Ciencia
Mapas del manuscrito HM 83
Mapas del manuscrito HM 83
En Huntington Library.
Unos diez años después de la edición del Rudimentum Novitiorum en Lübeck en 1475, se confeccionó, también en Lübeck, un manuscrito, conservado en la Huntington Library (San Marino, California), que contiene mapas muy originales. Ha sido descrito en dos ocasiones, pero el único estudio se debe a Chet Van Duzer y Ilya Dines, de quienes tomamos los datos que figuran a continuación. La evidencia de que fue confeccionado en Lübeck se debe a varias menciones en el texto y a la prominencia que esta ciudad alcanza en uno de los mapas, práctica común de los cartógrafos medievales respecto de su ciudad natal. El manuscrito es anónimo, pues, aunque el autor habla con frecuencia de sí mismo en primera persona, no proporciona su nombre. Dado que uno de los pasajes se refiere a su viaje a Tierra Santa, Van Duzer y Dines han examinado los registros existentes sobre personajes de Lübeck que en aquellas fechas viajaron a Tierra Santa. Han encontrado hasta ocho personas, pero no hay datos que permitan atribuirlo a alguno de ellos. El más probable, en su opinión, es un médico llamado Baptista, que fue encomendado por el Papa Pío II para regentar la atención de peregrinos en el monasterio franciscano de Monte Sion, donde estuvo a su cargo durante unos veinte años, y esto se sabe porque hay datos de personas ilustres que lo visitaron, siendo el último dato de 1482. No hay constancia de su regreso a Lübeck. Si el manuscrito fue obra suya, debió ser obra de sus últimos años. En todo caso, de los textos en los que escribe sobre sí mismo, se desprende que tenía experiencia en el estudio y confección de mapas.
En cuanto a la datación del manuscrito, en tres lugares se menciona la fecha de 1486 y en otro folio posterior la de 1488, pero hay que tener en cuenta que se aprecia claramente que la escritura corresponde a tres manos distintas, por lo que el manuscrito que ha llegado hasta nosotros es una copia de un original anterior realizada por tres escribas. Ahora bien, dado que el manuscrito solo tiene 25 folios, incluyendo texto y mapas, no es razonable un periodo de dos años para una copia realizada por tres personas. Lo más probable es que esas fechas no sean las de la copia sino las de confección del original, que los escribas transcriben literalmente. En cuanto a sus fuentes, no hay duda de que el autor se inspiró, entre otras, en De Propietatibus rerum, de Bartholomeus Anglicus, al igual que el autor del Rudimentum Novitiorum. Lo que hay que preguntarse es si este último ejerció alguna influencia, dado que fue editado en la misma ciudad de Lübeck unos diez años antes. Van Duzer y Dines destacan varias diferencias importantes entre ambas obras, como la descripción de los propios autores sobre los propósitos de los mapas, y sin embargo hay ciertas similitudes, como la inclusión de la inusual Vinland (Finlandia) que permiten deducir que el autor del Ms HM 83 conocía y consultó el Rudimentum, pero como el propósito de su trabajo era muy diferente, hizo poco uso de él.
El manuscrito consiste en un breve tratado geográfico ilustrado con mapas, otro breve tratado sobre el Apocalipsis, también con mapas, y una colección de textos sobre medicina astrológica, astronomía y geografía con diagramas, por ejemplo, sobre las zonas climáticas de la Tierra y sobre el curso del Sol alrededor de la Tierra. Aquí vamos a referirnos a las dos primeras secciones, que contienen, además del mapamundi, una serie de mapas que pueden calificarse de novedad, pues son los primeros mapas temáticos concebidos en forma moderna, es decir, mapas que se utilizan para mostrar la distribución geográfica de un elemento que puede ser no geográfico y que constituye el tema específico. En el mundo actual se hace un constante uso de ellos, por ejemplo, los mapas económicos, sociales, meteorológicos, idiomáticos, o los que se usan para explicar el curso de eventos históricos, como las Guerras Mundiales.
En opinión de Arthur Robinson, no hay mapas puramente temáticos anteriores a la segunda mitad del siglo XVII, sino solo ocasionales adiciones a otros mapas. Pero en opinión de Van Duzer y Dines, hay precedentes de mapas temáticos incluso muy antiguos, y los contenidos en el Ms HM 83, en especial, los del Apocalipsis, parecen haber sido creados con una concepción del género muy cercana a su moderna noción y finalidad. El autor demuestra una avanzada comprensión de los usos de los mapas, en un texto del siglo XV. En el folio 8v del manuscrito nos dice que los mapas pueden ser utilizados para mostrar, en primer lugar, las características físicas de la tierra; en segundo lugar, las ciudades y los edificios creados por los seres humanos; en tercer lugar, los pueblos que viven en diferentes regiones, y en cuarto lugar, las relaciones políticas que hay entre los diferentes pueblos. Este texto parece tener el propósito de explicar la serie de mapas temáticos geográficos y apocalípticos del tratado.
El tratado geográfico, tras hacer constar la división del mundo entre los hijos de Noé, contiene una descripción de las principales provincias de los continentes, listas de islas, montañas de Tierra Santa y de “otras alrededor de Tierra Santa”, y territorios donde predicaron los apóstoles. Está ilustrado con mapas del mundo, de islas, de los ríos del Paraíso y de los territorios del apostolado.
La figura en el primer folio, muestra un mapa del mundo orientado al este y enfatizando el océano circundante y el Mediterráneo. Tras una argumentación sobre las “Tres Babilonias”, explica en los textos superior e inferior la división del mundo entre los hijos de Noé. El texto a la derecha dice, en latín: “este círculo exterior contiene el océano, mientras que los espacios del interior indican la tierra habitable, que es una cuarta parte de la totalidad”. El texto en línea curvada dice: “mar océano, que rodea la Tierra, y también el mar ventoso”. En Asia están escritas las palabras India, Asia Mayor, Egiptus, Sem, también llamado Melquisedec, y mare magnum, es decir, los territorios que corresponden a Sem, En África y Europa solo constan los nombres de Cam y Jafet, con la peculiaridad en la costa de Europa del término mare artum (mar estrecho). Este dato es intrigante. En algunos mapas el Mediterráneo es denominado mare magnum, pero el término mare artum es una novedad. Teniendo en cuenta que mare magnum se encuentra en el Mediterráneo oriental, cabe pensar que utiliza el término mare artum para referirse a la reducción del Mediterráneo occidental producida por el estrecho de Gibraltar. Además, el Mediterráneo oriental se ensancha de tal manera hacia el sur que se convierte en la división entre Asia y África, desplazando en esta función al Nilo. Si es así, el mapa presenta una importante variación del mapa medieval de tipo T-O.
El Ms HM 83 contiene varios mapas temáticos sobre montañas, islas y aguas del mundo, que parecen estar basados en los mapas que aparecen en ediciones francesas de De propietatibus rerum de Bartholomeus Anglicus, con la traducción de Jean Corbechon, completada en 1372, que se conservan en la BnF. En estas ediciones francesas, a diferencia de las latinas, se incluyen mapas temáticos de ríos, montañas y ciudades, en bellas ilustraciones, que pueden haber inspirado al autor del Ms HM 83. El mapa que ilustra la lista de “montañas de Tierra Santa y de otras alrededor de Tierra Santa” y el “mapa de las aguas del mundo”, pueden estar inspirados en imágenes similares de dichas ediciones francesas. Basta comparar los mapas. La primera es el mapa denominado Mappa de Aquis terram irrigantibus (mapa de las aguas que riegan el mundo) en el Ms HM 83. La segunda es un mapa de las aguas y ríos del mundo en una de las ediciones francesas de la obra de Bartholomeus Anglicus, de 1480. Se asemejan en la ilustración del Paraíso y en la configuración de sus ríos, de trazos sinuosos y desembocando aproximadamente en los mismos lugares. Se diferencian en que el mapa del M 83 enfatiza los ríos del Paraíso, despreocupándose del resto, sin duda por el distinto propósito de ambas obras. Podría haber otra fuente, hoy perdida, pues Van Duzer y Dines han encontrado otro manuscrito del siglo XV con un mapa idéntico, con total coincidencia en el trazado de ríos y masas de agua. Es una miscelánea de textos cristianos sobre variadas materias con algunos mapas y diagramas.
A diferencia de los mapas sobre las aguas y ríos del mundo, los mapas temáticos de islas en el Ms HM 83 no tienen precedentes. El mapa de la figura 159-A se denomina figura insularum maris occeani (mapa de las islas del océano) e ilustra la lista de las islas de Asia y Europa que consta en los dos folios anteriores. Es, en realidad, un mapa de todas las islas del mundo conocido, y por ello, no hay islas en el océano sur, ni en el mapa ni el texto del manuscrito. Faltan, sin embargo, algunas islas atlánticas habituales en cartas náuticas, lo que indica que el autor no debía estar familiarizado con éstas. Su importancia es que es el primer mapa temático de las islas del mundo. Existen autores que dedicaron capítulos, más o menos breves, a las islas del mundo, como Isidoro de Sevilla o Bartholomeus Anglicus, pero no se ilustran con mapas. También hay libros sobre islas con mapas, pero son mapas de islas aisladas o de archipiélagos. Este es el primer mapa de las islas del mundo y el siguiente no se produjo hasta 1528, aunque este género de mapas temáticos de islas del mundo no llegó a ser común hasta el siglo XIX. Todo indica que este mapa no está basado en otro anterior y es una creación particular de su autor.
