Misticismo
La Fuente Magna
La Fuente Magna, encontrada en Bolivia. Denominada como la “piedra roseta de las Américas”, esta fuente encontrada muy cerca de las orillas del lago Titicaca y considerada inicialmente como una burda falsificación, ha atraído cada vez más la atención de distintos investigadores que en gran número, han defendido su autenticidad. La clave para la polémica estriba principalmente en la presencia de escritos en dos lenguas que absolutamente nada tienen que ver con el punto geográfico de su localización, como son la escritura cuneiforme sumeria y la semítica. Del mismo modo tanto los grabados como el estilo que acompañan a los textos están en perfecta consonancia con las tradiciones mesopotámicas. Solo falta determinar qué hacían los sumerios en América hace más de 5.000 años.
Fuente Magna, conocido también como Vaso Fuente. Fue descubierto en Bolivia por un campesino en un terreno privado que se dice que perteneció a la familia Manjon, situado en Chúa, a unos 80 kilómetros de La Paz, en las cercanías del lago Titicaca. Se afirma que algunas partes del vaso estarían escritas en caracteres cuneiformes sumerios, protosumerios y semitas mesopotámicos. Es una pieza grande, semejante a un vaso para libaciones, utilizado probablemente durante ceremonias religiosas. Fue encontrado en 1950 por un agricultor cerca de la localidad de Chua, cerca al lago Titicaca. Actualmente se encuentra en un pequeño museo de la calle Jaén, La Paz, en Bolivia: Museo de metales preciosos “Museo de Oro”.
En la parte externa, el vaso contiene algunos bajorrelieves zoomorfos (de origen tihuanacoide), mientras que en el interior, además de una figura zoomorfa o antropomorfa (según la interpretación), hay incisos dos tipos de escritura diferentes, un alfabeto antiguo, proto-sumerio, y el quellca, idioma de la antigua Pukara, civilización precursora de Tiwanaku.En 1960, el arqueólogo boliviano Max Portugal Zamora efectuó algunos pequeños trabajos de restauración en el vaso de piedra e intentó descifrar sin éxito la misteriosa escritura que está tallada en la parte interior.
Entre varios estudiosos debemos destacar la apertura y amplitud del investigador norteamericano Clyde Ahmed Winters PhD. quien tiene amplia experiencia en escrituras y lenguas antiguas, que a centrado sus estudios en encontrar relación de pueblos africanos en la América precolombina.
Fue uno de los pocos estudiosos que se animaron a descifrar esos signos. El Dr. Winters nos hizo llegar la suya que dice: “Acérquense en el futuro a una persona dotada de gran protección en el nombre de la gran Nía. Este oráculo sirve a las personas que quieren alcanzar la pureza y reforzar su carácter. La Divina Nía difundirá pureza, serenidad, carácter. Usa este talismán (la Fuente Magna), para hacer germinar en ti sabiduría y serenidad. Utilizando el santuario adecuado, el santo ungüento, el sabio jura emprender el justo camino para alcanzar la pureza y el carácter. Oh sacerdote, encuentra la luz única para todos los que desean una vida noble.”
Según los textos antiguos, Ni-ash (Nammu o Nía) era la diosa que dio a luz al Cielo y a la Tierra, en los tiempos de los sumerios. El bajorrelieve que hay en la parte interior del vaso, que puede evocar una rana (símbolo de fertilidad), según algunos investigadores es justamente la representación de Nía, la diosa de los Sumerios.
En opinión de Winters, esos signos hasta podrían considerarse “presumerios” es decir, más antiguos que la lengua mas antigua del mundo.
Ahu Vaihu – Pascua
Subcategoría: Plataforma y cículo de piedras.
El Ahu. Es imposible separar a los moai de sus ahu, la estructura de piedra sobre la cual reposan. Se cuentan alrededor de 272 ahu en toda la isla, aunque sólo decenas de estos altares repartidos en Rapa Nui acogían alguna estatua. La mayoría de ellos se erigían cerca del mar, pero también existen 25 ahu relativamente grandes en el interior de la isla, como el ahu Akivi o el ahu Uri a Uranga. En realidad, un ahu podía tener una primera vida y, tras el paso del tiempo y las guerras, destruirse para reutilizar sus piedras y estatuas con el fin de edificar un segundo ahu. Inicialmente, estas plataformas ceremoniales no debían exceder los veinte metros de largo, pero durante el período más clásico de la historia de Isla de Pascua, algunos ahu midieron más de 100 metros de largo y contaron con más de diez estatuas de diferentes épocas. Casi todos los ahu estaban concebidos de modo que los moai dieran la espalda al mar y protegieran al clan con su mana (poder, potencia, aliento, en cierta forma la conciencia de los pascuenses), ya que eran figuras de ancestros protectores.
