en la roca, una estructura de madera, aunque también destaca la gran stupa que contiene en su interior. Más allá de su entrada de varios pisos está la gran sala conocida como chaitya, cuyo techo se ha tallado para dar la impresión de ser vigas de madera. En el corazón de esta cueva hay una estatua de Buda sentado en pose de predicación. Entre las cuevas budistas, las primeras nueve son monasterios.
Cueva 1
La cueva 1 es un vihara con ocho celdas, cuatro en la pared superior, y las cuatro de la pared de la derecha. Tenía un pórtico y es posible que la cueva sirviera como granero de otros viharas.
El Vishvakarma
El Vishvakarma (Cueva 10) es la única chaitya griha entre el grupo de cuevas budistas de Ellora. Localmente se la conoce como la cueva del carpintero. Esta cueva sigue las mismas pautas de construcción que las cuevas 19 y 26 de Ajanta. Por razones estilísticas, la fecha de construcción de esta cueva se calcula sobre el año 700. Hubo un tiempo en que el chaitya tenía una pantalla muro alta, la cual se encuentra en ruinas en la actualidad. Enfrente de la cueva hay un corte de roca, a la cual se entra a través de unas escaleras. A ambos lados hay columnas con cámaras en sus paredes traseras. Probablemente estaban destinadas a ser capillas subsidiarias, pero no fueron completadas. La sala principal es absidal en planta y está dividida en una nave central y otras laterales divididas por 28 columnas octogonales con soportes capitales planos. Al final del ábside de la sala chaitya hay enfrente una estupa tallada de un colosal buda sentado de 3,30 metros, y se encuentra en una postura de enseñanza (vyakhyana mudra). También hay un árbol tallado en la parte posterior. La sala tiene un techo abovedado con una especie de costillas que se han tallado en la roca imitando a los de madera.
CUEVAS HINDUES
Cuevas hinduistas (14-29). Datan de mediados del siglo VI al VIII.
Dentro de las cuevas hinduistas destaca la cueva 16, o Templo de Kailasha, centro de todo el conjunto excavado de Ellora y que simula un templo de varias plantas levantado in situ, sin embargo fue excavado de una sola pieza. Perteneciente al Grupo brahamánico, reproduce un monte sagrado que simboliza el hogar de Shiva en el Himalaya, con una delicadeza en sus detalles, con escenas de la vida hindú y su mitología esculpidas en la propia roca.
Las cuevas hindúes se construyeron entre mediados del siglo VI hasta finales del siglo VIII. La primeras cuevas (cuevas 17 y 19) fueron construidas durante el periodo Kalachuri. La primera obra se inició en las cuevas 28, 27 y 19. Estas cuevas fueron seguidas por las dos cuevas más impresionantes construidas en la primera fase, las cuevas 29 y 21. Junto con estas dos, también se trabajaba en las cuevas 20 y 26, y un poco más tarde, en las cuevas 17, 19 y 28. Las cuevas 14, 15 y 16 fueron construidas durante el periodo Rashtrakuta. El trabajo se inició en las cuevas 14 y 15, culminando en la número 16. Todas estas estructuras representan un estilo diferente de visión creativa y capacidad de ejecución. Algunos trabajos eran de tal complejidad que se requerían de varias generaciones para planificarlos y coordinarlos.
El Kailasahatha (Templo Kailash)
La cueva 16, también conocida como Kailasa o Kailasanatha, es la pieza central incomparable de Ellora. Fue diseñada para rememorar el monte Kailash, la morada del señor Shiva, y aunque parece un edificio independiente, un templo con varios pisos, lo cierto es que fue tallado en una sola roca, y cubre un área del doble de tamaño que el Partenón de Atenas. En un principio este templo fue cubierto con yeso blanco, por lo cual conseguían mayor similitud con el monte Kailash, el cual se encuentra la mayoría del tiempo cubierto con nieve.
Todas las tallas están realizadas en más de un nivel. La puerta que une los dos pisos se asemeja al gopuram del sur de la India, el cual se abre y muestra un patio en forma de U. El patio se encuentra rodeado de galerías con columnas de tres pisos de altura. Estas galerías son interrumpidas por enormes paneles esculpidos, y nichos que contienen esculturas enormes de varias deidades.
Templo de Kailasa visto desde arriba, Templos y cuevas de Ellora.
Originariamente estas galerías estaban conectadas por puentes de piedra a las estructuras del templo central.
Dentro del patio hay tres estructuras. Como es tradicional en los templos de Shiva, en primer lugar y enfrente del templo central hay una imagen del toro sagrado llamado Nandi. El templo central – Nandi Mandap – acoge al lingam (la representación del dios). El Nandi Mandap se encuentra sobre 16 pilares y tiene una altura de 29,30 metros. La base de este patio central ha sido tallado a un tamaño que sugiere que elefantes de tamaño real sostienen la estructura en alto. Un puente de piedra conecta el patio Nandi Mandap con el templo de Shiva que hay detrás. El templo en sí es piramidal y recuerda a las estructuras de los templos del sur de la India. El santuario (completado con pilares, ventanas, habitaciones interiores y exteriores, salas de reuniones y un enorme lingam en su parte central) está tallado en piedra viva con nichos, pilastras, ventanas, así como con imágenes de deidades, mithuras (figuras eróticas de hombres y mujeres) y otras diferentes figuras. La mayoría de las deidades que hay en la parte izquierda de la entrada son de Shaivaite (seguidores de Shiva), mientras que en la parte derecha hay deidades Vaishnavaites (seguidores de Vishnu). En el patio, además, hay dos pilares con el asta de la bandera, dos Dhvajastambhas. La gran escultura de Ravana intenta levantar el monte Kailasa, la morada del dios Shiva, siendo esto un hito en el arte indio. La construcción de esta cueva fue una proeza del genio humano, e implicó la eliminación de 200.000 toneladas de roca y 100 años para poder completarse.
El templo es un logro espléndido del arte Dravidiano. Este proyecto fue iniciado en Ellora por Krishna I (757-773) de la dinastía Rashtrakuta, quien gobernó desde Manyakheta en el actual estado de Karnataka. Su gobierno se extendió también por el sur de la India, así pues este templo fue excavado al estilo predominante en la época. Sus constructores fueron inspirados en las líneas del templo Virupaksha en Pattadakal.
La morada de Shiva
Vista del Kailash, en Ellora, uno de los mayores santuarios hinduistas de la India y uno de los dos únicos edificios exentos del emplazamiento.
El Dashavatara
El Dashavatara, o cueva 15 de Ellora, fue iniciada como monasterio budista. Este templo tiene un patio abierto con una mandapa monolítica en la mitad, y un templo de dos pisos en la parte trasera. El diseño de este templo está estrechamente relacionado con las cuevas 11 y 12. Los grandes paneles escultóricos que hay entre las columnas de la pared, en el piso superior, ilustran una amplia gama de temas, las cuales incluyen a los diez avatares de Vishnu. Según el Coomaraswamy, lo más significativo de esta cueva es una representación de la muerte de Hiranyakashipu, donde Vishnu con forma de hombre-león, emerge de un pilar para poner su fatal mano sobre el hombro de Hiranyakashipu.
Otras cuevas hindúes
Entre otras cuevas hindúes destacables podemos citar la Rameshwara, o cueva 21, donde se ven en la entrada figuras de las diosas de los ríos Ganges y Yamuna, y la Dhumar Lena, o cueva 29, cuyos diseños son similares a los de las cuevas templo de la isla Elephanta, cerca de Mumbai.
Otras dos cuevas, la Ravan ki Khai (cueva 14) y la Nilkantha (cueva 22) también tienen ciertas esculturas. El resto de las cuevas hindúes, las cuales incluyen la Kumbharvada (cueva 25) y la Gopilena (cueva 27) no tienen esculturas importantes.
CUEVAS JAINIES
Cuevas jainistas (30-34). Datan del siglo XI y X.
Las cuevas Jainistas pertenecen a los últimos años de excavación en Ellora. Se caracterizan por su decoración ascética, con dimensiones regidas por la filosofía y tradición jainistas. Las más destacables son las cuevas de Chhota Kailash (cueva 30), Indra Sabha (cueva 32) y Jagannath Sabha (cueva 33). La cueva 31 perteneciente a este conjunto se encuentra inacabada.
Las cinco cuevas jainíes de Ellora son de los siglos IX y X, y todas ellas pertenecen a la secta de los Digambara. Estas cuevas revelan las dimensiones específicas de la filosofía y tradición jain. Estos lugares revelan un estricto sentido de ascetismo – no son grandes en comparación con las otras cuevas, pero presentan obras de arte excepcionalmente detalladas. Sus santuarios más notables son el Chhota Kailash (cueva 30), el Indra Sabha (cueva 32) y el Jagannath Sabha (cueva 33). La cueva 31 tiene una sala de cuatro pilares sin acabar y un santuario. La cueva 34 es una pequeña cueva a la cual se puede acceder desde una abertura en la parte izquierda de la cueva 33.
El Indra Sabha (cueva 32)
La cueva 32 es una cueva de dos pisos con un santuario monolítico es su patio. Esta cueva tiene un fino grabado de la flor de loto en el techo, y es conocida como Indra Sabha probablemente por su ornamentación y también por la escultura de Yaksha Matanga sobre un elefante, el cual ha sido identificado erróneamente como Indra. En el nivel superior de este santuario de dos pisos, en la parte trasera del patio, hay una imagen imponente de Ambika, el Yakshi de Neminatha que se encuentra sentado sobre su león y debajo de un árbol de mango cargado de frutos.
Otras cuevas jainíes
Las otras cuevas jainíes también se caracterizan por sus intrincados detalles. En muchas de las estructuras había ricas pinturas en los techos, fragmentos de los cuales todavía son visibles.