Los mapas más peculiares del Ms HM 83 son los que ilustran la sección dedicada al Apocalipsis. Son los primeros mapas temáticos en sentido moderno, pues se utilizan como herramienta para ilustrar un contenido no geográfico, en este caso los sucesos del Apocalipsis, en una secuencia cronológica ideada por el autor, que va desde el año 639 hasta el periodo comprendido entre 1606 y 1651. Son mapas importantes para el estudio histórico de las manifestaciones culturales del Apocalipsis, pero, dado que no son verdaderos mapas geográficos sino proféticos, nos limitamos a hacer un resumen descriptivo. El autor conecta el Apocalipsis y el fin del mundo con la expansión del islam, que, en el siglo XV, tras la conquista de Constantinopla (1453), amenazaba al mundo cristiano. El primer mapa muestra el mundo desde el nacimiento de Cristo hasta el año 639, que para el autor es la fecha en la que Mahoma comenzó su predicación. El texto dice que este dibujo es un mapamundi del dominio del mundo desde el nacimiento de Jesús hasta el año 639, y que Octavio, el primer emperador romano, gobernó el mundo durante muchos años, y el Señor Jesús gobierna de acuerdo con la ley divina. El segundo mapa abarca desde 639 hasta 1514, mostrando la expansión del islam. El autor piensa que ha llegado a todo el mundo excepto a Europa. El texto dice que está basado en el Libro de las Revelaciones (Apocalipsis), capítulos 12 a 19. El autor explica: que la India se halla gobernada por el Preste Juan, que es cristiano, pero que ya no sigue la autoridad de Roma; que en Egipto el sultán de El Cairo gobierna a todos los sarracenos occidentales de acuerdo con la ley de Mahoma, y sus dominios se extienden hasta Tierra Santa; que África es gobernada por el rey de los sarracenos occidentales, que lleva el nombre de Miramamolín; que en Europa el Papa y el emperador gobiernan solo de nombre, porque hay gran disensión; y que la espada de Mahoma conquistará todo esto pronto. Con todo ello, el mapa da testimonio de un mundo en el que el cristianismo está perdiendo terreno frente al islam, por lo que este mapa es al mismo tiempo un mapa histórico y un mapa temático de las religiones del mundo. El tercer mapa (Fig. 161) muestra el mundo entre 1514 y 1570, cuando la espada del islam ya ha conquistado Europa, y comprende el mundo entero excepto las islas del océano. Una leyenda inscrita sobre el océano indica que Mahoma no tendrá ningún poder sobre las islas, solo sobre el continente, y que por esta razón las espadas no se extienden más allá del continente. También se dice que está basado en el Libro de las Revelaciones, capítulo 19. El cuarto mapa comprende los años 1570 a 1600, y es una representación del Anticristo. Dice el autor que la serie de triángulos que se ven en el centro de la imagen, y que van desde los pequeños hasta los grandes, dan señal del crecimiento del Anticristo, y que los otros picos grandes que llegan hasta los bordes del mundo representan los diez cuernos de la terrible bestia. El quinto mapa muestra el dominio del Anticristo, desde 1600 a 1606. Es un ejemplo de geografía simbólica muy original. El Anticristo se encuentra en Jerusalén, en el centro del mapa. Las cuatro penínsulas que penetran en el océano son el símbolo de sus cuernos, que llevan escritos los cuatro métodos por los cuales captará a las personas para que acudan a él (engaño, astucia, crueldad e imitación de la deidad), y así, las Diez Perdidas Tribus de Israel aparecen viajando desde su isla hacia Jerusalén para reunirse con el Anticristo. En la isla y en el camino se dice que las tribus de Israel vienen a Jerusalén, a Gog (que se utiliza como un apelativo del Anticristo). El sexto mapa muestra una situación completamente diferente. Comprende el periodo de 1606 a 1651. El Anticristo ha sido vencido. El centro de la Tierra está ocupado por la bandera y la ley de Cristo, que será adorado en todo el mundo. La superficie de la tierra está desprovista de características y de topónimos. El texto dice que es una esfera desnuda, sin montañas ni valles ni islas en el océano, porque todos esos lugares estarán quemados, y los piadosos estarán separados de los impíos. El último mapa de la secuencia muestra el Juicio Final. En la parte superior están las puertas del Paraíso. En el centro están Jesús y los Apóstoles, encima del Monte de los Olivos. El texto curvado por encima de Jesús y los Apóstoles dice que los elegidos sobresalen en el aire como estrellas alrededor del juicio de Jesús. Debajo del Monte de los Olivos otro texto en curva dice que los condenados sobresalen inmóviles por encima de este abismo en la tierra, dibujado como un negro y amenazante abismo que conduce al infierno.
Mapas del Rudimentum Novitiorum
Mapas del Rudimentum Novitiorum
Su nombre completo es Rudimentum Novitiorum sive chronicarum historiarum epitome, nombre que figura en el colofón, y que suele traducirse como Introducción o Manual básico para principiantes. Es un libro de historia del mundo, con contenido de historia bíblica, historia clásica y mitología, escrito en latín, por autor anónimo. Se imprimió en Lübeck en tamaño folio con fecha 5 de agosto de 1475 por Lucas Brandis y es un importante incunable. Indica el editor que ha sido concebido para que aquellos que carezcan de medios (pauperes) para adquirir muchos libros puedan tener a mano un solo libro en un lugar de muchos. Dice Evelyn Edson (nota 6) que estos pauperes a quien se refiere Lucas Brandis podrían ser no solo predicadores pobres, frailes menores o estudiantes, sino también el creciente número de comerciantes adquirentes de libros en una próspera ciudad comercial como era Lübeck. El libro, de 475 páginas, comienza con la creación del mundo y termina en el año 1475, el mismo año de la impresión, con la usual subdivisión de la historia en las seis aetates concebidas por Isidoro. Está ricamente ilustrado con unas 150 ilustraciones, grabadas en plancha de madera (xilografías), y entre ellos esquemas gráficos con genealogías de los antepasados de Cristo, de sumos sacerdotes judíos, jueces y gobernantes bíblicos, emperadores romanos y papas. Son paneles visualizados que proporcionan una visión general de la historia, muy útiles como instrumento de enseñanza y complemento del texto.
El libro debió alcanzar gran difusión, pues según el estudio de Anna-Dorothee von den Brincken, sobreviven al menos veintisiete ejemplares. Lo que no se sabe es si hubo una versión manuscrita que se utilizó para la edición impresa. No se ha encontrado, pero las historias universales de este tipo eran bastantes populares en la Edad Media. Von den Brincken observa que los veinte años anteriores a la edición están escasamente cubiertos, por lo que en su opinión fueron un añadido del editor a un trabajo anterior. Sobre el autor nada se sabe. Theodor Schwarz llega a la conclusión de que tuvo que ser un fraile, y deduce de la palabra “noster” en un lugar específico, que era de Lübeck o de su vecindad. Pero, como indica Heinrich Winter, esto solo puede ser cierto respecto de la versión impresa, no respecto de un posible manuscrito anterior. En general, se entiende que el autor fue un monje del convento franciscano de Lübeck. Andrea Worm estima que por las fuentes que cita, y en especial las crónicas historiográficas de los obispos de Lübeck, no hay duda que al autor del Rudimentum fue un clérigo, presumiblemente un miembro del capítulo catedralicio de Lübeck, que trabajó durante el episcopado del erudito obispo Albert II Krummediek. La edición original en latín fue traducida al francés en 1488 con el título Mer des Hystoires (Pierre Le Rouge, Paris), y esta primera edición fue reeditada otras siete veces durante el siguiente siglo, hasta 1555, con algunas adiciones.
El Rudimentum contiene dos mapas, un mapamundi y un mapa de Tierra Santa, que preceden a sus respectivas descripciones, y que tienen el importante valor de ser los primeros mapas detallados impresos, mostrando el mundo y sus países en relación topográfica entre ellos, pues la única excepción es un pequeño mapa esquemático de Isidoro de Sevilla en una edición de sus Etimologías impresa por Günther Zainer en Augsburgo en 1472.
Dice Tony Campbell181 que siendo la imprenta uno de los mayores avances de la técnica, es irónico que su primer uso al servicio de la cartografía sea la impresión de un mapa de tradición medieval. Esto ocurrió dos años antes de la primera edición impresa de la Geographia de Ptolomeo con mapas (edición de Bolonia, 1477), que revolucionó la cartografía, por lo que la edición del Rudimentum, como ha observado Wesley Brown, aun siendo el primer mapa impreso, marcó el fin de una era más que el comienzo de otra, siendo además uno de los últimos mapas de la tradición medieval. En cuanto a la autoría de los mapas, está envuelta en la misma incertidumbre que la autoría del texto. Dado que la edición dispone de numerosas ilustraciones, seguramente sin origen en un supuesto manuscrito sino confeccionadas para la edición, es probable que los mapas sean también un encargo especial. En opinión de Brown, el autor del mapa no debe ser el autor del manuscrito, pues el 40% de los topónimos del mapa no están indicados en el diccionario geográfico del texto y hay numerosas contradicciones entre los del mapa y los del texto. Leo Bagrow sugirió que haya sido el propio editor, Lucas Brandis, opinión compartida por otros especialistas. Brown indica que Lucas Brandis era conocido, en efecto, como un habilidoso tallador de los grabados en madera que se utilizaban para las ilustraciones en los primeros libros impresos, y es probablemente el autor de muchas ilustraciones del Rudimentum, pero no puede afirmarse que haya sido también autor del mapamundi, que requiere otras habilidades y conocimientos, por lo que su autor sigue siendo incierto.
El mapamundi se encuentra al comienzo de la parte geográfica, que comprende un texto de casi sesenta páginas, y está basado en Isidoro de Sevilla y, sobre todo, en la descripción del mundo contenida en la obra De proprietatibus rerum de Bartholomeus Anglicus, escrita hacia 1240. La figura muestra el mapamundi del Rudimentum que se conserva en la Biblioteca del Congreso en Washington (Rosenwald Collection. Incun. 1475.R8), Las xilografías carecen de colorido, técnica que se adquirió posteriormente, por lo que las imágenes de los incunables se coloreaban después a mano, como así se ha hecho en la mayoría de los ejemplares sobrevivientes del Rudimentum, por ejemplo, los conservados en Glasgow y Göttingen (Figs. 142-A y 142-B).