De las 288 estatuas transportadas hasta los ahu, sólo 164 se levantaron durante el período clásico de la isla. Las demás, de una época anterior, estaban incorporadas en la construcción. Sólo 58 estatuas tenían un pukao (gorro). Poco más del 90% de los moai provenían de la cantera del Rano Raraku, aunque algunos se elaboraron en el Poike con traquita blanca, escoria roja, e incluso con basalto.
Un Ahu no restaurado, el AHU VAIHU, situado en la bahía de HANGA TE’E en la costa sur de la isla, testigo de una fase de destrucción unos siglos atrás.
Vaihu
Es una plataforma de piedra que está a 10 Km. de Hanga Roa. Se compone de 8 estatuas que yacen en el lugar donde cayeron y 8 pukao dispersos en las proximidades. En frente del Ahu hay un círculo de piedras, para las ceremonias de Paina, en las que se honraba a la muerte.
Una vista más cercana de Ahu Hanga Te’e O Vaihu con caído moai y pukao (tupés). El ahu es 100 metros de largo por 12 metros de ancho.
Paina o círculo de piedra ceremonioso delante de Ahu Hanga Te’e O Vaihu
Las lámparas de Dendera
Las lámparas de Dendera, grabado en bajorrelieve en un templo dedicado a la Diosa Hator. A comienzos de los años ochenta, los investigadores Peter Krassa y Reinhard Habeck, dieron la voz de alarma al lanzar una hipótesis revolucionaria basada en la utilización de la energía eléctrica en el antiguo Egipto. Así parecían atestiguarlo numerosos relieves esculpidos sobre las paredes de distintos templos, como los de Edfú, Kom Ombo y Dendera.
Las lámparas de Dendera es el nombre que reciben, en medios pseudocientíficos, varios relieves de piedra (solos o en doble representación) esculpidos en los muros del templo de Hathor de Dendera, en Egipto, iniciado por Nectanebo I (siglo IV a. C.) y terminado en época romana. Los bajorrelieves son interpretados por los egiptólogos como una serpiente surgiendo de una flor de loto, un símbolo de carácter mitológico:
Relieve de Harsomtus «Horus unificador de las Dos Tierras», con una de las llamadas «lámparas», grabadas en el muro de una de las criptas. Ejemplo célebre de pareidolia.
Los espléndidos y enigmáticos relieves de la cripta son cosmogónicos y muestran una serpiente (símbolo del principio dualista subyacente en toda la creación, como en el Génesis la separación del cielo y la tierra) nacida de una flor de loto, símbolo de la creación como una manifestación de la conciencia.
Explicación científica
Representación en la planta baja.
Harsomtus es la denominación que dieron los griegos al dios egipcio Hor-sema-tauy, «Horus unificador de las Dos Tierras», que adopta diversas formas en las representaciones, y una de ellas es la de serpiente emergiendo de un loto. Dichos lotos cerrados de los que nace Harsumtus, bajo interpretaciones totalmente desconocedoras de la mitología egipcia, son las supuestas bombillas.
Interpretaciones no científicas
En contraste con la interpretación científica, otros investigadores plantean la hipótesis de que los relieves representan el uso de la tecnología eléctrica en el Antiguo Egipto, comparando los objetos centrales de los relieves con otros dispositivos similares más modernos (como los tubos de Geissler, tubos de Crookes, y lámparas de arco eléctrico). Esta hipótesis parece «obvia» para el ufólogo Erich Von Däniken, más aún al encontrarse en una «cripta secreta». Däniken ignora u omite que también existen representaciones similares en la planta baja y en otras zonas del templo.
La sugerencia humorística de Joseph Norman Lockyer a un colega de que las lámparas eléctricas explicarían la ausencia de restos de antorchas en las tumbas egipcias ha sido remitida a veces como argumento en apoyo a esta interpretación, si bien, en realidad, el científico quería demostrar el uso de un sistema de reflexión con espejos.