Bigfoot
Bigfoot o Sasquatch
Pie Grande
Representación artística de un Pie Grande.
Otros nombres: Sasquatch, Bigfoot
País: Estados Unidos
Primer reporte: Edad antigua
Ultimo reporte: 2013
Criaturas similares: Yeti
Pie Grande (del inglés Bigfoot) o Sasquatch es un supuesto animal de aspecto simiesco que habitaría los bosques, principalmente en la región del noroeste del Pacífico en América del Norte. El término sasquatch procede de la adaptación al inglés de la palabra original del idioma halkomelem sásq’ets.12
La comunidad científica dice que las pruebas existentes no son lo suficientemente convincentes y generalmente las consideran como el resultado de mitología, folklore o identificación errónea, más que de un animal verdadero, debido a la carencia de evidencia física y los grandes números de ejemplares que serían necesarios para mantener una población que pueda reproducirse.34 Muchos profesionales y académicos afirman que los estudios adicionales son una pérdida de tiempo, pero los partidarios de su existencia piensan que la evidencia actual puede ser escasa y que ha de evaluarse objetivamente a medida que se vaya presentando. Unos pocos científicos, como Jane Goodall,56 Grover Krantz y Jeffrey Meldrum, han expresado interés y cierta creencia en la criatura.7Otros, incluyendo una subcultura activa, compuesta generalmente por aficionados, continúan investigando y actualmente consideran la existencia del sasquatch como posible descendiente del Gigantopithecus.
Descripción
El número de informes avistamientos, es relativamente mayor en las áreas donde las culturas indígenas tenían leyendas sobre estos seres.
Los testigos indican características diferentes, pero la descripción más habitual es la de una gran criatura simiesca bípeda, normalmente de una altura de 1,83 m a 2,13 m de aproximadamente 160 kg con amplios hombros y estructura robusta. La cabeza es pequeña, puntiaguda y baja; en ocasiones, se habla de una cresta en la parte superior del cráneo. Los ojos se describen generalmente como pequeños y ocultos bajo una frente pronunciada. A excepción de la cara, manos y pies, una fina capa de pelo cubre su cuerpo, de color normalmente marrón o negro, aunque tiende a ser rojizo, arenisco o con brillos plateados.
Las enormes huellas, similares a un pie humano, le dieron su nombre. El ecologista Robert Michael Pyle las describe así: “Las huellas normalmente miden de 38 a 45 centímetros de largo. Tienen cinco dedos, un músculo doble y un arco 18 o 21 cm. de ancho.
Los sonidos que emite se describen como similares a agudos chillidos o silbidos o gruñidos graves, al igual que el yeti, por lo que algunos criptozoólogos sostienen que podría ser una especie emparentada con el yeti, la cual quizá llegó a América a través del Estrecho de Bering durante la última glaciación, tal y como hicieron los ancestros de los pueblos nativos americanos y diversas especies de animales. También se cree que podría estar relacionado con la mítica criatura llamada wendigo.
La mayoría de los avistamientos son nocturnos, lo cual hace pensar que se trata de una criatura nocturna. Algunos testigos mencionan algo que Pyle denomina como “brillo rojizo ocular”, similar al brillo de algunos animales nocturnos. Normalmente se avistan individuos solitarios, raramente en pares o grupos familiares y son más comunes los avistamientos de machos que los de hembras.
Rastros y opiniones
No se han encontrado restos físicos de ningún ejemplar, cadáveres, huesos, piel, pelos, excrementos u otros rastros físicos que no hayan sido identificados como de otro animal conocido. Los únicos rastros de que se dispone es de huellas de pisadas (muchas de ellas son claramente falsas o se ha encontrado incluso los moldes con que se hicieron), alguna foto borrosa y lejana, grabaciones de autenticidad muy cuestionada, y las observaciones de los testigos.
Los defensores de la existencia del animal alegan que habita en zonas remotas, huyen del hombre (a pesar de los miles de avistamientos reportados) entierran o esconden a sus muertos, y otras opiniones similares. Los detractores alegan que con miles de avistamientos, la población debía ser bastante numerosa como para no haber encontrado ningún rastro físico, apoyado por que ni siquiera existen fósiles de alguna especie que haya podido generar a este ser.
Etimología
Tal y como se emplea en este artículo, sasquatch y bigfoot son frecuentemente intercambiables en la literatura científica y popular, aunque las palabras tienen diferentes orígenes. Véase etimología de las palabras Pies Grandes y Sasquatch.
Estudios formales
Antes de los informes de ¨avistamiento del Pie Grande en el Condado Humbolt¨ en 1958 y unos años después, la investigación activa se limitaba sobre todo a aficionados que tomaron varios puntos de vista y elaboraron trabajos que iban de lo sensato a lo absurdo.
Turismo
Existen convenciones anuales relacionadas con el Pie Grande. Esta criatura desempeña un papel importante en el turismo al noroeste de los Estados Unidos; por ejemplo, existe una festividad llamada el “deslumbramiento anual de sasquatch” (Sasquatch Daze) en Harrison Hot Springs, British Columbia. Según Napier “el bigfoot se ha convertido en un gran negocio en algunas partes de Norteamérica. Según algunos investigadores, consideran que no se puede considerar como un mero fenómeno natural que se pueda estudiar con las técnicas de las ciencias naturales; su influencia forma parte del folclore” (citado en Pyle, 160)
Frecuencia de avistamientos del Bigfoot en Canadá y Estados Unidos (2008) ( Wikimedia Commons )
Algunas de las Muchas Versiones de los Bigfoot/Yowies
Los relatos de homínidos peludos de gran tamaño son universales, intemporales, y se encuentran en los mitos y el folklore de culturas del mundo entero. Llamados “Yeti” en el Himalaya, “Chi-Chi” en China, “Almas” en Mongolia, “Kapre” en Filipinas y “Hombres de los Bosques” en Vietnam, la lista de países con historias de misteriosos hombres-mono peludos que habitan las regiones más remotas del planeta son infinitas. Australia no es más que otro de los lugares en los que se ha tenido noticia de encuentros con alguna de estas criaturas legendarias similares al Bigfoot, aunque su versión de este misterioso ser es de las menos conocidas del mundo.
Tek tek
Tek tek
El yeti de Camboya
Chelsea Chapman
El tek tek, con sus dos piernas y áspera piel rojiza. David Pinho
Fue una noche ruidosa en lo profundo de la selva, los grillos, las ranas y las cigarras estaban ocupados tocando su sinfonía nocturna habitual. Un grupo de excursionistas preparaban las literas para la noche.
“Mi amigo se subió en su hamaca y empezaba a quedarse dormido, cuando se dio cuenta de que todos los insectos habían dejado de hacer sonidos: la selva quedó completamente en silencio”, dijo Greg McCann, un coordinador de campo para HabitatID, un grupo conservacionista que trabaja en el Parque Nacional Virachey, donde los excursionistas estaban acampando.
Unos momentos más tarde, un olor horrible envolvió el campo – todos los excursionistas salieron de sus tiendas de campaña para encontrar su fuente. Un minuto después, el olor se había ido y los insectos y ranas regresaron.
“A la mañana siguiente, los guardaparques se negaron a discutir el tema y querían salir del parque lo antes posible”, volvió a contar McCann. “Mi amigo asumió que pensaron que era un fantasma”.
En todo el mundo abundan las historias sobre criaturas misteriosas que viven en zonas remotas, a menudo las zonas montañosas. El legendario Yeti del Himalaya, Sasquatch de América del Norte, el ung nguoi vietnamita, el yowie australiano y el batatut indonesio tienen intrigados a los exploradores y han aterrorizado a los niños por generaciones.
Era la respuesta de Camboya al mito, el tek tek, que los guardaparques creían estaba al acecho esa noche en Virachey, que cubre las provincias de Ratanakkiri y Stung Treng.
Se dice que vive en las partes más al norte del parque nacional, el tek tek – de acuerdo a una serie de relatos que varían de persona a persona – es una criatura aterradora y extraña para la vista.
Se dice que es bípedo, de baja estatura – aproximadamente cinco pies de altura – y cubierto de pelo grisáceo-rojo, con brazos como machetes. Se rumorea que tiene un apetito por los seres humanos.
Otros dicen que es mucho más grande y sin rodillas. Algunos dicen que en el parque nacional los rugidos espantosos que a menudo se escuchan en la noche, son los teks tek hambrientos que comienzan mordiendo su propia carne.
McCann, cuyo trabajo lo lleva profundamente en el Parque Nacional Virachey (VNP), recordó una escalada en enero de este año, cuando fue advertido por sus colegas locales de no llamar a los demás en el equipo.
Si ellos se separaban, se le dijo, el tek tek podría “aprender a imitar nuestras voces y luego engañarnos llamándonos a distancia usando la voz de nuestro amigo – una vez separados del grupo, rápidamente seríamos asesinados”.
Se han registrado relatos similares en la provincia de la vecina Vietnam que bordea Vireachey. El libro del veterano de la guerra de Vietnam Kregg PJ Jorgenson, Very Crazy, G.I., menciona una criatura parecida a la humana encontrada por las tropas que luchaban cerca del parque.
En un capítulo dedicado a la criatura simiesca, que él sospechaba es el nguoi rung, un nombre local que significa “el pueblo de la selva”, el monstruo caminó en un claro, de unos quince pies hasta seis estadounidenses y los estudió antes de girarse por donde había venido y “subir fácilmente por la empinada colina”.
“Mientras (Linderer) estaba listo para un soldado del Vietcong, no estaba listo para el rostro que miró a través de la maleza”, escribe Jorgenson.