Rudimentum Novitiorum. Rosenwald Collection. Incun. 1475.R8. Diámetro, 37,4 cm
Ejemplar de Glasgow
Ejemplar de Göttingen
Edición francesa de 1493
Asimismo, están coloreadas artísticamente las ediciones francesas que con el nombre de Mer des Hystoires se publicaron en Francia a partir de 1488. La figura muestra el mapamundi de una edición de Pierre Le Rouge, Paris, en 1493, que se conserva en la Boston Public Library, Rare Books Dept.
El mapamundi del Rudimentum está orientado al este, mostrando el mundo tripartito medieval en forma T-O, pero los continentes no están divididos por sus fronteras tradicionales (ríos Don y Nilo y mar Mediterráneo), sino por líneas.
La indicación de Asia está fuera del círculo, mientras que las de Europa y África se encuentran en el interior, en la cabecera de sus respectivos cuadrantes. El mapa está aproximadamente centrado en Jerusalén, representada por un castillo en Palestina pero sin denominación. En la parte superior (este) se sitúa el Paraíso, con sus cuatro ríos, y en la parte inferior, Hispania y las columnas de Hércules, que marcan el límite de la ecúmene (el mundo habitado y conocido).
Lo más interesante, y enigmático, en Asia, es la representación del Paraíso terrenal, con dos figuras que no son Adán y Eva, y cuya identificación ha originado diversas opiniones. El Paraíso es una isla amurallada, de forma octogonal, con arbolado y de la que fluyen los cuatro ríos que riegan el mundo. Hay dos figuras masculinas, con una rama de olivo, símbolo de la paz, en una de sus manos, y la otra levantada, mirándose mutuamente en una actitud que parece indicar que están manteniendo una conversación. Von den Brincken (nota 177) piensa que podrían ser un judío y un cristiano manteniendo una armoniosa conversación, simbolizando así la unidad del Viejo y el Nuevo Testamento o la concurrencia de las dos voluntades en un Paraíso armoniosamente unido.
Rudimentum Novitiorum
Paraiso
Jerusalén
En el extremo noroeste (alrededor de la posición de las 7 en punto) se encuentra el país de viland (o vinland en el bloque 1475. En lugar de un registro de asentamiento nórdico precolombino en América del Norte, sin embargo, este viland probablemente representa a “Finlandia”. Aunque existente referencias textuales a Vinland se remontan al siglo XI, su aparición en los mapas es por lo demás desconocido hasta finales del siglo XVI. Finlandia no aparece de otra manera en mapas impresos hasta el mapa Ziegler de Escandinavia (1532), pero se encuentra en manuscrito mapas anteriores al Rudimentun Novitiorum y Mer des Hystoires por más de tres siglos. El mapamundi del geógrafo árabe al-Idrisi (mediados del siglo XII, #219) muestra Finlandia cerca de Rusia y la describe como una región muy fría con nevadas de larga duración, claramente Finlandia en lugar de nuestra Vinland estadounidense. El mapamundi de Hereford de circa 1290 (#226), a cuya tradición geográfica no ptolemaica pertenece el presente mapa, muestra un grupo de tres países bálticos al norte de un oso que representa a Rusia, de los cuales el del medio es Finlandia, escrito igual que en el mapa actual (viland). Este Viland es casi con certeza el hijo de estas tradiciones bálticas medievales, no de precolombino recaladas americanas.
Paolo dal Pozzo Toscanelli
Paolo dal Pozzo Toscanelli
Nacimiento: 21 de abril de 1397jul.; Florencia (República de Florencia)
Fallecimiento: 10 de mayo de 1482jul. (85 años); Florencia (República de Florencia)
Nacionalidad: Florentinos
Educado en: Universidad de Padua
Ocupación: Astrónomo, matemático, bibliotecario, arquitecto, médico, cartógrafo y geógrafo
Área: Astronomía, medicina, geografía y matemáticas
Alumnos: Leonardo da Vinci
Seudónimo: Paolo fisico
Paolo dal Pozzo Toscanelli (Florencia, 1397 – 10 de mayo de 1482) fue un matemático, astrónomo y cosmógrafo italiano.1
Biografía
Fue el hijo del físico Dominic Toscanelli. Aprendió matemáticas en la Universidad de Padua y se graduó en 1424 con el título de doctor de medicina. Allí trabó amistad con el polifacético cardenal Nicolás de Cusa. De vuelta en su ciudad natal ayudó a Brunelleschi con los cálculos para la construcción de la cúpula de Santa María del Fiore. Hizo también anotaciones de sus observaciones de cometas y calculó sus órbitas. Entre estos estaba el cometa Halley en 1456. En realidad no dejó prácticamente ninguna obra escrita.
La carta de 1474
En junio de 1474 envió una carta, con un mapa adjunto, a su antiguo amigo el médico portugués Fernando Martíns de Roriz, al cual el rey Alfonso V de Portugal le había pedido un parecer geográfico sobre las rutas a las Indias.2 Toscanelli expuso una idea para llegar a las islas de las Especias navegando hacia el oeste.
Años más tarde, Cristóbal Colón tuvo acceso a esta carta por mediación del mercader Lorenzo Berardi.2 Colón transcribió el texto (en latín) de la carta de Toscanelli en un folio en blanco de un libro que hoy se conserva en la Biblioteca Colombina. Fue traducida al castellano por fray Bartolomé de las Casas y una traducción italiana incluida en la primera edición de la Historia del Almirante de Hernando Colón.3
Los cálculos de Toscanelli, que nunca había salido de Italia, darían a la tierra una circunferencia de unos 29.000 km, según cálculos de historiadores modernos, en lugar de los 40.000 km reales. Este error se habría producido al basarse en datos de la Geografía de Claudio Ptolomeo. Esta confusión habría tenido dos efectos de calado; en primer lugar, animó a Colón a emprender la ruta hacia occidente. En segundo lugar, propició la identificación por el Almirante de las tierras del Caribe con la isla mítica de Antillia y con el oriente del continente asiático.
El mapa de Toscanelli
Reconstrucción hipotética del mapa de Toscanelli realizada en 1898
El mapa de Toscanelli no se ha conservado. Varios historiadores modernos han propuesto reconstrucciones hipotéticas basadas en la descripción que da el propio Toscanelli en su carta. Era una “carta de navegar” en la cual estaban dibujadas líneas rectas longitudinales que indicaban la distancia este-oeste y líneas rectas transversales para las distancias norte-sur.
Al final de la transcripción de Colón, tras la fecha de la carta, hay algunos datos más concretos sobre el mapa: desde Lisboa hacia el oeste había 26 espacios de 250 millas cada uno hasta la gran ciudad china de Quinsay; entre las islas Antilla y Cipango mediaban 10 espacios.4
De: https://www.biografiasyvidas.com/biografia/t/toscanelli.htm
El florentino Paolo dal Pozzo Toscanelli cultivó la medicina, las matemáticas, la astronomía, la astrología y la geografía. Sus conocimientos matemáticos fueron de gran utilidad al célebre arquitecto Brunelleschi, y a él se debe la construcción del reloj de sol de la catedral de Florencia, mediante el cual determinó la oblicuidad elíptica.
Posiblemente la figura más representativa de su época junto con Leonardo da Vinci, el amor por la ciencia llevó a Toscanelli a interesarse por innumerables cuestiones y a entablar relaciones con los más grandes personajes de su tiempo (Nicolás de Cusa y Brunelleschi, entre otros), así como con viajeros que llegaban de países lejanos en los que estaba particularmente interesado, debido también a las actividades comerciales de su familia. Gozó de gran fama entre los hombres de su tiempo; sin embargo, casi todas sus obras se han perdido.
Como geógrafo, las principales fuentes de Toscanelli fueron Marco Polo, que entonces era un personaje sólo conocido por los estudiosos, y el también viajero veneciano Nicolás de Conti. Realizó un mapa del mundo conocido en su época, en el que no incluyó América, ya que murió diez años antes de que Colón la descubriera.
Toscanelli y Colón
Seguramente las concepciones geográficas de Toscanelli influyeron en la idea de Cristóbal Colón de buscar un paso por Occidente a las Indias Orientales; ambos coincidían en que se podía llegar a Oriente sin necesidad de costear África y conocían los estudios de los geógrafos antiguos Marino de Tiro y Tolomeo, según los cuales sólo había mar entre las costas españolas y las indias. A raíz de la muerte de Nicolás de Cusa, Toscanelli entabló relación con el canónigo y médico portugués Fernão Martins de Roriz y, tras diversos encuentros en Italia en los que hablaron de las Indias Orientales, prosiguieron su relación por carta. Fue a través de Martins como Toscanelli entró en contacto con Colón.
El Atlántico según Toscanelli
El futuro descubridor de América le consultó sobre la posibilidad de trazar una ruta hacia Oriente por Occidente. En su misiva, Colón hablaba de las riquezas de Catay (China) y de las grandes proporciones del puerto de Zaiton, en China, solicitando que le enviara un mapa para fijar la derrota. Toscanelli contestó a Colón refiriéndose también a las riquezas de Oriente y confirmándole el envío de un mapa. Se supone que esta correspondencia tuvo lugar entre 1479 y 1480, aunque no queda ningún vestigio de ella; únicamente el testimonio del hijo del descubridor, Hernando Colón, y el del padre Bartolomé de Las Casas avalan que Colón llevaba consigo la carta náutica del geógrafo florentino en su primer viaje.
Los cálculos geográficos y matemáticos de Colón y Toscanelli estaban muy alejados de la realidad. El error procedía, en primer lugar, del geógrafo Marino de Tiro, que pensaba que las tierras entonces conocidas ocupaban dos terceras partes de la superficie terrestre, y el mar la tercera parte restante. Hay que tener en cuenta, por otra parte, que en la época las unidades eran distintas en cada territorio; no era lo mismo una milla romana que una árabe (Colón las supuso iguales, siendo mayores las árabes), mientras que Toscanelli basaba sus cálculos en la milla florentina.