Los partidarios de esta interpretación también han utilizado como argumento un texto antiguo referido a «largos mástiles cubiertos con placas de cobre» pero el egiptólogo Bolko Stern ha descrito en detalle que dichos postes estaban cubiertos de cobre para usarlos en ritos mágicos, no para usar la electricidad o los rayos, pues no se ha encontrado ninguna prueba de la manipulación de electricidad en Egipto.
Peter Krassa y Reinhard Habeck han ideado una teoría básica de la operación del dispositivo como lámpara eléctrica, aunque sus conclusiones no han sido aceptadas por la egiptología.
En la época en que se grabaron varias supuestas lámparas, ya existía la Biblioteca de Alejandría, donde acudían los mejores pensadores del mundo helénico (como Arquímedes), y ninguno dejó constancia de la existencia de lámparas eléctricas en Egipto.
El Candelabro de Paracas
Candelabro de los Andes, La cruz de Paracas, El tridente de Paracas
La cruz de Paracas, el candelabro de los Andes.
El Candelabro, en la bahía de Paracas, es un geoglifo famoso, ubicado en Paracas, Ica. Sus grandes dimensiones y su diseño sobre la arena permiten distinguir una relación con las líneas y geoglifos de Nazca y de Pampas de Jumana. Su origen es aún un misterio.
En una suave colina de arena, en la Bahía de Paracas; se encierra un misterio de nuestra historia, un “Candelabro” inmenso, dibujado sobre la cambiante superficie de arena, sin que jamás se haya borrado.
Esta figura se encuentra dibujada en una superficie de arena endurecida de color blanquecino, como sí se tratara de un lienzo que cayera verticalmente desde el cielo hasta tocar las olas, que con violencia se estrellan contra la base oscura de roca estratificada, donde la playa no existe. De manera que tal lugar jamás fue un desembarcadero, ni punto de llegada para nadie. El poste principal mide aproximadamente 200 m de altura, en tanto que la figura toda abarca una amplitud de 60 mts. Los postes laterales alcanzan una longitud de 60 m desde su origen hasta la cumbre y los surcos que los hacen visible tienen una profundidad que varía de 1,2 m con 3,20 en el fondo.
Si navegamos por la costa de Perú podremos ver en una suave colina de arena, en la Bahía de Paracas, uno de los más grandes misterios de nuestra historia, un “Candelabro” inmenso, dibujado sobre la cambiante superficie de arena, sin que jamás se haya borrado.
Si hay algo que no pasa inadvertido para nadie es que, tanto su estratégica situación como sus enormes proporciones indican una clara intención por parte de sus realizadores para que fuese visto desde grandes distancias (con tiempo despejado es perfectamente visible a 20 km. de la costa).
Destacando, especialmente, su contemplación desde el mar pero sobre todo desde el aire.
En toda el área de Paracas, se han registrado al menos 106 emplazamientos arqueológicos, la mayoría dentro de la Reserva Nacional, que correspondes a diferentes etapas de antiguos pueblos prehispánicos que se remontan aproximadamente a unos 9.000 años.
Mucho se ha dicho a través de la historia acerca de esta enigmática figura: los conquistadores españoles, que al verlo creyeron que el Candelabro representaba a la Santísima Trinidad, interpretándolo como un buen presagio al descubrirlo. También se dice que los conquistadores descubrieron en él, una cuerda en el interior del Candelabro e indicios de que existieron otros cables y cuerdas, que conectaban a los otros dos brazos exteriores de la imagen,… pero no pudieron dar explicaciones acerca de la función de tales cuerdas; Von Däniken especuló que eran parte de un sistema de poleas. El investigador Robert Charroux sugirió que esta imagen pudo haber sido “un gigantesco sismógrafo y precisa, capaz de registrar las ondas telúrica y sacudidas sísmicas procedentes no sólo de Perú, sino de todo el planeta… “
También se ha sugerido (por Frank Joseph), que se asemeja una planta, de la familia de la belladona utilizada a veces como una droga alucinógena, sugiriendo que los habitantes prehistóricos de la región de Paracas viajaron al norte a California a recoger la planta (esta es la zona más cercana donde crece) y que utilizaban el geoglifo para ayudar a navegar a casa (!). Algunas historias del folklore local, aseguraban que fue hecha por marineros o piratas. Por parte de los arqueólogos, se considera que el Candelabro es una representación simbólica en honor al dios Viracocha, la imagen del cactus Sanpedro o la constelación de la Cruz del Sur. Se tiene la creencia de que el candelabro apunta hacia el Cuzco, lo cual es falso: apunta hacia la cercana Isla Blanca, lugar donde se han hallado importantes yacimientos arqueológicos y sacrificios.