Los soldados especularon que podría haber sido un mono de montaña, de los cuales uno había afirmado haber visto anteriormente – antes de decidir que no encajaba con la descripción.
Pero Vu Ngoc Thanh, un miembro jubilado de la Facultad de Biología de la Universidad Nacional de Vietnam, ha intentado realmente investigar los informes de los simios parecidos a los humanos que viven en la región.
Sus proyectos de investigación de primates se basan en el Parque Nacional Chu Mom Ray, que comparte una frontera con el Parque Nacional Virachey, cerca de la frontera con Camboya, Laos y Vietnam.
“La gente todavía me habla de extrañas criaturas, como humanos, que viven en la parte superior de la Montaña Chumomray “, escribió en un correo electrónico. “Hace dos años, traté de llegar a la montaña para ver, pero no tuve éxito, ya que no había buen tiempo y era peligroso”.
De vuelta al lado camboyano de la frontera, los lugareños creen que la población tek tek puede haber disminuido en gran medida, ya que el primate críptico ha sido víctima de una plaga terrenal: la deforestación.
“Un guardabosques me dijo que su abuelo y sus amigos dicen que los teks tek solían ser encontrados hace 30 a 40 años, en la época cuando Ratanakkiri era algo así como el 95 por ciento cubierto de bosque”, dijo McCann.
“Ellos dicen que la combinación de la guerra de Vietnam, con los artefactos masivos aventados por aviones estadounidenses, además de la deforestación y la caza furtiva moderna los acabaron”.
Ur
Ur
Situación de las ciudades de la antigua Mesopotamia. En la zona más meridional, junto a Eridu, está Ur.
Ur fue una antigua ciudad del sur de Mesopotamia. Originalmente, estaba localizada cerca de Eridu y de la desembocadura del río Éufrates en el golfo Pérsico. Hoy en día, sus ruinas se encuentran a 24 km al suroeste de Nasiriya, en el actual Irak.1
Los restos de Ur forman una colina de ruinas de 12 m de altitud en mitad del desierto de Irak, a unos 24 km al suroeste de Nasiriya. Las ruinas eran llamadas por los habitantes locales Tell al-Muqayyar (montículo de brea).
La primera investigación en la zona fue llevada a cabo por el cónsul británico en Basora J. E. Taylor en 1854 por sugerencia del Museo Británico. Ya entonces se encontraron tablillas que indicaban que los restos pertenecían a la Ur bíblica; sin embargo, esto no fue suficiente para que se realizasen investigaciones de importancia y poco después se abandonó el lugar, produciéndose saqueos. Miles de tablillas cuneiformes terminaron en los mercados de Bagdad y, desde allí, en colecciones privadas.
Restos de la ciudad de Ur con el Zigurat de Ur-Nammu al fondo. Restaurado en los años 70 para atraer turistas al área de Nasiriya.
Tras la Primera Guerra Mundial, Irak pasó a formar parte del Imperio británico. Esta situación fue aprovechada por el Museo Británico, que consiguió establecer excavaciones en Ur, Eridu y El Obeid entre 1918 y 1919. En 1920, arqueólogos de la Universidad de Pensilvania al mando de Leonard Woolley tomaron el relevo de los ingleses. En las excavaciones, que duraron hasta 1934, se encontraron numerosos objetos de valor, entre los que destacó el contenido de las llamadas Tumbas Reales.1
En la década de 1970 el gobierno de Saddam Hussein emprendió la restauración del zigurat de Ur-Nammu, que se convirtió en uno de los monumentos más importantes de Irak.
Historia
Los primeros restos de Ur pertenecen al período de El Obeid (V milenio a. C.), en el cual se produjeron los primeros asentamientos urbanos en la zona. Ur es, por tanto, una de las ciudades más antiguas de Sumeria.
Durante el IV milenio a. C. (período de Uruk) la gran cantidad de cerámica encontrada parece indicar que Ur pudo haber sido un centro importante de producción. Esta situación se prolongó hasta el período Yemdet-Nasr, hacia el 3000 a. C. En algún momento del milenio siguiente se produjo una inundación de carácter local que dejó una importante capa de lodo en los estratos.1
Período Dinástico Arcaico
El Estandarte de Ur fue hallado en una tumba perteneciente a los siglos XXVII-XXV, en el período Dinástico Arcaico. Representa diversas escenas de la vida cotidiana y de guerra.
La información de las capas pertenecientes al período Dinástico Arcaico es reducida, ya que unos 500 años después se derribó gran parte de las antiguas estructuras para construir otras más monumentales. Sin embargo, la historia de la ciudad puede reconstruirse sobre la base de inscripciones en otras ciudades.
En algunos textos de Lagash, ciertos monarcas de esa ciudad se atribuyen haber conquistado Ur, si bien no indican los nombres de los reyes derrotados. Tampoco en la lista Real Sumeria se menciona a esos conquistadores, sino que hace referencia a una cesión de la realeza desde Uruk, al monarca de Ur, Mesannepada. En los sellos de este rey se encuentra que se titulaba “rey de Kish“, título que podría hacer referencia no tanto a la ciudad acadia como a todo el territorio de la Mesopotamia central, lo cual podría estar apoyado por el uso que, posteriormente, Sargón de Acad dio a este título. Esto indicaría una posible hegemonía de Ur en la zona a mediados del Dinástico Arcaico, lo cual estaría respaldado por algunos restos, que muestran el incendio de la ciudad de Shuruppak y la destrucción del palacio de Kish.1
Se conocen algunos datos de la familia de Mesanepada. Así, una tablilla de fundación encontrada en un templo cerca de tell Obeid nombra a un tal Aanepada, hijo de Mesannepada. El hijo de Aanepada se llamaba Meskiaga-nuna, y fue él quien sucedió a su abuelo en el trono. De este rey se conoce su existencia por una tablilla que le dedicó su esposa a su muerte. La lista real sumeria menciona a estos dos reyes y a dos más, en la que denomina dinastía I de Ur. De estos dos últimos reyes destaca que sus nombres no son sumerios sino acadios.1
Los nombres de los monarcas de la dinastía II de Ur aparecen muy deteriorados en la lista Real; sin embargo, se conocen bien los acontecimientos de este período, marcado por la rivalidad entre las distintas ciudades. Hacia el siglo XXIV a. C. el rey de Umma Lugalzagesi conquista las ciudades del sur de Mesopotamia, incluida Ur, formando una hegemonía local y declarándose rey de Kish, al igual que habían hecho los monarcas de la dinastía I de Ur.2
Imperio acadio
El dominio de Lugalzagesi no duró mucho ya que hacia el 2335 a. C. Sargón I de Acad fundó Agadé y comenzó sus conquistas, venciendo primero a Lugalzagesi y después a todas las ciudades sumerias, incluida Ur, a la que derribó sus murallas. Tras esto Ur y las demás ciudades sumerias quedaron incorporadas en el Imperio acadio. Tras la muerte de Sargón todas ellas se sublevaron, siendo reprimidas por su sucesor.1
Durante el reinado del nieto de Sargón, Naram-Sin, la ciudad seguía formando parte del Imperio acadio, si bien se produjeron rebeliones. A esta época pertenece un texto escrito por Enheduanna, una sacerdotisa en y escriba en el templo de Nannar en Ur.3 La historia narra en primera persona el sufrimiento de la sacerdotisa que ha sido expulsada de Ur por el lugal local, Lugal-ane. La historicidad de los personajes parece estar demostrada; en el caso de Lugal-ane, por inscripciones en las que Naram-Sin le nombra como uno de los cabecillas de las revueltas de las ciudades del sur y, en el caso de Enheduanna, por un relieve en la que se le dibuja sentada junto al dios Nannar.
Los motivos de la expulsión de Enheduanna no están claros; el texto la menciona como hija de Sargón, lo cual podría indicar una filiación simbólica más que una relación familiar. De hecho, según su sello, fue nombrada sacerdotisa por el conquistador acadio. Así, es posible que esta designación hubiese incomodado al lugal de Ur, siendo éste el motivo de la expulsión.
La historia es representada como un conflicto entre el dios Nannar, que representa a Ur, e Innana, que representa a Agadé y al poder imperial; el árbitro del conflicto es el dios del cielo An de Uruk. Según la historia, An falla en favor de Inanna y Enheduanna recupera su posición. No se conoce cuál fue la historia real que inspiró esta alegoría, si bien se sabe que las revueltas de Ur y las demás ciudades fueron sofocadas por Naram-Sin.
A finales del siglo, durante el reinado de Sharkalisharri, hijo de Naram-Sin, el imperio se vio superado por las numerosas revueltas y los ataques de los pueblos vecinos. Así consiguió su independencia Ur.
La dinastía III de Ur
Extensión del imperio durante la Tercera Dinastía de Ur.
Pocos años después de la caída del imperio, el norte fue invadido por los nómadas gutis, si bien parece que no llegaron a afectar al área del sur, donde se encontraba Ur. En esta etapa destacó la ciudad de Lagash que según parece mantuvo algún tipo de dominio sobre Ur.
Hacia el siglo XXII a. C., Utu-hegal de Uruk expulsó a los gutis del norte consiguiendo la hegemonía en Sumeria. A su muerte fue su hermano Ur-Nammu, que posiblemente gobernaba hasta entonces en Ur, quien le sucedió en su imperio. En todo caso, el nuevo rey escogió a Ur como capital de su reino, fundando la que se ha llamado dinastía III de Ur o Ur III, que durante casi un siglo mantuvo la hegemonía sobre un territorio que abarcaba la totalidad de la cuenca mesopotámica y Elam.