De estos errores resultaba que la circunferencia terrestre era de 26.600 kilómetros en lugar de los 32.040 reales, y que la distancia entre España y Catay era solamente de 9.633 kilómetros (en realidad, 20.300), lo cual era otro motivo para no sospechar que en medio pudiera existir un continente. A efectos de navegación, la distancia calculada no era un gran desafío; se contaba además con la posibilidad de hacer escala en las fantásticas tierras de Antilia y en Cipango (Japón), lo cual facilitaría la travesía. De estos errores nació el proyecto de Cristóbal Colón, que condujo al descubrimiento de América.
Este error de cálculo tuvo un efecto relevante en el descubrimiento de América ya que Colón pudo obtener el apoyo económico de los Reyes Católicos, que no hubiese recibido si se hubiera conocido la distancia real a Cipango. Eso sí, se mantuvo el error de que las nuevas tierras descubiertas eran de Asia Oriental.
(En este mapa en azul clarito está la silueta de América en lugar real que le corresponde).
Mapamundi de Zeitz
Mapamundi de Zeitz
De 1470. Representa la cosmovisión medieval de una manera única, probablemente 20 años antes del descubrimiento europeo de América. Tal mapa medieval es absolutamente único en Alemania. Especialmente el área mediterránea ya corresponde mucho a nuestro conocimiento cartográfico de hoy. Pero cuanto más nos alejamos del Mediterráneo, más indistinto se vuelve el estudio del mundo. El centro del mapa es Jerusalén. Pero el mapa no solo contiene conocimientos geográficos: también se han inmortalizado en el mapa leyendas y tradiciones (dudosas) de los países más lejanos. Por ejemplo, aprendemos dónde se encuentra la isla de las mujeres barbudas. Y que en la India hay hormigas gigantes custodiando montañas de oro. Por cierto, en esta imagen el mapa está al revés, para que se entienda mejor, porque en realidad en el mapa arriba está el sur y abajo el norte.
El mapamundi circular tiene un diámetro de 45,7 cm (44 cm de ancho y 57 cm de alto), hay pequeños cortes en los lados, pero originalmente debe han sido completos como lo indica el hecho de que en el lado izquierdo, donde la hoja ha sido ampliada pegándola en una tira estrecha de papel, se han perdido partes de la leyenda. El mapa antiguamente también estaba doblado, como se puede ver en una marca que pasa por Jerusalén, el centro del mapa El mar, como en todos los demás mapas de este atlas, es verde, las cadenas montañosas grisáceas, marrón o amarillo, mientras que las ciudades están representadas por pequeños círculos rojos rellenos, las leyendas de el manuscrito está escrito en un gótico muy limpio
Una comparación del mapa de Walsperger (izquierda) y el mapa de Zeitz (derecha), ambos orientados con el sur en la parte superior
A primera vista, el mapa nos recuerda el mapa circular de Andreas Walsperger de 1448 (#245), que también tiene el mar en verde y carece de las líneas cardinales. Cerrar comparación incluso revela completa concordancia en los contornos costeros. Asimismo, los límites del disco terrestre determinado por el círculo son los mismos, la única diferencia es que en Walsperger este círculo está dibujado de forma excéntrica y no define los límites del mapa, y, además, no está completo, siendo interrumpido por los mares. En Walsperger, la circunferencia formando el límite norte, con una extensa extensión de mar más allá, hace que Noruega parezca como península, aunque, como muestra el mapa de Zeitz, no era esa la intención (en la Tabla, la parte sur de Noruega parece estar cortada por una entrada de mar, mientras que en realidad la separación característica es una cadena montañosa). En consecuencia, el autor del último mapa ha utilizado la de Walsperger o una fuente común a ambas. Como había renunciado a la posición científica de Walsperger añadidos (esferas celestes, climas, leyendas polares, etc.), que en parte llenan los mares, pudo prescindir también del espacio oceánico ahora vacío y cerrar los dos círculos. Al igual que Walsperger, él representa a Europa con una “espalda de gato” en el norte, Jutlandia con el mismo pronunciado contracción, Suecia como una isla, y finalmente, el Mar Báltico en la misma forma, diferente de que en las cartas portolanas.
Una curiosidad.
Hay que recordar que en la gran mayoría de los mapas, del orbe cristiano, se disponía a Jerusalén en el centro de los mismos, al considerarlo como el centro del mundo.
Un estudio, un tanto esotérico, sitúa varios países y/o hechos Bíblicos en las zonas del continente de América, casi desconocido en la Edad Media. Aunque había disposiciones para todos los gustos. Así se observan ciertos dibujos y comentarios en los mapas anteriores al descubrimiento oficial del continente americano.
Por ejemplo:
De: Gog y Magog Ezequiel y los reyes magos – Monografias.com
Mapa Precolombino de Zeitz de1470 – Magos o Magog entrando a América por el Labrador con sus altos sombreros en punta
Para conseguir alguna respuesta al tema, veremos de interpretar al mismo Ezequiel, y vemos que el capítulo 38 y 39 son dos versiones o dos relatos similares de una misma historia, en los dos nos dice en términos generales que el Señor le ordena ir al país de Magog en el extremo norte y traer a Gog a Israel con sus ejércitos y aliados para que ataquen Israel como castigo, pero que él destruirá a Gog para demostrarle al pueblo que a través de él, el Señor mostrará su santidad en Israel.
Profundizando vemos que en 38-2 el Señor le dice que vuelva al país de Magog a buscar a Gog, esto nos indica que Ezequiel ya estuvo allí, Nos dice que hará volver a Gog a Israel o sea que significa que Gog partió de Israel.
Es en el capítulo 38 que llama la atención los Vrs. – 10 – 11 – 12 – 13, ya que estos narran una historia en forma incompleta, y es interesante que veamos lo que nos dice en estos versículos:
10) Yo, el Señor, digo: En ese tiempo se te ocurrirán planes malvados.
11) Vas a decir: Voy a invadir un país indefenso, de gente que vive tranquila y confiada, toda en ciudades sin murallas, sin puertas ni trancas.
12) Lo voy a saquear y robar, voy a atacar ciudades ya reconstruidas de un pueblo que se ha reunido de varias naciones, que tiene ganado y otras propiedades y que vive en el centro del mundo.
13) La gente de Sabá y Dedám, y los comerciantes de Tarsis y demás ciudades, te preguntarán: ¿Viniste a robar? ¿Reuniste tus ejércitos para saquear y apoderarte de la plata y el oro, del ganado y otras propiedades, y llevarte una enorme riqueza?
En estos versículos narra la invasión a Saba, Dedam, Tarsis y otras ciudades de esa región. En su geografía Tolomeo dice que las ciudades de las Indias (América), como Saba, Catigara, Ambato, Brama, Rhabana, Acathara, Coccoranagara, Sarata, Aspithara, Thinae y otras carecen de murallas.
Tarsis es el lugar donde la flota del Rey Hiram iba a buscar el palo brasil y el oro para el Rey Salomón y es de donde llevaron a la Reina de Saba.
Ezequiel ubica la invasión a esta región como el centro del mundo, y es en Perú donde se funda Cuzco que significa centro u ombligo del mundo.
En el capítulo 39 versículo 6 dice:
“Enviaré fuego sobre Magog y sobre los que viven tranquilos en los países del mar. Entonces reconocerán que yo soy el Señor”.
Nos dice aquí que Magog es un lugar marítimo del extremo norte, lo que no se ajusta a las ubicaciones que le dan en los mapas en la zona central de Siberia.
Recorriendo la Biblia podemos ver que Ezequiel no es el único Profeta que se refiere tanto a los misteriosos Países o Pueblos del Mar, como a Saba, Ophir que quedan en Tarsis, y no los Minoicos o Micénicos, que bien pudieron llegar a las costas de Canaan o Anatolia – Troya,
También se refieren a estos pueblos del mar, los Profetas Isaías y Jeremías y veremos luego que estos conocimientos se conservan hasta el siglo I en poder de alguno de los miembros del Sanedrín como José de Arimatea.
Gog y Magog
Canadá – Ciudad de Magog, Lago Memphremagog
Magog lo encontramos en Canadá en la Provincia de Quebec, el Río Magog que nace en el Lago Memphremagog y pasa por la Ciudad de Magog y desemboca en el Río San Francisco que es afluente del Río San Lorenzo.
En el siglo Xll el geógrafo Árabe nacido en Ceuta El Edrisi, decía que el mar Indio se comunicaba con el Atlántico y que se podía navegar desde él hasta las costas occidentales de África, hasta Guinea y que al norte y al occidente del Atlántico se encontraban las costas de Gog y Magog en las Indias Orientales (América), Este geógrafo coloca en su mapa las tierras de Jad Judi y Mad Judi.
Al Wardi otro geógrafo árabe coloca en su mapa de 1349, Iad Judi y Mad Judi
En las leyendas Irlandesas encontramos referencia a unas lejanas tierras e islas que se extienden en el Atlántico hasta el crepúsculo, las tierras de Mag Mon.
Todo esto concuerda con los tres mapas que descubro con toda América antes de Colón 1440, 1448 y 1470. Confirmando que Gog y Magog es en la Tierra de los Judíos Rojos en América del Norte. Donde se los encontró con sus costumbres y creencias de los magos del, mitraismo persa
Este término Magog queda asociado con el concepto Persa de la palabra Mago, magi, magia, mágico etc. Aunque debe tenerse en cuenta que los Magos o Magog llegan a la región de China por lo menos quince siglos antes de que se formara el Imperio Persa, según las dataciones de radiocarbono obtenidas de las momias del Museo de Orunchi en China, se puede notar en la foto que la momia fue enterrada con el alto sombrero puntiagudo típico de los Magos, las Brujas o las Hadas. A estos sombreros se los encuentra asociados con la magia y el poder en todo el Mundo
Dominus Nicolaus Germanus
Dominus Nicolaus Germanus
Copia manuscrita de Nicolaus Germanus de 1467 del mapa mundial de Ptolomeo, que muestra la forma de Nicolaus Germanus de la segunda proyección de Ptolomeo y el conocimiento ampliado de Escandinavia en el noroeste.1
Nicolaus Germanus (c. 1420 – c. 1490)2 fue un cartógrafo alemán que modernizó la Geografía de Ptolomeo aplicando nuevas proyecciones, añadiendo mapas adicionales y aportando otras innovaciones que influyeron en el desarrollo de la cartografía renacentista.