Todavía hoy se utiliza como un hito, por los cruceros que frecuentan la península. Lamentablemente, hace algunos años fue víctima de un execrable ataque vandálico por un grupo de jóvenes evangélicos, azuzados por sus pastores en la delirante idea de “…deber destruir aquel símbolo satánico”.
El Candelabro es, sin duda, todo un enigma: si verdadera función aún es desconocida; solo se tiene la certeza de que fue hecho para verse desde muy lejos,… y desde el aire, pero ¿por quién?. Una clara muestra lo poco que sabemos de nuestro pasado y de todo lo desconocido que nos rodea en nuestro mundo.
Se tejen creencias de que esta figura señalaría la existencia de algún tesoro escondido por los temibles piratas que asolaron las Costas Americanas en busca del apreciado oro que los Conquistadores embarcaban a Europa, contrarios a esta teoría sostienen que los piratas eran seres burdos, que no harían semejante maravilla.
Otros estudiosos aseguran que tales líneas, imborrables al paso de los siglos, serian obras de seres de otros mundos, pues el Candelabro apunta directamente a las famosas líneas de Nazca, las que igualmente solo pueden apreciarse desde el aire y que sería señales de un gigantesco galaxpuerto para naves extraterrestres.
Versiones de leyendas afirman que los antiguos Peruanos que recorrían el mar, dibujaron este Candelabro con la finalidad de orientarse en sus travesías de pesca o de conquista, pues visto desde tierra no puede ser apreciado, lo que si ocurre desde el límpido mar Paraqueño. Como siempre, abundan las explicaciones que no explican nada.
¡Ah! Un detalle, el extraño geoglifo está, exactamente, en el punto donde se estabiliza el ecuador magnético de la Tierra. Pero, entonces ¿Cómo sabían hace siglos que la tierra tenía un campo magnético? Nosotros no lo hemos sabido hasta el siglo XX., y ¿Cómo conocían las características de dicho campo magnético?
Candelabro de Paracas.
Una teoría señala que fue realizado por José de San Martín (1778-1850), interpretando que se trata de un símbolo de la masonería y otra que es una señal para los navegantes.
Posiblemente fueron hombres astrónomos de la Cultura Nazca quienes construyeron este geoglifo, que no fue puesto allí para que los viajeros pasaran delante de él sin reparar en su presencia. Se asocia el geoglifo a la Constelación de la Cruz del Sur, conocida también como la Cruz de los navegantes, por indicar a los marinos del hemisferio Sur la ubicación del Polo Austral por medio de su eje principal que les servirá de guía y orientación en sus viajes. De cada uno de los brazos laterales, arranca su correspondiente poste, paralelo al eje principal, del que equivaldría al eje de la cruz del Sur, Guillermo Illescas en las meditadas investigaciones acerca de este geoglifo, lo ha identificado plenamente con la Cruz del Sur y algunas estrellas de la constelación Centauro que serían las que le dan su peculiar forma de Candelabro. “Volviendo los ojos al cielo podríamos comprobar -dice- que un poco más a la izquierda (al oriente) de la estrella Beta Cruz y un poco más arriba de ella (al norte) se encuentra la estrella Pi Centauro, la misma que al unirse con la estrella correspondiente de dicha constelación mediante una proyección generada entre las estrellas que se indican, serviría para determinar el poste lateral de ese lado resultando de ese modo, paralelo al eje principal.
El primero en mencionar el gigantesco dibujo, en 1926, fue el francés Victor Forbin, quien declaró que era un tridente dibujado por los atlantes.
Piedra de Tjuringa
A la izquierda la conocida como “Piedra de Tjuringa”, localizada en Australia Occidental, un símbolo clásico del arte egipcio durante el reinado de Akenatón, donde los rayos solares eran siempre representados con “pequeñas manos” que tocaban a la humanidad. A la derecha la familia de Akenatón es envuelta por los rayos de Atón (el Sol). Obsérvense las pequeñas manos al final de los rayos del Sol en ambas representaciones.