En esta situación la ciudad de Ur quedó convertida en una gran capital, llegando a alcanzar los 200 mil habitantes. Es en este período cuando se destruyeron los anteriores edificios y se levantaron los que se pueden contemplar aún actualmente. Entre estas construcciones destaca el enorme zigurat de Ur, construido durante los reinados de Ur-Nammu (2113 – 2094 a. C.) y su sucesor Shulgi (2094 – 2047 a. C.) y que aún se mantiene en pie, tras su restauración parcial en los años 70. No se conoce la altura que llegó a alcanzar ya que, si bien las ruinas actuales miden 15 metros, a lo largo de 4.000 años la edificación ha debido sufrir una gran erosión. También en esta etapa se construyó el Gipar, un templo consagrado a Ningal. La tercera dinastía de Ur se caracterizó también por desarrollar un sistema de impuestos que, si bien resultaba eficaz, suponía una carga muy pesada para las clases populares.
La caída de la hegemonía de Ur estuvo marcada por la llegada de oleadas de nómadas procedentes de las regiones desérticas occidentales: los amorreos. Los recién llegados se fueron estableciendo en el curso medio del Éufrates, en la zona de Babilonia, consiguiendo cada vez más influencia. Tras la pérdida de las regiones periféricas del imperio, Shu-Sin (2037 – 2027 a. C.) dirigió la construcción de una muralla de 270 km con el objetivo de frenar a los nómadas. Su sucesor Ibbi-Sin (2026 – 2004 a. C.) tuvo que enfrentar además los intentos de independencia de las demás ciudades. En esta situación, un antiguo gobernante de Mari e influyente funcionario llamado Ishbi-Erra se asoció a los distintos enemigos de Ur dándole el golpe final, causando la disolución del imperio. Tras esto, Ishbi-Erra fundó una dinastía en Isin.
Hacia finales del siglo XXI a. C. los elamitas, dirigidos por el rey de Simash y que hasta entonces habían estado sometidos a Ur, ocuparon la ciudad, que fue arrasada. Los templos fueron saqueados y las viviendas destruidas, su monarca Ibbi-Sin fue hecho prisionero y llevado a Elam, y los campos fueron incendiados. Tras el saqueo, la ciudad cayó bajo la influencia de Ishbi-Erra.
En este contexto se desarrollan las llamadas Lamentaciones de Ur, un texto sumerio en el cual se atribuye la caída de Ur a la pérdida del favor de los dioses, tras lo cual se narran una serie de proyectos y deseos para que la ciudad recupere su estado anterior. Las lamentaciones se han interpretado como un texto de carácter político donde, tras la caída en desgracia de la ciudad, Ishbi-Erra, el nuevo gobernante, procederá a su reconstrucción con el beneplácito de los dioses.
Después de la dinastía III
En los años siguientes, el dominio de Ur y el del resto de la región se alternó entre Isín y Larsa. Tras las conquistas de Hammurabi, durante el Imperio paleobabilónico (siglos XVIII y XVII a. C.), la ciudad jugó un papel muy importante como centro de culto. Mil años después, Nabucodonosor II llevó a cabo una ambiciosa reconstrucción de los templos de Ur, que aún era un importante centro urbano. El declive de la ciudad sólo se produjo tras el final de los reinos mesopotámicos, con la conquista de la región por parte del Imperio persa.
Arquitectura
Reconstrucción por Computadora del zigurat de Ur-Nammu.
Debido a su tamaño, el montículo formado por las ruinas de Ur destacó durante siglos después de su abandono. Entre las edificaciones de las que quedan restos destacan el Gipar y el zigurat, construidos durante los primeros reinados de la dinastía III. No se conservan los templos del Imperio acadio, ya que fueron destruidos al construir los templos posteriores. Del período Dinástico Arcaico sólo se conservan algunos restos en los que se aprecia una edificación a base de ladrillos plano convexos.
Los dos edificios religiosos que se conservan estaban situados en un segmento de la ciudad rodeado por una muralla de 8 metros, cuya pared exterior estaba inclinada 45º. La sección noroeste de este recinto sagrado estaba dedicada al dios Nannar.
El zigurat de Ur-Nammu, cuyo nombre en sumerio era é-temen-ní-gùr-ru (casa de cimientos revestidos de terror) fue construido durante la primera mitad del siglo XXI a. C. y estaba rodeado por su propia muralla. La estructura aún se conserva y fue parcialmente reparada a finales de los años 70. Tiene planta rectangular de 61×45,7 metros y 15 metros de altura, si bien es probable que en su época tuviese bastante más metros de altura, perdidos debido a la erosión. El interior del zigurat no es hueco, sino que está completamente formado por ladrillos de barro. Las paredes exteriores están recubiertas por una capa de 2,4 metros de grosor de ladrillo cocido y betún y cada una de ellas está orientada a un punto cardinal. Es posible que en la cima albergase un templo. El acceso a las plantas superiores se realizaba a través de tres escaleras exteriores.
El Gippar era un recinto sagrado consagrado a Ningal situado en el sureste del recinto. Si bien fue remodelado por completo durante la dinastía III de Ur, es muy posible que su construcción se remontase al período Dinástico Arcaico. El interior del edificio estaba dividido en dos partes por un pasillo y contenía numerosas habitaciones que se situaban alrededor de patios. El Gippar funcionaba como residencia de la sacerdotisa en y su séquito. Además, la diosa Ningal tenía varias habitaciones reservadas a su uso.
En cuanto a la arquitectura residencial, la vivienda del Ur del II milenio a. C. estaba organizada en torno a un espacio central y generalmente tenía dos plantas. El espacio central ha sido interpretado en ocasiones como un patio, si bien es probable que se encontrase cubierto. En la ciudad se ha encontrado otro tipo de edificaciones de peor calidad, formadas simplemente como un agrupamiento en línea de unas pocas habitaciones. Se ha especulado sobre la posibilidad de que se tratase de comercios o talleres, si bien también es posible que fuese un tipo más humilde de vivienda.4
Las tumbas reales de Ur
Uno de los hallazgos más sorprendentes de la expedición de Leonard Wooley en Ur fue una serie de 16 sepulturas a las que se denominó las Tumbas Reales de Ur. Pertenecían al período Dinástico Arcaico y estaban construidas por paredes de ladrillo o piedra coronadas por una bóveda. Se encontraban en un cementerio mayor, destinado a todo tipo de personas y que contenía más de 2.500 tumbas. Cada una de las tumbas reales contenía un cuerpo principal y un cierto número de acompañantes, así como numerosas riquezas.
Copa de oro encontrada en la tumba de la reina Puabi, actualmente en el Museo Británico. 2600 – 2400 a. C., período Dinástico Arcaico.
De todas las sepulturas, destacaba la de una reina identificada gracias a su sello cilíndrico como Puabi. En su interior, además de la reina, se encontraban los cuerpos de cinco hombres armados y diez mujeres acompañadas por la magnífica Arpa de Ur rematada por la cabeza de un toro en oro. La cámara contenía incluso un carro y los esqueletos de dos bueyes. El cuerpo de la reina estaba envuelto en joyas y mantos con incrustaciones. Sobre la cabeza llevaba un tocado a base de hojas y una peineta rematada por estrellas de cinco puntas. Cerca de su mano tenía una copa de oro. Debajo de un baúl había un pasadizo que comunicaba con otra cámara funeraria; en ella se encontraba el rey A-kalam-dug de Ur, cuya tumba había sido parcialmente saqueada.
Otra de las tumbas reales pertenecía al lugal Meskalamdug. En otra de las fosas, cuyo dueño no se conoce, se encontraron 74 cuerpos, la mayoría de mujeres, lujosamente ataviados. Es en esta última tumba donde se encontró el Estandarte de Ur, una de las piezas más célebres de las halladas en Ur. El estandarte, está dividido en distintas franjas que contienen escenas cotidianas y de guerra, en la que destaca la representación de carros de guerra.
Se ha interpretado de diferentes formas el hecho de que las tumbas reales contuviesen cuerpos de sus sirvientes; para algunos autores, se trataba de enterramientos rituales, en los que el monarca era acompañado por éstos hacia el más allá. Sin embargo esto no ha sido demostrado y también se han barajado otras opciones, como que la tumba real fuese escogida por las élites como lugar ilustre de enterramiento, siendo sus cuerpos desplazados allí una vez construida.
Tell al-Muqayyar – más conocida como la antigua ciudad de Ur – es uno de los sitios arqueológicos más notables descubiertos en el Medio Oriente. Los restos de este antiguo asentamiento forman un montículo que se eleva a una altura de más de veinte metros por encima de la llanura de inundación del suroeste de los ríos Tigris y Eufrates en el sur de Irak, cerca de la moderna ciudad de Nasiriya. 1927.
Big Grey Man
Big Grey Man
Fear liath
Am Fear Liath Mòr (también conocido como El Gran Hombre Gris de Ben MacDhui o simplemente El hombre Gris (Big Grey Man)) es el nombre de una presencia o criatura que se dice mora la cumbre y pasos de Ben MacDhui, el pico montañoso más elevado de los Cairngorms y el segundo pico más alto de Escocia. La evidencia de la existencia de esta supuesta criatura solo se limita a algunos avistamientos y unas pocas fotografías de huellas extrañas, que se le atribuyen a este ser.
Tradicionalmente se lo consideraba un ser sobrenatural, pero los criptozoólogos han comparado al Am Fear Liath Mòr con el yeti del Himalaya y el Sasquatch o Piegrande de Norte América, y algunos creen que representan homínidos relictos. Sin embargo, las referencias a ‘Hombres Grises’ salvajes en Escocia y criaturas similares en otros sitios en las Islas Británicas, a veces llamados Wudewas o ‘Hombres de los bosques’, solo se remontan al siglo XIII.