Nombre
En el siglo XV era habitual que los eruditos y artesanos adoptaran una versión latinizada de su nombre de nacimiento. Nicolaus Germanus es la forma latina del nombre “Nicolás el Alemán”. Se desconoce su nombre de nacimiento completo. Su nombre va a veces precedido de “Donnus” o “Donus“, una forma abreviada del título latino Dominus (“Señor” o “Maestro”). 3
Una ilustración moderna del mapa del mundo en el Ptolomeo de Ulm
Vida
No se sabe nada de los primeros años de vida de Nicolaus Germanus. Aparece por primera vez en los registros del priorato de Reichenbach (actualmente en Baden-Württemberg), donde fue prior del monasterio benedictino en 1442. Parece que se formó en cosmografía hacia 1460 y llegó a Italia en 1464.4 Vivió primero en Florencia, donde compiló tablas astrológicas y realizó su primera revisión de la Geografía de Ptolomeo en 1466. Posteriormente se trasladó a Roma, donde creó un par de globos terráqueos y un mapamundi para la Biblioteca Vaticana en 1477. Siguió preparando actualizaciones y revisiones del atlas de Ptolomeo durante varios años. El último registro contemporáneo de su actividad procede de un erudito alemán, Conrad Celtes, que le conoció en Florencia y escribió que Nicolaus se quejaba amargamente de que otros se llevaran la gloria y el beneficio de su trabajo.4
Mapa del mundo de Johannes Schnitzer de la edición de 1482 de Holle de la Geografía de Ptolomeo.
Obras
Geografía de Ptolomeo
Nicolaus Germanus fue una figura influyente en la modernización y popularización de la Geographia de Ptolomeo. Al menos quince copias manuscritas de la Geographia fueron escritas por Germanus o copiadas inmediatamente de su obra. Salvo la edición de Florencia de 1482, todas las versiones impresas en el siglo XV se basaron en sus manuscritos.4
Los estudiosos agrupan sus manuscritos en tres recensiones (versiones), basadas aproximadamente en el número de mapas incluidos y el tipo de proyección cartográfica utilizada. La primera recensión (entre 1460 y 1466) contiene sólo los veintisiete mapas originales de Ptolomeo (tabulae antiquae) dibujados con una proyección trapezoidal de la que Germanus se proclamó autor. En la llamada “proyección Donis”, la latitud se refleja mediante líneas paralelas, mientras que las líneas de longitud convergen hacia el polo.1 5 Esta recensión sirvió de base para la edición de Roma de la Geographia impresa en 1478 y reimpresa en 1490.6 Henricus Martellus Germanus también adoptó la proyección trapezoidal en 1480 para su versión manuscrita de la Geographia.
La segunda recensión (1466 a 1468) incluye las veintisiete tabulae antiquae y tres nuevos mapas (tabulae modernae) que cubren el norte de Europa, España y Francia. Su representación de la región escandinava, incluyendo Islandia y Groenlandia, reflejaba una representación más precisa proporcionada por el cartógrafo danés Claudius Clavus. El mapamundi de esta recensión se dibujó utilizando la proyección homeotérica, que Ptolomeo calificó de superior pero más difícil de construir.5 Esta recensión fue la base de la edición de Ulm impresa en 1482 y 1486 en Ulm. Fue la primera edición de Geographia que se imprimió al norte de los Alpes y el primer atlas que se coloreó internamente antes de su venta. Se imprimió utilizando xilografías preparadas por Johannes de Armsheim, quien introdujo por primera vez la práctica de que los grabadores firmaran sus mapas.16
Su última recensión (1468 a 1482) agregó dos mapas más que representan a Italia y Palestina y amplió el mapa mundial para incluir el norte de Europa, aunque su ubicación de Islandia y Groenlandia fue notablemente menos precisa que su representación anterior.4 La Geographia de Berlinghieri, impresa en 1482, utiliza una mezcla de mapas de esta recensión y de otras anteriores.7
Las ediciones de 1482 de Ulm y Berlinghieri contienen los primeros mapas modernos (derivados de Germanus) que aparecen impresos. 8 Germanus introdujo otras innovaciones cartográficas, incluido el uso de puntos o círculos para marcar la posición exacta de las localidades y líneas de puntos para indicar las fronteras.4
Globos
En 1477, Nicolaus Germanus creó un globo terrestre y otro celeste para incluirlos en la nueva Biblioteca del Vaticano. Germanus recibió 200 ducados por los globos y siete ducados adicionales para agregar el escudo de armas papal y proporcionar dos cubiertas. Los globos se incluyeron en un inventario de 1481 y se guardaron en la Salle Pontifica hasta que se perdieron durante el saqueo de Roma en 1527. El globo terráqueo es el primer globo moderno documentado y precedió al globo de Behaim existente en quince años. 2
Astrología
Nicolaus Germanus también era un competente astrólogo. En 1466, mientras estaba en Florencia, preparó una tabla astrológica para el duque Borso d’Este que demostraba su capacidad para calcular las posiciones de los planetas para varios años en el futuro. En Roma preparó una tabla astrológica similar para el Papa Pablo II. 2
Mapamundi de Nicolaus Germanus. Primera versión. Códice de Alfonso V.
Tierra Santa. Folios 47v-48r
Modifica el mapa de Hispania (Fig. 202). Es una nueva versión, que no está en proyección trapezoidal, y alcanza una estimable aproximación a la realidad. Dice Almagià (nota 237) que en el trazado de las costas se atenúan las incisiones características de las cartas náuticas, el diseño orográfico muestra intrincados cordones que intentan dar relieve a las zonas elevadas comparadas con los valles, las localidades están indicadas con pequeños círculos y las regiones están delimitadas por líneas de puntos rojos. Las islas Baleares están dibujadas con bastante precisión, a diferencia de las Azores, totalmente desplazadas. Este mapa, aunque no está muy alejado de los que le preceden, inicia una tradición cartográfica en las ediciones impresas de la Geographia a partir de la edición de Ulm (1482). Almagià ha rastreado su trayectoria, habiendo sobrevivido hasta el mapa de Hispania de Giacomo Gastaldi en 1544.
Nicolaus Germanus fue no solo un competente cartógrafo y dibujante de mapas. Raleigh Skelton ya había sugerido en 1963 (nota 241) que, dadas sus innovaciones cartográficas, deberían serle reconocidos conocimientos geográficos y matemáticos. Con posterioridad se comprobó su actividad como cosmógrafo y astrólogo, como él mismo se había definido. Se tiene constancia de dos libros de contenido astrológico: uno, perdido, sobre cálculo de las posiciones de los planetas, y otro que se conserva en la Biblioteca Vaticana (Ms Vat. Lat. 3107) titulado Nicolai Germani Tabulae Astronomicae. Pero lo importante es que Jose Ruyschaert demostró en 1985,239 con documentación de los archivos vaticanos, que Nicolaus Germanus contruyó en 1477 dos globos, un globo terrestre y otro celeste, para la Biblioteca Vaticana, fundada dos años antes, que fueron guardados en la Sala Pontificia (Magna Secreta). Desaparecieron, presumiblemente, en el saqueo de Roma por las tropas imperiales en 1527, pero queda constancia de que construyó un globo terrestre catorce años antes que el de Behaim. Y Lorenz Bönninger ha revelado en 2006 otros documentos que prueban su actividad como constructor de globos.240
El mapamundi perdido de Benedetto Cotrugli
El mapamundi perdido de Benedetto Cotrugli
Reencontrado en tres ocasiones
Benedikt Kotruljević
Estatua de Benedikt Kotruljević en Zagreb.
Benedikt Kotruljević (Dubrovnik, República de Ragusa (actual Croacia), 1416-L’Aquila, Reino de Nápoles, 1469), también conocido como Beno Kotruljević o Benedetto Cotrugli, fue un comerciante, economista, científico, diplomático y humanista italiano.
De (1447-1517) fue parte de la corte del Reino de Nápoles durante 15 años, donde mantuvo discusiones y pulió sus pensamientos sobre asuntos humanistas.
Un manuscrito del trabajo de Kotruljević, Libro de l’Arte de la Mercatura (Libro del arte del comercio), se encuentra en la Biblioteca Nacional de Malta y está fechado en 1475, aunque el original es de 1458.1 El texto de este manuscrito contiene un apéndice con un inventario y varias anotaciones de un libro diario. Es el antecedente de la descripción realizada por Luca Pacioli del sistema de contabilidad por partida doble en su Summa de Arithmetica de 1494.
“Della Mercatura”, edición de 1573.
De Navigatione de Benedetto Cotrugli, compuesto en 1464-1465, es el manual europeo de navegación más antiguo que se conoce. Sobreviven dos manuscritos de la obra; en ambos se deja un espacio en blanco para un mapamundi aludido en el texto. Se identifican tres mapamundis, en diferentes obras, como provenientes o derivados del de Cotrugli. El primero es el mapamundi no estudiado que se añadió al principio (fol. 2v) de Biblioteca Apostólica Vaticana, MS Ottob. lat. 1417. El segundo es el único mapamundi en cualquiera de los manuscritos del Liber insularum archipelag de Cristoforo Buondelmonti (Staatsbibliothek zu Berlin–Preussischer Kulturbesitz, MS Hamilton 108, fol. 81r). El tercero es el mapamundi no estudiado en la Biblioteca Medicea Laurenziana, MS Ashburnham 1077, fol. 4v. Los dos últimos mapamundis son similares a los de MS. Ottob. lat. 1417, y se aducen razones para confirmar que fueron copiadas de mapamundi en manuscritos de la obra de Cotrugli. Se comparan los topónimos de los mapas del Vaticano y Berlín, y se exploran las implicaciones de estos mapamundis para el formato del manuscrito autógrafo de Cotrugli y la difusión de su obra.