Piedra que levita en Shivapur
En Shivapur India hay una esfera misteriosa que se hace ligera y se eleva en el aire cuando es tocada por varias personas cantando mantras como Qamar Ali Dervish:
En Shivapur, pequeña aldea ubicada a unos 24 kilómetros al sur de Poona en la India, en una pequeña mezquita mahometana dedica al sufi Qamar Alí Dervish en un pequeño prado hay un enorme guijarro de granito que pesa unos 55 kilos. Frecuentemente un barbudo sacerdote musulmán se sienta en las gradas y lee el Corán, luego, cuando se ha reunido un grupo de visitantes o peregrinos, cierra el libro, les da la bienvenida e invita a once personas que con sus dedos índices toquen la piedra, inclinándose al hacerlo, salmodiando en voz alta las palabras Qamar Alí Dervish y ante los asombrados ojos de los presentes, la piedra se eleva casi dos metros durante un segundo y cae al suelo. Hay una piedra más pequeña de 44 kilos: La elevan 9 personas. No hay truco, pero se requieren tres condiciones para que se realice: Los índices de los participantes, el número exacto de personas once o nueve, según la piedra y la pronunciación correcta de Qamar Alí Dervish. Sin esto no hay ingravidez.
Pirámide de Gympie
La Pirámide de Gympie es una estructura en terrazas ubicadas en las afueras de Gympie en Queensland, Australia. Se ha demostrado que es la construcción de un campesino italiano para detener la erosión.
La función se encuentra sujeta a la especulación de aficionados, que ha argumentado que la hagiografía de los estudiosos serios, especialmente las sugerencias de que fue construido por una civilización desconocida, los egipcios, los americanos del Sur, o los chinos.
Rex Gilroy afirma que descubrió el Gympie Pirámide en 1975 y afirmó que la “pirámide” fue creado por los egipcios que tenían operaciones mineras en Australia desde hace siglos, con las bases de operación llegando hasta las Montañas Azules de Nueva Gales del Sur. En su artículo sobre el tema, Anthony G. Wheeler escribió: “Parece que una colina en terrazas se decía que era una pirámide sobre la base de un muro de piedra alrededor de una iglesia cercana que la construcción inusual, supone que las leyendas locales y los tabúes que advirtió en contra de intrusión en el área de la pirámide, el predominio en el área de un cactus del Sur o de origen de América Central, una estatua (la ‘Iron Man’ o ‘Gympie Ape “) se encontró en las inmediaciones (la estatua fue descubierta en 1966 por el señor K. Dal Berrys Wolvi carretera propiedad, y se cree que representa el Dios egipcio THOTH), y algunas inscripciones en una piedra bloque desenterrado en la zona. Señala Wheeler que un arqueólogo aficionado, Marilyn N. Pye, se convenció de que la “pirámide” y otras características eran vestigios de asentamientos antiguos en Australia por los incas de América del Sur.
Mientras Pye argumenta la “pirámide” es de origen incaico, Gavin Menzies afirma que es “una prueba directa y convincente de las visitas de China a Australia” y que “su tamaño, altura y forma son típicos de la Dinastía Ming plataformas de observación y se han sido totalmente lógico que los chinos para construir observatorios para determinar con precisión la ubicación de la riqueza fenomenal que habían descubierto. “
Wheeler dice que las afirmaciones de un origen extraordinario de la pirámide son infundadas, por escrito, “Los hechos son (probablemente) que el Gympie” Golden “pirámide es en realidad una colina en terrazas comunes por los primeros inmigrantes italianos para la viticultura que haya sido desfigurada por la erosión y la extracción de piedra de los muros de contención para su uso en otros lugares … En cuanto a las declaraciones de apoyo por las distintas autoridades, todos menos uno los pocos importancia se desvanecen cuando uno tras otro ha demostrado ser una cita errónea, una falsificación o una fabricación total. “
En la actualidad el Departamento de Queensland de las calles principales es la planificación para construir una carretera a través del sitio.
Desenmascarando revisionista de la historia
La Pirámide de Gympie se ha investigado de forma independiente y se encontró que ser mucho más banal. Era parte de un muro de contención construido por un agricultor italiano para detener la erosión en una mesa naturales de su propiedad.