La cumbre de Ben Macdui
Aunque ha habido muchos supuestos encuentros con Am Fear Liath Mòr, pocos testigos han visto a la criatura. Aquellos que lo describen como una figura extremadamente alta cubierta de pelo corto, o como una presencia invisible que causa sentimientos incómodos en las personas que trepan la montaña.[2] Otros testigos oculares lo describen como un humanoide grande de más de tres metros de altura y con una piel de tonos oliváceos, brazos largos y hombros anchos.[3] La evidencia de la existencia de esta criatura se limita a varios avistamientos y algunas fotografías de huellas inusuales.[2]
Debido a su tamaño anormal en comparación con otros seres similares a los simios, los criptozoólogos lo han colocado en un grupo separado que consiste en primates similares llamados acertadamente “Verdaderos Gigantes”, un término acuñado por el criptozoólogo Mark A. Hall.[4] Además, casi todos los informes de Am Fear Liath Mòr incluyen el sonido de pasos crujiendo en la grava justo fuera de la vista. [5]
Se lo describe como que tiene una serie de características que lo hacen parecer más una criatura de la mitología o lo sobrenatural, en lugar de un tema adecuado para la criptozoología . Parece tener poderes paranormales, como controlar la niebla y causar un miedo tan extremo en los seres humanos y los animales que saltan de los acantilados o incluso mueren tratando de escapar. Al Gran Hombre Gris se le atribuye la capacidad de manipular las emociones, como causar a sus víctimas gran temor, desesperación o el deseo de suicidarse. Algunos “encuentros” reportados con Big Grey Man se basan solo en experiencias con emociones extremas y / o niebla extraña mientras suben a Ben Macdhui, y no en reclamos de ver realmente a un gran monstruo peludo.
En apariencia, Big Grey Man se asemeja a un humano enorme, de al menos seis metros de alto, cubierto por todas partes con una gruesa capa de pelo o pelo. Él generalmente se describe como gris, a veces como marrón. La cabeza y el cuello son desproporcionadamente grandes en comparación con el resto del cuerpo. Las orejas son puntiagudas. Los dedos de los pies son muy largos, más parecidos a los dedos que a los pies, y terminan en garras grandes y afiladas. El Gran Hombre Gris tiene patas largas, pero los brazos no son más proporcionales al resto de su cuerpo que lo que serían en un ser humano. En apariencia general, se lo describe como mucho más cercano al hombre que a los simios. El Gran Hombre Gris camina muy erguido, sin encorvarse ni agacharse como algunos humanoides velludos. En algunos avistamientos, usa un sombrero de copa. A menudo está envuelto por la niebla o la niebla, que parece venir con él y retirarse cuando se retira.
Se han reportado avistamientos desde al menos los 1700 y continúan hasta nuestros días. Varios alpinistas famosos han jurado que el Gran Hombre Gris es real por sus encuentros personales. Las huellas han sido fotografiadas, pero son anormales incluso para una criatura tipo Bigfoot. Las impresiones de 19 pulgadas son casi tan anchas como largas.
Cabe señalar que las variaciones de ortografía entre las versiones de inglés estadounidenses y británicas a veces dificultan la búsqueda de información sobre Big Grey Man. La mayoría de los autores estadounidenses escriben “Big Grey Man”, mientras que los autores europeos escriben “Big Grey Man” (“gris” se escribe con “e” en Gran Bretaña).
The Big Grey Man es bastante similar al Grey King of Welsh folklore. Ambos seres habitan en las montañas, son considerados siniestros, manipulan emociones y son grandes monstruos peludos que bordean el mundo de los espíritus, que parecen más sobrenaturales que biológicos.
Avistamientos
El relato más antiguo conocido de un presunto avistamiento del Greyman data de 1791, y proviene de un poeta llamado James Hogg. Se dice que el poeta atendía ovejas a Ben MacDhui cuando vio a la criatura:
“Era un gigante negro, de al menos diez metros de alto, e igualmente proporcionado, y muy cerca de mí. De hecho, me sentí impotente con asombro y terror”.
Encuentro con el Greyman. (ascensionearth2012.org )
Aterrorizado por lo que vio, Hogg huyó de su casa, regresando al día siguiente para recoger sus ovejas. La criatura regresó, y esta vez, se dice que Hogg decidió realizar un pequeño experimento. El poeta se quitó el sombrero y vio que la criatura también hacía lo mismo. Por lo tanto, Hogg llegó a la conclusión de que era su propia sombra en la niebla lo que le aterrorizó el día anterior.
El primer encuentro registrado con Am Fear Liath Mòr fue reportado en 1891, pero no se hizo público hasta 1925.[6] En 1925, el notable escalador J. Norman Collie relató una experiencia aterradora que había soportado mientras estaba solo cerca de la cumbre de Ben MacDhui unos 35 años antes. “Empecé a pensar que escuché algo más que el mero ruido de mis propios pasos. Por cada pocos pasos que daba oía un crujido, y luego otro crujido como si alguien estuviera caminando detrás de mí, pero tomando pasos tres o cuatro veces más largos que yo.”[2] Collie no pudo distinguir la fuente de los ruidos a causa de la niebla, y continuó “… [mientras] el extraño crujido, sonaba detrás de mí, me invadió el terror y me puse de pie, tambaleándome ciegamente entre los cantos rodados por cuatro o cinco millas “.[citación necesitada]
La cuenta de Collie fue reportada en la prensa local y seguida de una correspondencia sobre el tema. Norman G. Forbes informó que había escuchado un misterioso ruido metálico mientras escalaba Braeriach en la niebla del verano. Resultó ser dos ciervos. Señaló que los Cairngorms “tienen un poder extraordinario para inducir una sensación de inquietud” y “la mente, sola en lugares solitarios, crea muchas cosas a partir de su imaginación”[cita requerida].
Sin embargo, algunos escaladores también han informado experiencias similares, muchos describiendo sentimientos incontrolables de miedo y pánico, algunos viendo una gran figura gris detrás de ellos, y otros solo oyen sonidos. Por ejemplo, en 1904 el escalador Hugh D. Welsh escuchó inexplicables “pasos arrastrando los pies” cerca de la cumbre de Ben Macdhui y tuvo “una inquietante sensación de aprensión”, mientras que en 1945 Peter Densham, un montañista y trabajador de rescate, escuchó “un crujido”, y fue “vencido por un sentimiento de aprensión” y en 1948 Richard Frere, un escalador, escribió sobre su sensación de “una Presencia, absolutamente abstracta pero intensamente real” en la montaña y escuchó “una nota de canto intensamente alta”.[7]
En 1958, el naturalista y alpinista Alexander Tewnion publicó un encuentro en la revista The Scots:
… En octubre de 1943, pasé diez días escalando solo en Cairngorms… Una tarde, justo cuando llegaba al montículo de la cumbre de Ben MacDhui, la niebla se arremolinaba sobre Lairig Ghru y envolvía la montaña. La atmósfera se volvió oscura y opresiva, un viento feroz y amargo se movió entre los cantos rodados, y… un extraño sonido resonó a través de la niebla, parecía un fuerte paso. Luego otro, y otro… ¡Una forma extraña se alzó, retrocedió, vino hacia mí! Sin dudarlo, saqué el revólver y disparé tres veces contra la figura. Cuando todavía estaba encendido, me volví y recorrí el camino, alcanzando a Glen Derry en un tiempo que nunca he superado. Puedes preguntar si realmente fue el miedo a Laith Mhor. Francamente, creo que fue.[5]
Explicaciones
Los psicólogos han propuesto ilusiones, alucinaciones o interpretaciones erróneas del estímulo natural provocado por el agotamiento o el aislamiento.[8] Los infrasonidos, que pueden ser generados por el viento, pueden causar sentimientos de inquietud y ansiedad en algunas personas y frecuentemente se relacionan con avistamientos paranormales.[citación necesitada]
Una ilusión óptica conocida como el espectro Brocken es una explicación plausible para algunos elementos visuales de la leyenda de Big Grey Man.[9] Un espectro de Brocken, “espectro de montaña” puede ocurrir en ciertas condiciones atmosféricas cuando el sol está en un ángulo particular. La sombra del sujeto puede ser arrojada a un banco de nubes a su alrededor, creando la ilusión de una gran figura humanoide sombría.[10]
El poeta James Hogg encontró un espectro de Brocken en Ben MacDhui ya en 1791, describiendo “un gigante negro gigante, de al menos diez metros de altura, e igualmente proporcionado, y muy cerca de mí. De hecho, me sentí impotente con asombro y terror”. El terror de Hogg se calmó cuando observó que la figura hacía los mismos gestos que él, y se convenció de que era simplemente su propia sombra.[5] El alpinista británico Frank Smythe declaró que había observado su sombra proyectada como un Espectro de Brocken a través de la niebla sobre Ben Macdhui.[11]
Fotos de una sombra tomada en Ben MacDhui ( america.pink )
Se dice que el testimonio del profesor causó sensación, y pronto, otros excursionistas también informaron que han tenido experiencias similares en Ben MacDhui. Sin embargo, ellos no compartieron sus historias antes de esto debido al temor al ridículo. La mayoría de las historias sobre el Greyman giraban en torno a estos elementos: la sensación de que alguien está siendo seguido y los sonidos percibidos como pasos siguientes. Tales sonidos podrían haber sido producidos por uno de los muchos animales que viven en Ben MacDhui, y no necesariamente por una criatura desconocida como el Greyman.
Avistamientos de criaturas
Pocos avistamientos del Greyman se han hecho alguna vez, y las pruebas físicas más cercanas que parece que tenemos de esta criatura son sus supuestas huellas. En su libro, Romantic Strathspey , James A. Rennie escribió que había visto y fotografiado grandes huellas en la nieve en el Valle de Spey, a unos 24 km (15 millas) de Ben MacDhui. En una ocasión posterior, Rennie tuvo la oportunidad de ver cómo se formaron las huellas. Estas huellas, según el autor, no estaban formadas por alguna criatura misteriosa, sino por la precipitación.