Carta de al Mursi
Carta de al Mursi
La carta de al-Mursi de 1461, conservada en el Museo Naval de Estambul (Núm. 882), es la última de las cartas mediterráneas islámicas del siglo XV que se conocen.
Carta de al-Mursi. Museo Naval de Estambul (Núm. 882). 90 x 53 cm
Ibn Sabin al-Mursí
Abdalḥaqq b Ibrāhim Ibn Sab’īn (Murcia, 1217– La Meca, 1270) fue un maestro sufí natural de al-Ándalus y filósofo neoplatónico.1 Él mismo se autodenominaba Ibn Dāra. Cuando tenía unos 30 años, fue forzado a abandonar su tierra y se asentó en Ceuta. De este tiempo es su obra más conocida, las Cuestiones Sicilianas.2 Debido a la suficiente fama que tenía en ese momento, el gobernador de Ceuta le encargó la respuesta de una serie de preguntas filosóficas que el emperador Federico II le había hecho al sultán almohade Abu Ala Al-Mamun “Abdul-Wahid II. Aunque este es el planteamiento que aparece en la introducción de las Cuestiones Sicilianas, parece ser realmente se trate de un manual de filosofía para estudiantes.3
Posteriormente, se vio de nuevo forzado a exiliarse, pasando por Bades (Peñón de Vélez de la Gomera), Bugía, Túnez, Gabès, El Cairo, hasta llegar a La Meca. Durantes este periplo, fue en Bugía donde conoció a su discípulo más fiel, el poeta y sufí de Guadix al-Shushtari.
Contribuyó a la creación, en el mundo islámico, de la leyenda negra de Averroes, andalusí como él y de una generación anterior a la suya.4 Sobre el autor cordobés llegó a decir: “Está fascinado por Aristóteles y lo engrandece hasta casi imitarlo en los sentidos y en los primeros inteligibles. Si oyese al Sabio decir que uno está de pie a la vez que sentado, lo diría él también y lo creería”.
La inscripción de autoría dice que “este trabajo del médico (tahib) Ibrāhīm al-Mursī (Ibrahim de Murcia), se terminó en la ciudad de Trípoli el 5 del mes de Ramadán de 865”, es decir, el 23 de junio de 1461, y esto es lo único que se sabe del autor. La calificación de murciano se mantiene dos siglos después de que la taifa de Murcia cayera en manos cristianas, por lo que probablemente se refiere al origen de su ascendencia más que al lugar de su nacimiento. La ciudad de Trípoli (Tarabulus) puede ser la Tripoli de Libia o la de Siria medieval (actual Líbano). Algunos entienden que debe ser la primera por la clara influencia mallorquina, por la letra magrebí, por la supuesta precisión de los topónimos de la costa africana según Ettore Rossi, porque coincide con el meridiano central y porque, como dice Herrera, en los geógrafos magrebíes la segunda suele llamarse Tarabulus al-Sham (Trípoli de Siria). Otros, como Mercé Comes, creen que debe ser la de Siria, porque se sabe que había una colonia con personas procedentes de la región levantina de al-Andalus y porque en la carta está significada con un castillo con bandera. También lo cree así Kahlaoui, indicando que Trípoli de Siria, como el Cairo, donde gobernaba el soberano mameluco, está dignificada con la formula “Alá la proteja”.
Lo más intrigante es el calificativo de médico. Parece que debió ser más conocido por practicar algún tipo de medicina y que su actividad de cartógrafo era secundaria. Campbell (nota 347) lo califica de amateur, como el monje Bartolomeo de Pareto, aunque nada dice sobre su calidad. Kahlaoui estima que su amateurismo queda patente tanto en el trazado de las costas como en las ilustraciones. En fuentes turcas, sin embargo, se encuentran elogiosos comentarios, describiéndolo como científico y cartógrafo, autor de una carta náutica propia, no derivada de la cartografía europea, cuya precisión, muy cercana a la realidad, es superior a la producción europea, salvo imperfecciones en remotos lugares, como las islas Británicas y en las costas del mar de Azov. La carta fue dada a conocer por Doğan Uçar en 1981, en un breve estudio publicado en turco e inglés, donde analiza su perfección geográfica y cartográfica, comparándola con Dulceti, al-Tanji, Yehuda Ben Zara y Andrea Benincasa.
La carta se conserva en bastante buen estado, aunque hay algunas zonas borrosas por haberse guardado en condiciones de humedad. En el cuello del pergamino hay una rueda de calendario similar a la de al- Tanji con las fechas del año juliano en que se produce el periodo de influencia de cada una de las mansiones lunares. La estructura de la red de rumbos es diferente a la carta de al-Tanji, pues solo hay un centro, situado al sur de Salerno, del que parten 16 líneas hasta otros tantos puntos de una circunferencia, los cuales, a su vez, están unidos entre sí e irradian líneas hasta los extremos del mapa. Hay decoración en los bordes, con un trenzado de nudos infinitos que en los bordes norte y sur lleva insertas la inscripción de firma y la escala de millas.
Si en las otras cartas magrebíes se podía detectar una influencia mallorquina, aquí es predominante. Se muestra principalmente como una carta de tipo mallorquín, de lujo o semi-lujo, aunque también tiene elementos de influencia italiana e islámica.
Los autores han visto conexiones de esta carta con otros modelos que al-Mursi puede haber manejado. Dice Kahlaoui que las ciudades de Génova y Venecia son comparables a las cartas de Pere Rosell y ambas apuntan a Batista Beccari. El corte del cuello del pergamino en forma de alero también apunta a la carta de Beccari de 1426, seguida después por la de Valseca de 1439. Comes indica que la carta sigue el modelo mallorquín de Dulceti, pero con algunos rasgos de estilística italiana, de forma semejante a la que puede verse en las cartas posteriores de Canepa de 1480 y 1489. Herrera, en un trabajo de 2009,467 indicó que las ilustraciones del castillo de Segura (donde nacen los ríos Segura y Guadalquivir), de Barcelona y de las islas Lanzarote y Fuerteventura son casi idénticas a las de la carta que Bertran y Ripoll firmaron en Barcelona en 1456, lo que demuestra que al-Mursi copiaba, entre otros, de un modelo casi contemporáneo, hoy perdido, desconociéndose cómo pudo haber llegado a su poder. En su trabajo de 2010 (nota 463) añadió que también procede de este modelo la decoración de la mayoría de banderas de señalización urbana. En la figura 410 vemos el castillo de Segura en ambas cartas. Un detalle interesante es que en la carta de al-Mursi el cuartelado heráldico de la bandera de Castilla y León está reproducido a la inversa, como si estuviera reflejado en un espejo, aunque esto no quiere decir, en opinión de Herrera, que necesariamente se quisiera neutralizar su significado político.
Cartas de Bertran/Ripoll y de al-Mursi
Carta de al-Mursi. La Meca
Escena de fauna salvaje norteafricana: al-Mursī, carta náutica (Trípoli, 1461) [Estambul, Deniz Müzesi: n. º 882].
Jean Mansel
Jean Mansel
Jean Mansel, nacido alrededor de 1400 probablemente en Hesdin en Artois, muerto alrededor de 1473 en la misma ciudad, fue un historiógrafo del siglo XV, que escribía en francés medio.
Vida y obra
Fue, siguiendo a su padre, administrador al servicio de los duques de Borgoña: receptor privado de ayudas de Artois a Hesdin; síndico general de la ciudad y castellanía de Hesdin en 1448. Fue relevado de sus funciones por Carlos el Temerario el 10 de agosto de 1470 por ” su vejez y la debilidad y debilitamiento de su persona“.
Sus deberes lo colocaron en el séquito del duque Felipe el Bueno. Para él compuso una recopilación titulada Histoires romaines1 , finalizada el 19 de noviembre de 1454. Es la historia de Roma desde sus orígenes hasta el reinado de Domiciano. Mansel partió de la traducción de Livy por Pierre Bersuire, que apenas reelaboró y compendió (y de la que eliminó las innovaciones léxicas). Completó, según sus propias palabras en el prólogo, con material prestado de Pablo Orosio, Lucano , Salustio y Suetonio. Hizo un uso extensivo de la XIII Lucan titulada Li Fet des Rommains recopilada por Saluste, Suetoine.
Jean Mansel también compuso una recopilación de historia universal titulada La Fleur des Histoires, cuyo relato se extiende desde la Creación del mundo hasta el reinado del rey de Francia Carlos VI. De hecho, este texto existe en dos versiones sucesivas: una primera edición organizada en tres libros que precedieron a las Histoires rommaines (datadas entre 1446 y 1451); una segunda redacción más larga en cuatro libros, cuya principal innovación consiste en reemplazar el segmento de historia romana del primero con el texto de las Historias romanas, como Libro II (con algunas reelaboraciones y la adición de un capítulo). El resto es una mezcla de relatos bíblicos y seculares, vidas de santos y crónicas de la historia de Francia. Explotó, entre otros, el trabajo de Jean Wauquelin (y da un compendio de Girart de Roussillon en prosa).
Las Histoires rommaines como texto independiente se conservan en dos manuscritos (París, Bibliothèque de l’Arsenal, Ms 5087-5088, la copia entregada a Philippe le Bon en 1454; Biblioteca Municipal de Besançon, Ms. 851-8522 ). De la Fleur des Histoires (ambas versiones) quedan cuarenta y nueve manuscritos, a veces lujosos, que atestiguan el gusto mostrado por la nobleza de finales del siglo XV por esta obra. Pero no se conoce ninguna edición impresa.