Una importante labor sobre el origen fue realizado por un historiador Gympie, la Dra. Elaine Brown, durante la década de 1990 y principios de 2000 en el que se encontró con que la estructura escalonada fue construido por un horticultor suizos a finales de 1880.
Son varias las noticias que apuntan a la presencia de construcciones piramidales en Australia, algunas de ellas aprovechando accidentes geográficos naturales para su realización. Naturalmente esta posibilidad ha sido completamente desechada por los arqueólogos. Una de las más famosas “pirámides” se puede localizar en Gympie, al norte de Queensland, una construcción escalonada en terrazas de 4 a 8 pies de altura, de bloques de piedra de diversos tamaños, con una altura total de 30 m, dónde curiosamente se encontraron numerosas piezas con representaciones de escarabajos sagrados y la estatua de uno de los “babuinos” a los que hacíamos referencia anteriormente. Según las tradiciones aborígenes, esta y otras construcciones megalíticas existentes en toda Australia fueron realizadas por una raza de gigantes (se pueden ver huellas de pisadas fósiles de un tamaño gigantesco de fisonomía humana en estratos de esquisto en las Montañas Azules, Nueva Gales del Sur). Oficialmente esta construcción es achacada a agricultores inmigrantes llegados a Australia en el siglo XIX, que levantaron terrazas para el cultivo, pero que la mala calidad del terreno les hizo abandonar.
Curiosamente se encontraron numerosas piezas con representaciones de escarabajos sagrados, monedas, diferentes figuras y otras evidencias más, que en nada se asemejaban a la cultura aborigen de aquellas latitudes.
Otra estatua con forma de cocodrilo encontrada cerca de la pirámide Gympie. ¿Podría ser una estatua dedicada al dios egipcio Sebek?
Aparte de esto, cerca de la pirámide se encontraron otras estatuas o ídolos de piedras mas pequeñas que se cree que también representaban al dios Thot además agarrando la Tau o cruz egipcia, estas estatuas están muy erosionadas seguramente por su antigüedad y por los fenómenos que se han dado en el lugar.
Según los aborígenes, seres de cabello castaño, ojos azules, pelo rubio con colgantes de delfines vinieron de la estrella Orión y construyeron las pirámides y los sitios del templo, pero el agua entró y la destruyó hace mucho tiempo. Las ruinas eran tabú para ellos.
Los colonos tomaron las piedras de las pirámides y otros edificios y los utilizaron como piedras de fundación para la calle principal de Gympie y la construcción de edificios, incluida la iglesia local, que aún se encuentra. Había estatuas de piedra como las estatuas de la Isla de Pascua y también estatuas de animales. Estos han sido destruidos o están escondidos, pero las fotos y los bocetos de ellos permanecen del primer hombre blanco para entrar en el área. Incluso los túneles debajo de Gympie fueron dinamitados.
Todas menos una de las pirámides fueron arrastradas hacia el océano por el ejército en la década de 1950 y el único superviviente permanece en tierras privadas con una estricta política de “no traspaso”.
La pirámide de Gympie Tenga en cuenta la calzada que se extiende desde la izquierda de la imagen. Un muelle de piedra una vez estuvo en la base sur [desde la carretera], la pirámide está en el borde del antiguo puerto.
Controversias.
Hoy no queda nada en la cumbre, pero existe el testimonio escrito de un historiador local, Brett Green, quien relata el testimonio de su tatarabuelo. Muchos años antes, dice Green, en la parte superior de la pirámide había trece pilares con una mesa redonda en el centro, que estaba perforada. Además, más abajo había un portal de piedra y algunas tallas. Todo esto fue removido o destruido por los primeros pobladores que llegaron a Gympie.
Fuente: www.newdawnmagazine.com
La zona comenzó a ser habitada a finales del siglo XIX, cuando se encontró oro en las inmediaciones. Las piedras de la pirámide, como suele suceder, se utilizaron como material de construcción para otros fines. También hubo evidencia de algunas de las piedras grabadas utilizadas en las iglesias, pero estas también parecen haberse desvanecido en el aire. Para dar a conocer la pirámide como un lugar de particular sacralidad estuvo Rex Gilroy, testigo de sucesos paranormales en esta zona.