Ilustración del Greyman ( ascensionearth2012.org )
Hay pocos lugares en Cairngorms donde este fenómeno se puede ver con certeza (y aún así no hay garantía) ya que requiere acantilados para dar la elevación necesaria para llegar por encima de la nube. Uno de esos lugares que a menudo aparece en las historias de Big Grey Man es Lurchers Crag. Estos acantilados de 1000 pies vigilan la entrada norte del Larig Ghru (el paso principal a través de los Cairngorms) y es muy posible que el Espectro de Brocken haya sido visto en esta área e interpretado como alguna otra presencia mundial.
Otra explicación puede ser de naturaleza menos científica y más difícil de definir, sin embargo, puede ser la esencia de la historia. Ese es el Gran Hombre Gris es una manifestación del espíritu del lugar, transformado por la imaginación en un ser real. Desde el comienzo de la historia humana, hemos transferido características y formas humanas al mundo que nos rodea. Desde las religiones tempranas hasta el presente, el antropomorfismo nos ha ayudado a describir lo desconocido; El paganismo convirtió las estaciones en personajes, el sintoísmo adora a los dioses de lo cotidiano, mientras que hoy damos nombres a nuestros autos y les imprimimos una personalidad. Entonces, ¿por qué no las montañas?
Las personas tienen diferentes grados de agudeza sensorial; algunos tienen una visión 20:20 mientras que otros pueden escuchar caer un alfiler. Con esto en mente, es plausible que algunos sean capaces de “leer” signos demasiado sutiles para los demás y puedan “sentir” el espíritu de un lugar. ¿Su antropomorfismo de los Cairngorms creó el mito del Gran Hombre Gris?
Ben Macdhui es la montaña más grande de Cairngorms y la segunda más alta del Reino Unido. La cumbre se eleva desde la parte sur de una enorme tierra subártica única en las Islas Británicas. Es un ambiente hostil donde no crece nada excepto las plantas alpinas más resistentes. Cuando la nube rueda en las cumbres se puede envolver durante días, en invierno el débil sol del norte a menudo no penetra las profundas cañadas durante semanas. En momentos como este, la meseta sin rasgos está en su punto más elemental: gris arriba y abajo, el ambiente perfecto para un “Gran Hombre Gris”.
Tikoloshe
Tikoloshe
El Tikoloshe, Tokoloshe o Hili (proveniente del Xhosa, utyreeci ukujamaal) es el nombre de una criatura de la mitología zulú.
Origen
En la mitología zulú se cree que el Tikoloshe es un pequeño monstruo malvado, de aspecto peludo, que tiene la apariencia de una especie de cruce entre un felino, un zombi y un goblin, es creado por un chamán a partir de un cadáver humano.12 La creencia está especialmente extendida en todo el sur de África, y más concretamente en Sudáfrica.3
Área que sería habitada por el Tokoloshe
Leyenda
Tokolosh, Tikoloshe o Hill, es el nombre dado por las tribus de Sudáfrica, Botswana y Zimbabwe, es un espíritu de la naturaleza maligna. Se dice que el Tokoloshe es creado a partir de cadáveres por los chamanes en busca de venganza, en cuyo caso sólo la persona maldita es capaz de ver el Tokoloshe.
Representación tradicional de un Tokoloshe
Aunque ésta es la descripción del Tokoloshe que es tan frecuente hoy en día, parece haber sido originalmente más bien una especie de espíritu de agua, antes de ser considerado un zombi pequeño.
Actualmente a este ser se le describe como una criatura que se asemejaría a un mono por su pelo y que sería el tamaño de un niño pequeño, el cual poseería gran fuerza en relación a su tamaño pequeño. Sin embargo, sería capaz de cambiar de forma y desaparecen al ingerir una piedra. Su pequeño tamaño y la malevolencia parecen ser equivalentes a nuestra cultura occidental al Gremlin. Sin embargo, sería más exacto verlo como una mezcla de características entre un zombie, un gremlin y un poltergeist. Se dice que además sería aficionado a la cuajada y huevos frescos, que roba en graneros de aldeas remotas.
Igualmente en ciertas descripciones, se describe más parecido a un oso de peluche que a un mono y tendría un reborde óseo que se extiende desde la parte superior de su cráneo en su parte inferior del cuello, que le permitiría acabar con un buey con un golpe de cabeza. A veces se dice que había un agujero en la cabeza, creado con la ayuda de un bastón de metal al rojo vivo, y dos cuencas vacías en lugar de ojos. Otras versiones lo presentan como una criatura similar a Pie Grande o el Yeti.
Su leyenda es muy prevalente en las regiones donde se supone que vive, y con una gran importancia. Se observa a menudo por los pastores que pastorean sus rebaños al amanecer y por los niños, que se burlan a menudo.
La existencia de este ser, preocupa mucho a la población rural, ya que se le atribuye muchos secuestros de niños, violaciones y matanzas de ganado. También muerde los dedos de las personas que duermen, por lo que es habitual en algunas áreas, subir las camas a dos metros con ladrillos para que estén fuera del alcance del Tokoloshe. Según la leyenda Zulú, los que ven un Tokoloshe nunca lo deben revelar a nadie, de lo contrario la criatura volverá a aparecer para vengarse.
La visión de un artista correspondiente a la descripción de un Tokoloshe
A pesar de ello, la existencia del Tokoloshe nunca se ha establecido, su leyenda es muy prevalente en las regiones donde se supone que vive, y con una gran importancia. Se observa a menudo por los pastores que pastorean sus rebaños al amanecer y por los niños, se burlan a menudo.
Finalmente, algunos argumentan, que el Tokoloshe es una criatura alienígena llegada a la Tierra hace mucho tiempo, pero nada concreto parece apoyar esta hipótesis.
Algunos zulúes (y otras tribus del sur de África) son todavía supersticiosos cuando se trata de cosas como el tokoloshe supuestamente ficticio, una criatura peluda creada por un mago para dañar a sus enemigos (también conocida por violar mujeres y morder los dedos de los pies).
Según la leyenda, la única forma de mantener el Tokoloshe alejado por la noche es colocar un ladrillo debajo de cada pata de la cama. En 2009 hubo muchos casos generalizados de una mujer tokoloshe de tamaño humano que afirmó tener el nombre de “Livashni”. Esto todavía no se ha descartado como un engaño.
Uaxactún
Uaxactún
Localización de Uaxactún en Guatemala
Localización de Uaxactún en Petén
Ubicación
Uaxactún, es un yacimiento arqueológico maya precolombino, que se encuentra unos 25 km al norte de Tikal, en el municipio de Flores, en el departamento de Petén, en la República de Guatemala.
Su nombre en la antigüedad era Siaan Ka’an, que quiere decir Nacida del Cielo. Esta ciudad fue habitada desde el Período Preclásico medio cerca 900 a. C. y todo el Clásico, teniendo su máximo esplendor del 500 d.C. al 900 d.C.
La inscripción más temprana es en 328 d.C. en la Estela 9 y la última el 899 d.C. en la Estela 12. Esto indica que fue la ciudad con la ocupación más larga del Petén. Fue considerada por mucho tiempo como la más antigua, hasta que el hallazgo de Nakbé y El Mirador, al noroeste, demostró que estas ciudades correspondían al período Preclásico Temprano (1000 a.C. – 200 a.C.).
Al igual que muchas otras ciudades del Clásico, Uaxactún fue abandonada en el inicio del siglo x, siendo cubierta por la jungla, hasta su descubrimiento a inicios del siglo xx, en 1916, por Silvanus Morley durante el gobierno del licenciado Manuel Estrada Cabrera. Fue en Uaxactún en donde se sentaron las bases para la investigación de la Civilización Maya y donde se inició un estudio detenido del sitio, llevado a cabo principalmente, pero no exclusivamente por la Carnegie Institution de Washington. De hecho las excavaciones iniciadas por John Lloyd Stephens y Frederick Catherwood,1 hicieron a la Cultura Maya popular y conocida en todo el Mundo.
Los arqueólogos llaman a los conjuntos astronómicos de las ciudades Mayas Grupo E, debido a que el primer conjunto de éste tipo, descubierto, fue precisamente el Grupo E de Uaxactún. El nombre Uaxactún, u Piedras Ocho, fue dado por Sylvanus Morley, por una inscripción que él encontró al descifrar una Estela que había sido un regalo del rey de Tikal, después de la derrota que le infringió el rey de Uaxactún, la cual empezaba con el número ocho.
La pintura mural también está presente en Uaxactún, como lo demuestran estudios en los años 50 acerca de una construcción habitacional llamada la Estructura B XIII, ahora desaparecida, donde al parecer tiene una iconografía de carácter histórico, refiriendo un hecho de sometimiento. Por la policromía, la línea inflexiones suaves u el uso de la figura humana de proporciones naturalistas, esta pintura, es también en la forma muy afín a las del estilo policromo naturalista del Preclásico de Tikal.
Desde 1990 el proyecto La pintura mural prehispánica en México del Instituto de Investigaciones Estéticas de la Universidad Nacional Autónoma de México, se dedica al registro y estudio de los murales precolombinos, como los de Uaxactún.
Uno de los monumentos más notables de Uaxactún es el llamado «Templo de los Mascarones», construido con formas arcaicas de proporciones muy equilibradas. Tiene escaleras en los cuatro lados y en su plataforma superior o sobreestructura se observan los agujeros para sostener posiblemente un templete en forma de rancho coronado por un techo de madera y paja. El nombre de Mascarones obedece a que dicho templo tiene dieciséis grandes figuras que representan una mezcla humana y de tigre, repartida en número de cuatro por cada lado.