Jean Mansel es también el autor de una francés medio de la Vita Christi de Ludolphe le Chartreux .
Las 65 miniaturas fueron ejecutadas por Simon Marmion y otros iluminadores. Las ilustraciones, cada una de aproximadamente dos tercios de una página de tamaño y las dos columnas de texto debajo de ellas, están rodeadas por bordes anchos. Estos están llenos de follaje ornamental delicado y con celosía de filigrana.
Esta miniatura del folio 388r muestra escenas individuales de la vida del rey Luis IX, San Luis de Francia. Demuestra el elevado sentido del artista de la composición equilibrada y la coloración armónica, y su predilección por la riqueza de los detalles contemporáneos.
La Fleur des Histoires de Jean Mansel Valenciennes, 1459-63, MS. 9231, fol. 281v. Bruxelles, Bibliothèque Royale de Belgique. 5
Jean Mansel describió Europa, Asia y África
Dibujado por Jean Mansel entre 1459-1463, este mapa de T-O es una hermosa interpretación de Isidoro del pensamiento original de Sevilla en el siglo VII. El diseño es un modelo temprano de cómo los eruditos veían el mundo físico, dividido en tres partes, Europa, Asia y África, con cada una rodeada por agua y Jeruselum en el centro. Este mapa T-O en particular se derivó por primera vez en el libro de Jean Mansel, La Fleur des Histoires, una colección de trabajos que muestra los eventos históricos desde el tiempo de la Creación hasta la muerte del Rey Carlos VI en 1422.
Ms 9260, fol. I 1r. 38×28 cm.
Los mapas más elaborados suelen encontrarse en obras literarias que los incorporan como ilustraciones, pero se alejan de la representación cartográfica. El mapa de la figura se encuentra en un manuscrito de hacia 1460 con una versión corta de la obra de Jean Mansel La fleur de las histoires. Se conserva en la Bibliotheque Royale de Belgique (Ms. 9260). El libro es una especie de historia universal y el mapa ilustra el capítulo dedicado a las provincias del mundo. Adán, Eva y la serpiente están en el Paraíso, del que manan sus cuatro ríos que dan vida a la Tierra. Jean Mansel describe el Paraíso como un lugar maravilloso, rodeado de fuego y en una montaña que alcanza la Luna. Jerusalen se sitúa en el centro, junto a un dibujo del Calvario. Otras imágenes son la Torre de Babel y el mítico árbol oráculo del Sol y de la Luna (v. nota 272). El mundo se divide en varias provincias o regiones con una forma más artística que geográfica, representadas por edificios con numerosas torres. Algunas tienen nombre, como Babilonia y Roma. Destaca la representación del mar Rojo, con Alejandría y su faro. En el océano circundante se dibujan seis monstruos, con sus nombres: serpentes, pagassus, luphanes, gorgato, pisses y un dragón alado con la leyenda Hic sunt dragones (aquí hay dragones). También se dibujan en el océano una serie de islas con nombres exóticos (lapides presiosa, habundans terra, illa deserta, illa arcana…), claramente inventadas por el cartógrafo, que parece haber dado rienda suelta a su imaginación sin tener en cuenta el contenido del libro, que sí menciona las islas Británicas, las islas Afortunadas, Taprobane, Thule e Islandia.
Mapamundi de Fra Mauro
Mapamundi de Fra Mauro
El mapa de Fra Mauro (1459) en Venecia (invertido, el Sur está arriba). El mapa muestra Asia, África y Europa.
El mapa de Fra Mauro, «considerado el mejor memorial de la cartografía medieval» según Roberto Almagià,1 fue dibujado entre 1457 y 1459 por el monje italiano Fra Mauro. Es un planisferio circular dibujado sobre pergamino, montado sobre un bastidor de madera y tiene unos dos metros de diámetro. El mapa original fue comisionado por el rey Alfonso V de Portugal y fue obra de Fra Mauro y de su asistente Andrea Bianco, marino y cartógrafo. El mapa fue completado el 24 de abril de 1459, y enviado a Portugal, pero hoy en día se encuentra perdido. Fray Mauro murió a los dos años después, mientras hacía una copia del mapa para la Signoría de Venecia, copia que fue acabada por Andrea Bianco.
Esta copia fue descubierta en el monasterio de Murano, y se encuentra hoy en día expuesta en la escalinata de la Biblioteca Nazionale Marciana de Venecia, pero es visible al entrar al Museo Correr, desde donde se puede acceder por la sala que se encuentra más al este si se solicita a los guardas del museo. Una edición crítica del mapa fue publicada en 2006 por Piero Falchetta.
Mapamundi
El mapamundi de Fra Mauro es poco frecuente debido a que su orientación está invertida, con el sur en la parte superior del mapa, lo que era frecuente en los mapas musulmanes, en oposición al ptolomeico, en el que el norte está en la parte superior. Fra Mauro sabía de la existencia del mapa de Ptolomeo, y comentaría que resultaba insuficiente para muchas regiones del mundo:
No considero que derogue la validez de Ptolomeo por no seguir los dictados de su Cosmografía, ya que de haber observado sus meridianos, paralelos y grados, resultaría necesario para establecer las partes conocidas de la circunferencia, dejar fuera del mapa muchas provincias no mencionadas por Ptolomeo. Pero principalmente en la latitud, es decir de sur a norte, tiene mucha “terra incognita”, ya que en sus tiempos eran desconocidas estas tierras.
Texto del Mapa de Fray Mauro
Reconoció la extensión hacia el Este que había dado Ptolomeo, suprimiendo al hacerlo la posición central que había ocupado la ciudad de Jerusalén en mapas anteriores:
Jerusalén es ciertamente el centro del mundo habitado por su latitud, pero longitudinalmente se encuentra algo al oeste, ya que al ser la porción del este más altamente poblada al ser parte de Europa, es por esta razón que Jerusalén se encuentra en el centro longitudinalmente si miramos no el espacio vacío sino la densidad de la población.
Texto del Mapa de Fray Mauro
Fray Mauro vio el mundo como una esfera, y aunque empleara la convención de describir los continentes rodeados por agua con la forma de un disco, no sabía con certitud las dimensiones de la Tierra:
De la misma forma he encontrado variadas opiniones sobre su circunferencia, pero no resulta posible verificarlas. Se dice que es de 22.500 a 24.000 millas más o menos, dependiendo de las consideraciones y opiniones, pero no tienen mucha autenticidad ya que no han sido probadas.
África
África en el Mapamundi de Fra Mauro. El sur está arriba, con el “Cabo de Diab” marcando el punto más meridional.
La descripción de África es sorprendentemente precisa, en especial si se toma en consideración que los exploradores portugueses no habían pasado de los 12 grados Norte en esas fechas. Fra Mauro puso la siguiente inscripción en el extremo sur del continente Africano, con el nombre de “Cabo de Diab”, describiendo la exploración hecha por un barco desde el Este cerca del año 1420:
Cerca del año de Nuestro Señor 1420 un barco de los que llaman en Asia junco (lit. “Zoncho de India”), al atravesar el mar de la India hacia la “Isla de Hombres y Mujeres”, fue arrastrado más allá del “Cabo de Diab” (mostrado como el Cabo de Buena Esperanza en el mapa), atravesó las “Islas Verdes” (lit. “isole uerde”, Islas de Cabo Verde), se adentró en el “Mar de Oscuridad” (Océano Atlántico) en una ruta oeste suroeste. Solo vieron durante cuarenta días aire y agua y según sus cálculos navegaron 2.000 millas abandonados por la fortuna. Cuando la violencia de la tormenta amainó tardaron en regresar al llamado “Cabo de Diab” 70 días y al acercarse la nave a la orilla para abastecerse según sus necesidades, los marineros vieron el huevo del llamado Pájaro Roc, que pone huevos tan grandes como una ánfora.
El “Junco Asiático” descrito fue probablemente el de una expedición árabe, que fue la fuente en la que Fra Mauro se inspiró para describir el extremo sur de África, o también pudo ser parte de la expedición china de 1421 del almirante Zheng He, como se sugiere en la Hipótesis de 1421. La descripción de los juncos realmente sugiere que se trataba de un barco de construcción china:
Imagen de un junco chino, una nave atlántica y un barco del Mediterráneo en el mapamundi de Fra Mauro.
Los barcos llamados juncos (lit. “Zonchi”) que navegan estos mares tienen cuatro y más mástiles, ciertos de los cuales pueden ser izados o bajados, y tienen de 40 a 60 cabinas para los mercaderes y solo un timón. Pueden navegar sin brújula, ya que llevan un astrólogo, que de pie en cubierta con un astrolabio en las manos da las órdenes al navegante.
Fra Mauro explicó que obtuvo la información de una “fuente fidedigna” que viajó en la expedición, posiblemente el explorador Veneciano Niccolo Da Conti que se encontraba en Calicut (hoy Calcuta), India, en el momento que zarpó la expedición.
Algunas de las islas de la región sur de África llevan nombres árabes e indios: Negila (“celebración” en árabe), o Mangula (“afortunado” en sánscrito).
Si la historia del huevo del ave Roc no es una fábula de viajeros, podría haberse tratado de un huevo de Aepyornis, un ave enorme que no podía volar y que aún podía existir en Madagascar o que acababa de extinguirse.
Fra Mauro también comenta que el relato de esta expedición, junto con la relación de Estrabón de los viajes de Eudoxus de Cyzicus desde Arabia hasta Gibraltar atravesando el Mar del Sur de la Antigüedad, le llevó a pensar que el Océano Índico no era un mar cerrado y que África podía ser circunnavegada por su extremo sur.4 Este conocimiento, junto con el mapamundi que ilustraba el continente africano, fue el que probablemente llevaría a los portugueses a intensificar sus esfuerzos para llegar al Cabo de Buena Esperanza y descubrir el océano Índico.
Japón
La primera mención del Japón en un mapa occidental.