El Grupo A y el Grupo H, ambos construidos de acuerdo al patrón triádico, son considerados como los centro de poder durante el período Clásico Temprano2 y el período Preclásico,3 respectivamente. De hecho, el grupo A-V es considerado como el primer arreglo tripartito de este tipo en ser identificado, gracias al trabajo de reconstrucción hipotética de sus estadios constructivos realizado por Tatiana Proskouriakoff en 1946.4
Uaxactún es el primer sitio arqueológico en donde se observó la existencia del arco falso maya.
Galería de imágenes
Templo de los Mascarones
Juego de pelota maya
Estructura EVII
MASK ON TEMPLE E, UAXACTUN
La ocupación de Uaxactún en el período Clásico Temprano es importante y de acuerdo con algunos documentos con fecha entre 378 a.C. y 379 d.C., se ha sugerido una estrecha relación con Tikal, ya sea de forma de alianza o de guerra, lo que terminó en el dominio de este último centro.
Se cree que Uaxactún era una ciudad bastante importante mucho antes de la fecha encontrada en la estela, ya que han sido hallados pedazos de antiguas estelas. Se han encontrado bellas vasijas de arte Maya como muestra de la consolidación de su cultura, perfeccionaron su sistema de escritura y comenzaron a elaborar su calendario.
La Fase más temprana de construcción se inició en el primer milenio Antes de Cristo, y duró hasta el 100 d.C., durante este período era una aldea con chozas de madera y techos de palma.
La segunda fase se inició alrededor del 100 d.C. Siendo su arquitectura, estructuras de piedra y argamasa en Plazas niveladas.
En el clásico del 250 al 900 d.C. los templos de Piedra con cubierta de estuco fueron construidos en plazas pavimentadas, siendo el 899 d.C. el año en el cual terminó la actividad de construcción importante en Uaxactún.
Según el Arqueólogo Juan Antonio Valdez, en sus investigaciones sobre el linaje de Uaxactún, dice que hubo dos dinastías las cuales son una del Clásico Temprano que principia con el Gobernante Rana Humeante conquistador de Uaxactun, y el siguiente que fue un poco más independiente de lo que fue la conquista de Uaxactún es el del Clásico Tardío.
Pirámide con cuatro accesos a los puntos cardinales, posiblemente tuvo techo de material perecedero, y se cree que la utilizaba el gobernante de esa época para dar algún anuncio desde arriba.
Estructura A – 2
Esta estructura es la A-2 localizada en el grupo que posiblemente sirvió para que los de la elite observaran las ceremonias, sacrificios u otros sucesos importantes
Cantera Maya
Este es el lugar de donde los mayas extraían el material para sus construcciones.
Palacio A XVIII
Anteriormente se creía que este templo fue erigido por el gobernante Rana Humeante, pero las investigaciones más recientes aseguran que fue otro gobernante que mandó erigir este precioso templo, del cual se tiene la mejor vista panorámica del sitio. Desde allí seguramente el gobernante A-22 tuvo el control de la población que vivía en Uaxactún ya que la sociedad estuvo dividida en varias clases y dependiendo del estatus social al que un individuo perteneciera serían sus privilegios y limitaciones. La clase más baja vivía en chozas de palma en la periferia del sitio, y los que pertenecían a un estatus social más alto estaban ubicados de manera en la que la nobleza fuera la del centro o sea los de abajo en la orilla y la nobleza en el centro.
Entonces aparte de cumplir con funciones ceremoniales, este edificio es posible haya servido como punto de vigilancia. El palacio, como ha sido categorizado, también posee las características de templo por estar conformado con cuerpos escalonados los que forman una pirámide que sostiene en la parte superior un templo con su crestería y un posible trono en la parte superior desde donde se cree el gobernante oficiaba las ceremonias, el motivo por el cual se le califica como palacio y no como templo es por la cantidad de habitaciones con las que cuenta.
Palacio V o Acrópolis
Este conjunto de estructuras es considerado el modelo para las acrópolis e incluso se piensa que la acrópolis norte de Tikal es una versión mejorada de esta. Al igual que la mayoría de los sitios de las tierras bajas este conjunto de edificios cuenta con diferentes fases constructivas, las cuales fueron realizadas en diferentes etapas de tiempo y por lo consiguiente por diferentes gobernantes.
Los gobernantes mayas mataban el poder de su antecesor realizando estructuras sobre las que eran principales para los anteriores, así ellos hacían sentir que el gobernante anterior pasó a la historia junto con todo lo que en su tiempo fue la representación de su poder y con esto demostrar su grandeza.
En el caso de la acrópolis de Uaxactún o palacio V cuenta con una agrupación de habitaciones en las que se puede observar el arco falso, maya camas, una plataforma semi circular que cuenta con evidencia de haber tenido un techo de material perecedero etc., en este lugar se encontraron 4 tumbas que se cree fueron las de la dinastía de Rana Humeante, un guerrero de Tikal que fue el conquistador de Uaxactún por lo que obtuvo el derecho a gobernar el sitio. Los entierros fueron encontrados orientados a los cuatro puntos cardinales y se cree que los restos humanos encontrados al norte son los de el gobernante Rana Humeante, los del sur de su hijo Bat Makína, los del oeste del nieto de Rana Humeante, hijo de Bat Marina el gobernante A-22 y al este los de el gobernante A-20 bisnieto del famoso Rana Humeante.
Esta es una estructura que posiblemente tuvo techo de material perecedero, que pudo haber sido utilizada para las ceremonias realizadas antes de enterrar a los 4 gobernantes que se encontraron aquí. En la cual le traían las ofrendas.
Estela 9
Es la más antigua del sitio fechada para el 24 de septiembre del 327, se cree que esta conmemora una fecha histórica. Esta muestra un gobernante parado de perfil y al frente, en posición hincada, quizá este un cautivo suplicante. En su texto por no ser de una fecha redonda, evidentemente conmemora un acontecimiento histórico y el hecho de tener un cautivo frente al gobernante posiblemente recuerde una actividad guerrera en la cual el salió victorioso.
Estela 12
Erigida en el 889 d.C. Su inscripción se inicia con la rueda Calendárica de la fecha dedicatoria del monumento, luego indica la realización de un rito de esparcimiento y la colocación de la estela por el gobernante Hasaw Chaan Kawil II.
Estela 13
Erigida en el 830 d.c. su inscripción inicia con la Rueda Calendárica que corresponde a la fecha dedicatoria del monumento, la cual es seguida de una expresión que indica la finalización de décimo Baktún, suceso que fue atestiguado por un soberano local cuyo nombre es Olom.
Estela 14
Erigida en el 702 d.c. y por lo tanto se convierte en el monumento más temprano del clásico tardío, por el gobernante Chaan Kan Ko.
Grupo B, Palacio de Doncellas
Se le llama así porque el interior del palacio se encuentra una cama y se cree que las hijas de los gobernantes iban a pasar su primera noche de luna de miel y se le ponían pieles a la cama y algodón. B 13
Juego de Pelota
Este juego de pelota tiene similitud al de Tikal, solo que este es más pequeño, se jugaba con los codos, cadera y tobillos, sus marcadores pudieron haber sido de madera o de piedra y la pelota con que jugaban la elaboraban del árbol de hule. Al lado derecho de este se encuentra una estela que posiblemente sirvió como relleno por su posición.
Estela 1
Erigida en el 711 d.c. ubicada al lado derecho del Juego de Pelota, parece representar dos fechas en rueda calendárica.
Estela 2
Erigida en el 751 d.c. localizada en el grupo frente al la estructura B-4, en su lado derecho registra una cuenta larga acompañada de la rueda Calendárica, que corresponde a la fecha dedicatoria del monumento.
Estela 3
Erigida en el 507 d.C. por el gobernante A-20 que podría ser la de su asenso al trono.
Estelas 4 y 5
Hacen referencia a la victoria de Tikal y mencionan al gobernante Rana Humeante como protagonista. La estela 4 fue erigida 20 años mas tarde para conmemora una vez más este suceso, lo que indica que este gobernante y el grupo vencedor seguían viviendo en esta ciudad. Y la estela 5 data del 378 d.C., que representa al gobernante Rana Humeante en la fecha que conquistó a Uaxactún y su acenso al trono y esta también representado en la estela 31 de Tikal. Rana Humeante murió en el 402 d.C. y se encontró en el entierro 29.
Estela 23
Erigida en el 475 d.c. por el gobernante A-22 primera estela de este gobernante
Grupo E
Este grupo sobresale por su observatorio astronómico. La estructura E 7 sub, que es la principal del sitio, se orienta al este. Existe una estructura lineal con tres estructuras que son E 1, E 2, y E 3. La estructura más alta del grupo E, es la E 10 y probablemente es la más antigua por su arco corve escalonada, construido en el 400 a.C. En este grupo también se encuadran 3 estelas la 19, 18 y 20
Observatorio Astronómico
Esté conformado por cuatro estructuras en las que los mayas podían observar los movimientos del sol, podían fechar las épocas de verano y las épocas de invierno, entre otros acontecimientos como eclipses , equinoccios y solsticios.
Este lo utilizaban para tomar el tiempo como los cambios solares, lunares y otros también para saber cuando podían hacer sus cosechas, este observatorio es exacto los mayas podían saber cuando iba a ser primavera y el otoño. El 21 de Marzo se observa el equinoccio de primavera y el 21 de Diciembre el solsticio de invierno. Tres meses duraba el sol para llegar de una estructura a otra. 21 de Junio solsticio de verano, 21 de septiembre equinoccio de otoño. Cuando el sol sale a los laterales de la estructura y los equinoccios cuando el sol sale en la estructura del centro.
Templo E – 10
Este templo se considera que fue como un santuario donde los sacerdotes guardaban sus vestimentas, cuenta con un acceso y escalinata principal, dentro de este templo o santuario se puede observar perfectamente el arco falso escalonado. Este cuenta con su estuco original y una sub estructura, también se encontraron pinturas que representan la entrada Teothihuacana
Esta estructura cuenta con 18 mascarones que representan el jaguar, Wits y posiblemente al Chak, es una pirámide truncada y radial con 4 accesos a los cuatro puntos cardinales que posiblemente tuvo techo de material perecedero y es la principal estructura del observatorio astronómico desde la que los mayas observaban los equinoccios y solsticios.
Estructuras E1, E2 y E3
Estas tres estructuras son las que marcaban la posición del sol, los equinoccios y solsticios. De la E2, que está al centro, observaban el equinoccio de primavera el 21 de marzo; de la estructura E1 a lado izquierdo observaban el solsticio de verano justo el 21 de junio; y nuevamente en la E2 el 21 de septiembre se marcaba el equinoccio de otoño; y por último en la estructura E3 el 21 de diciembre se marcaba el solsticio de invierno.
Muestran a dos protagonistas de elevada jerarquía
Estela 20
Es uno de los monumentos más suntuosos dentro de los del clásico temprano y parece ser una afirmación, en ese monumento, de cierta independencia frente a la tutelarídad de Tikal. Representa al gobernante A-22 en posición frontal luciendo uno de los tocados más fantásticos en este tipo de representación, y hay dos cautivos arrodillados a sus pies.
UAXACTUN, GUATEMALA – OBSERVATORIO ASTRONÓMICO
A lo largo de los últimos años se han hecho mediciones de muchos sitios, lo cual permite concluir que un gran número de orientaciones y alineamientos arqueoastronómicos estaban diseñados intencionalmente para marcar la dirección de la salida o la puesta del Sol y/o de las estrellas o constelaciones en determinadas fechas. En algunos casos las tablas de fenómenos estelares del pasado nos permiten sugerir la fecha de construcción del edificio en cuestión.25 El testimonio arqueológico plasmado en las orientaciones comprueba que se observaban determinados fenómenos astronómicos sobre el horizonte, y que los pueblos prehispánicos tenían la capacidad tecnológica de diseñar y construir edificios en coordinación exacta con el fenómeno natural que querían hacer resaltar. El estudio de las orientaciones abre, pues, nuevas perspectivas de investigación donde las inscripciones en estelas, códices y fuentes históricas guardan silencio. A través de las mediciones de campo es posible seguir ampliando este nuevo tipo de documentación.
Hasta ahora se han estudiado tales relaciones entre el principio de la orientación y fechas solares y/o estelares en los casos de Teotihuacán, Alta Vista, Xochicalco, Cholula, Malinalco, Tenochtitlán, Monte Albán, Caballito Blanco, Chichén Itzá, Uxmal, Uaxactún, Copán y Palenque, por mencionar sólo los sitios más importantes y mejor estudiados.
Uaxactún/ Guatemala, Grupo E. Observación desde el edificio VII hacia los edificios I, II y III que marcan el movimiento anual del Sol entre los puntos extremos de los solsticios. Plano de Tichy basado en Ricketson (1937, figura 68) y completado con las direcciones de 11.5º, 16º y 20º del E hacia el N y hacia el S. La columna E 1, de colocación original dudosa, podría haber estado situada en la línea de 11.5º del E hacia el S. Se añade también la posición del eje de la pirámide III con 11.5º. (Según Tichy, 1976, figura 10.)
Batutut
Batutut
Homínido críptico
Otros nombres: Ujit, Nguoi Rung
Región: Vũ Quang (Vietnam)
El Batutut o Ujit o Người rừng, a veces también conocido como “gente del bosque”, es un cryptid homínido propuesto, supuestamente similar al bigfoot, que se cree habitará la reserva natural de Vũ Quang y otras áreas silvestres de Vietnam, Laos y Borneo septentrional. El Vũ Quang ha sido la fuente de varios mamíferos recientemente descubiertos por el Dr. John MacKinnon. Mackinnon afirma haber observado por primera vez pistas en 1970 que le llevaron a creer que un homínido similar al Meganthropus vive allí (en su lugar, el criptozoólogo Loren Coleman cree que los Batutut son una población superviviente de Homo erectus o Neanderthal [1]). El libro de 1975 de Mackinnon En busca del mono rojo describe sus experiencias y descubrimientos.[2] Un avistaje de 1947 por un colonizador francés se refiere al animal como un L’Homme Sauvage (hombre salvaje). [3] Los eruditos vietnamitas se refieren al animal como el Người Rừng (“hombre del bosque”).[4]
Se describe como siendo aproximadamente 1.8 m (6 pies) alto y cubierto con el pelo excepto en las rodillas, las plantas de los pies, las manos, y la cara. El cabello varía en color de gris a marrón a negro. La criatura camina sobre dos piernas y ha sido reportada solitaria y moviéndose en pequeños grupos. La criatura es la mayoría de las veces avistado buscando comida de frutas y hojas a langers e incluso zorros voladores.
En Borneo, los testigos lo describen como cuatro pies de alto y muy agresivo, matando ocasionalmente a seres humanos y rasgando hacia fuera sus hígados.[5]
En su libro Very Crazy GI – Historias extrañas pero verdaderas de la guerra de Vietnam, Kregg PJ Jorgenson relata un avistamiento de tal criatura por un equipo de soldados de los EEUU. Los hombres se refirieron a él como un “Rock Ape” que lo reporta como siendo pequeño en estatura, cerca de 5 pies de alto y que tiene un tinte rojizo a su piel. [6]
Según informes, dos Người Rừngs fueron capturados por miembros de las tribus cerca de la provincia Đắk Lắk en 1971. En 1974 un general vietnamita, Hoang Minh Thao, solicitó una expedición para encontrar pruebas de las criaturas, pero no tuvo éxito.[5]
Un profesor Tran Hong Viet de la Universidad Pedagógica de Hanoi, un investigador de Người Rừng, informó en 1982 que encontró huellas similares a las de MacKinnon en 1970, midiendo 28×16 cm., De las cuales hizo moldes.[7] Él había estado haciendo un inventario extenso de la posguerra de recursos naturales, y mientras que recogía especímenes cerca de Chu Mo Ray en el districto de Sa Thầy, él encontró las impresiones. Una foto del molde de la impresión fue publicada más adelante por las noticias de Fortean del mundo (sociedad de la información de Fortean de Japón).[8]
En la 5 ª temporada premier de Syfy Destino Verdad, el anfitrión Josh Gates y el equipo de ir a Vietnam en busca de la Batutut. Gates entrevista a un primatólogo local, Vu Ngoc Thanh, y examina su proyección de una huella. Más tarde, en el Parque Nacional Ke Bang, el equipo de Gates encuentra varias grandes huellas humanas y hace un casting propio que es llevado de regreso a los Estados Unidos y examinado por el investigador de Bigfoot, el antropólogo Jeffrey Meldrum. Meldrum llamó a la imprenta “un descubrimiento significativo” y una de las mejores pruebas que ha visto.
Gary Linderer estaba en una patrulla de seis hombres con las Patrullas de Reconocimiento de Largo Alcance de la 101ª Aerotransportada. Mientras luchaba por el matorral, se encontró con “ojos profundos en una frente prominente… cinco pies de altura, con largos brazos musculosos”. La criatura “caminó erguida con amplios hombros y un torso pesado”. Sus compañeros de batalla le dijeron que acababa de ver un mono de roca, pero Linderer había visto a Rock Apes antes. Esto no era Rock Ape.
First, Charlie. Now this. Unbelievable.
Al igual que el Yeti en el Himalaya, y el Sasquatch avistamientos en toda América del Norte, el Nguoi Rung es un cuento que se cuenta a menudo en la zona, pero a pesar de las interminables visiones y el folclore adjunto a la criatura semi-mítica. Linderer tampoco fue el único testigo. Sargento del ejército. Thomas Jenkins informó que su pelotón fue atacado por estos monos lanzando piedras.
Hacia el final de la guerra, los soldados Viet Cong y NVA informaron de tantos avistamientos de Nguoi Rung, de pelo rojizo y cubierto de pelos, que la secretaría del Partido Comunista de Vietnam del Norte ordenó a los científicos investigar.
El Dr. Vo Quy, un respetado ornitólogo e investigador medioambiental de Hanoi, descubrió una huella de Nguoi Rung en el suelo del bosque e hizo un elenco de ella. El yeso era más ancho que un pie humano y demasiado grande para un mono.
En 1982, otro científico vietnamita, Tran Hong Viet descubrió más huellas, lo que llevó al zoólogo John MacKinnon a investigar la región. MacKinnon llamó a la zona una “pequeña y prístina esquina del mundo desconocida para la ciencia moderna”.
The 1982 Footprint Cast.
En 1969, MacKinnon descubrió huellas de hombre en las selvas de Borneo, que los lugareños llamaron Batatut. Aunque gran parte de la evidencia acerca de la existencia de estos simios es anecdótica, MacKinnon, conocido por su descubrimiento de nuevas especies de mamíferos en Vietnam, cree que existe la posibilidad de que la existencia de una especie de mono previamente desconocida sea real.
El relato de Nguoi Rung reuniéndose con los American GIs en Vietnam fue publicado por primera vez en Kregg P.J. Jorgenson’s Very Crazy, GI: Historias extrañas pero verdaderas de la guerra de Vietnam.
Debe estar conectado para enviar un comentario.