El Mapamundi de Fra Mauro es uno de los primeros mapas occidentales en los que se representan las islas del Japón (posiblemente basándose en el Mapamundi De Virga). Una parte de Japón, probablemente Kyūshū, aparece debajo de la isla de Java, con la leyenda “Isola de Cimpagu” (o de Cipango).
Orígenes
Un mapa más temprano, el llamado Mapamundi De Virga (1411-1415), también plasma en una forma similar el mundo antiguo y pudo haber sido la base de este. Fra Mauro también se basó probablemente en fuentes árabes, y también chinas como describe Giovanni Battista Ramusio, un contemporáneo de Fra Mauro que dice que el Mapamundi de Fra Mauro es “una copia mejorada del que el trajo de Catay, que era de Marco Polo“.
Comparación entre el Mapamundi de Fra Mauro map (1457) y el Mapamundi de Kangnido (1402).
El Mapamundi de Fra Mauro muestra muchas similitudes con el Mapamundi de Kangnido, dibujado en 1402 en Corea, que se basa en mapas de origen chino más primitivos, hoy en día perdidos. Estos mapas ofrecen la misma forma de ver el Mundo Antiguo en su estructura general, aunque las proporciones relativas de los países y continentes están invertidos con Europa y África, agrandados en especial en el Mapamundi de Fra Mauro, así como China y en especial Corea están principalmente representadas en el Kangnido.
Comparación entre los mapas de Fra Mauro (izquierda) y Kangnido (derecha)
Estos mapas fueron dibujados antes de los viajes europeos de exploración y antes que los europeos traspasaran el Cabo de Buena Esperanza en 1488. Se ha sugerido que los conocimientos geográficos del Mapamundi de Kangnido demuestran que fue trazado por navegantes musulmanes, indios o chinos (la expedición del almirante chino Zheng He), y más tarde llegó de alguna forma hasta Occidente, posiblemente a través de mercaderes musulmanes o indios, o traído por viajeros occidentales del siglo XV como el veneciano Niccolo Da Conti. El Mapamundi de Fra Mauro ha sido citado en multitud de obras antiguas; el estudio más reciente es el de 1806 de Placido Zurla, Il mappamondo di Fra Mauro.
Una novela actual relata la epopeya de Fra mauro y de su mapamundi: El sueño del hacedor de mapas (viaje espiritual de Fra Mauro, cartógrafo de la corte de Venecia) (1996) de James Cowan.
Otras áreas
Parte de China
España, Portugal y el norte de África
Europa
Oriente medio
Detalle del mapa de Fra Mauro: El Océano Índico como mar abierto. Se aprecian los numerosos rótulos que complementan la información gráfica.
Detalle del mapa de Fra Mauro. La Península ibérica con el sur en la parte superior del dibujo.
Mar Caspio
La ciudad de Delhi, en la India
Notas
El mapa fue un encargo del rey de Portugal Alfonso V (antecesor de Juan II). Fra Mauro lo dibujó sin salir de su monasterio, con ayuda de Andrea Bianco, un navegante y cartógrafo también italiano (que había publicado un atlas en 1436 donde incluía su propio mapamundi), que fueron componiendo este gran mapa del mundo a partir de los comentarios y aportaciones de numerosos viajeros que le narraban como eran las tierras que habían visitado, y con importantes informaciones de exploraciones que navegantes chinos y árabes realizaban por el mar índico. Estos en sus exploraciones habían llegado hasta el océano pacífico (ya que aparece parte de Japón dibujado en el mapa) y hasta el océano Atlántico, ya que aparece representado el cabo de Buena Esperanza y la isla de Madagascar. Aquí se puede apuntar que este mapa es anterior a las cartas náuticas portuguesas donde aparece representada la punta de África, ya que los portugueses no rebasaron el cabo de Buena Esperanza hasta la expedición de Bartolomé Diaz en 1488. La costa occidental de África en cambio está peor delimitada que la oriental, representando un río entrante a la altura del golfo de Guinea. Este facsímil está elaborado a partir de una copia que el propio Fra Mauro estaba realizando del original que envió a Portugal (hoy en día está desaparecido), cuando murió y que fue terminado por su ayudante Andrea Bianco
Fra Mauro es un personaje con una biografía bastante desconocida. Debió nacer alrededor del año 1400 y parece que falleció en 1460. En su juventud viajó y conoció mundo como comerciante y soldado, especializándose en la confección de mapas. En un momento impreciso decidió profesar su fe como monje laico en el monasterio de San Michelle de Murano, una de las islas de la laguna veneciana. Allí sería el encargado de gestionar el patrimonio del convento y destacaría por la realización de planos y mapas alcanzando reconocimiento como cartógrafo. Como consecuencia de ello, recibió el encargo del rey Alfonso V de Portugal para dibujar un gran mapa del mundo conocido hasta aquel momento. Se especula que el motivo del encargo podría haber sido el registro de los territorios que los marinos portugueses habían ido descubriendo, con Enrique el Navegante (tío del rey luso) como gran impulsor.
El resultado fue un gran planisferio de dos metros de diámetro dibujado sobre pergamino. Lo primero que llama la atención (para nuestra mirada actual) es su sorpresiva orientación, ya que sitúa el sur en la parte superior, siguiendo la tradición de la cartografía árabe de la época y en contra de la costumbre occidental de ubicar el norte en esa posición.
La erudición y precisión mostrada por el plano lo convertiría en una referencia para la cartografía posterior. El gran mapamundi adquiriría pronto una aureola mítica por su particular forma de realización que, además, lo ha convertido en un auténtico pionero de los mapas colaborativos actuales, que están revolucionando la disciplina cartográfica y que son elaborados a partir de las aportaciones de numerosos contribuyentes, apoyándose en los avances de las nuevas Tecnologías de la Información y de la Comunicación.
El Mapamundi de Fra Mauro invertido, con el norte en su parte superior. Una visión más cercana a la mirada actual.
Mapamundi genovés en forma de un ojo
Mapamundi genovés en forma de un ojo
Mapa mundial en forma de un ojo, logia secreta de Génova 1457
El llamado mapamundi genovés de 1457: ¿un trampolín hacia la cartografía moderna?
Por Gerda Brunnlechner
Peregrinaciones: Revista de la Sociedad Internacional para el Estudio de las Artes de las Peregrinaciones,
Alrededor de la época del nacimiento de Cristóbal Colón, encontramos en las orillas del mar Mediterráneo, especialmente en el norte de Italia, una variedad de personas particularmente interesadas en problemas de geografía y cartografía. Los círculos humanísticos se reunían para debates, intercambiaban ideas y, en la mayoría de los casos, meditaban sobre mapas. Los cartógrafos se trasladaron de puerto en puerto, encontraron compradores y comerciantes interesados en invertir en libros y mapas. En los concilios de Constanza (1414-18) y Florencia (1431-45), los tratados geográficos cambiaron de manos, mientras se discutían los mapas y la geografía de las regiones extranjeras. Hasta cierto punto, estas personas pudieron encontrar la información que buscaban en los mapa mundi medievales, que, con sus imágenes e historias, constituyen una historiografía del mundo (incluido su fin de los tiempos). Los humanistas buscaron información geográfica en la antigüedad, y la de Ptolomeo Geografía, 1409 traducida al latín por el florentino Jacopo Angeli, fue el centro de mucha atención. Además, las noticias de viajeros y comerciantes sobre tierras extranjeras y personas obtenidas de sus viajes también se abrieron paso en estas discusiones. Las cartas portulanas, mapas del Mediterráneo y del Mar Negro con, para el ojo moderno, sus representaciones casi naturales de las costas, habían estado en uso por parte de los marineros durante al menos 150 años y llegaron a ser de creciente interés en estos círculos académicos. Estos gráficos proporcionaron a muchos una descripción nueva y desconocida del mundo, que contrastaba marcadamente con la visión presentada por mappae mundi.
Estos diferentes hilos de información se fusionarían en los llamados mapas de transición o híbridos del período. El llamado Mapamundi genovés de 1457, mapa de transición y objeto de este artículo, presenta interrogantes preliminares sobre las concepciones del espacio. Fusionando mappae mundi medievales con cartas portulanas y datos de Ptolomeo con la información recopilada por los viajeros contemporáneos, el mapamundi genovés se ve con frecuencia como un paso hacia la cartografía moderna, que, en parte, se define por una concepción homogénea del espacio. Su clasificación como transicional enfatiza el desarrollo progresivo y consciente hacia una nueva etapa. Pero, ¿realmente este período de transición en la historia de la cartografía representa un desarrollo natural e inevitable hacia la modernidad? ¿O podría ser que este concepto simplemente interfiere con una visión de continuidades, como la persistencia de varias dimensiones de significado en estos mapas, continuidades que insinúan la continuidad de concepciones heterogéneas del espacio?
El Mapa del Mundo de 1457 de los genoveses era una versión moderna del mapa de Fra Mauro de 1450. Este último se basaba en gran medida en la exploración del mercader italiano Niccolo Da Conti para mostrar la ruta desde Europa alrededor de África y hacia la India, algo que la versión moderna ilustra con monstruos marinos. Aunque el artista es desconocido, los historiadores creen que tenían cierto gusto por las maravillas exóticas, un interés científico común en esa época. Curiosamente, la forma ovalada del mundo no es inusual para la época. El escritor Hugo de San Víctor dijo una vez que el mundo tenía la forma del Arca de Noé.
Es el primero en el que predominan los elementos modernos sobre los medievales, y el primero que contiene una explicita declaración del cartógrafo de su pretensión de componer un mapa preciso. Se le llama mapa Genovés porque en la parte izquierda lleva la bandera genovesa y el escudo de armas de los Spínola, una prominente familia mercantil de Génova.
Una característica peculiar del mapa es su formato ovalado (79,5 x 39,5 cm). Es el único de su tiempo creado con este formato, aunque no era desconocido en siglos anteriores.
Mapa Genovés. Europa
Mapa Genovés. Criaturas fantásticas en el Índico
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