Quien negó rotundamente que la pirámide de Gympie tuviera algún valor arqueológico fue Michael Moorwood , quien dio la lectura, ahora comúnmente aceptada, de terrazas destinadas al cultivo de viñedos. Esta interpretación fue desmontada por Jefferys, quien planteó algunas dudas. Para empezar, todo el sitio no da la impresión de haber sido un sitio de cultivo en absoluto. No hay canales ni sistemas de riego. El suelo que se utiliza en las terrazas es muy pobre, no apto para cultivar nada.
No se han encontrado las raíces ni los restos de los presuntos viñedos y, en general, la forma en que se construyeron las gradas no parece adecuada para la viticultura. Las terrazas son de hecho muy altas, los bloques muy pesados y todo muy incómodo. Incluso la orientación de la pirámide sería incorrecta: los que cultivan vides suelen buscar una exposición norte, mientras que la pirámide de Gympie mira hacia el sureste.
Finalmente, también habría una inconsistencia histórica. Los colonos italianos no llegaron a esta zona de Australia hasta después de la Segunda Guerra Mundial, mucho después del período identificado por Moorwood. En los archivos de Gympie no hay rastro de tierras entregadas en concesión, o compradas, para ser cultivadas con viñedos. Toda la historia, desde diferentes puntos de vista, no parece sostener mucho.
Pirámide de Gordonvale
También cerca de Gordonvale, al sur de Cairns (Australia), existe otra construcción de tipo escalonado.
Giant Stone Man (El Hombre Penokee)
A muchos de nosotros nos son familiares las líneas Nazca de Perú o los gigantes de creta de Inglaterra, pero menos conocido – y más cerca a la casa – es la Figura de Penokee de Graham County, Kansas.
Descansando encima de una colina encima del Valle de Solomon River, el Hombre Penokee (o indio cuando él es a veces mandado) consiste de más de 100 piedras en los límites de 6 inchest a más de un pie de ancho. Las dimensiones enteras de la figura exceden 57 pies en la longitud y más de 30 pies de ancho.
Nadie sabe exactamente quién lo construyó o que edad es exactamente. Un examen 1879 por un paleontólogo de Harvard lo comparó con otras figuras de piedra gigantescas encontradas en todas partes de las regiones de llanuras del norte, incluso figuras parecidas a un humano y las ruedas de medicina famosas.
Tablilla de Glozel
Glozel, aldehuela de la montaña Borbonesa, está situado en el municipio de Ferrieres/Sichon en el departamento de Allier a una veintena de kilómetros en el sureste de Vichy.
El 1° de marzo de 1924, en el campo Duranthon ( rebautizado más tarde campo de los muertos ), un joven agricultor de 17 años, Emile, y su abuelo, Claude Fradin, hacen un descubrimiento imposible que desencadena una de las más violentas polémicas arqueológicas del siglo XX porque pone en duda lo que se sabía sobre los orígenes de la escritura.
Al roturar un haza de terreno, unos de los bueyes tirando del carro, cae en un hoyo, en el interior del cual Emile topa con huesos humanos. Con el descubrimiento de esta tumba, piensan haber encontrado un tesoro, las primeras excavaciones se hacen con pico y pala. Hallan varios objetos, urnas, vasos, hachas y tablillas grabadas. Rompen las urnas pero no contienen más que tierra, decepción, vuelven a tapar el hoyo y siembran la avena.
En el transcurso del verano, la Sociedad del Borbonesado se desplaza, saca muestras y las manda al Dr Capitán de Bellas Artes. En aquella época, el Dr Capitán, el padre Breuil y el conservador del museo de los Eyzies, el Sr Peyroni, representaban el triunvirato ineludible de la prehistoria.
Mientras tanto, en 1925, Antonin Morlet, médico de Vichy, apasionado por la arqueología, se entera del descubrimiento y se persona en el lugar junto con su esposa. Fascinado por lo que encuentra, obtiene el derecho de publicación sobre los objetos que siguen siendo la propiedad de Emile Fradin.
13 meses después de recibir las primeras piezas, el Dr Capitán va allí. “Aquí tienen un yacimiento maravilloso“, pide al Dr Morlet un informe detallado.
Pero en vez de mandar su informe, el Dr Morlet lo publica el 23 de septiembre de 1925 bajo el título “Nueva estación neolítica“. Furioso, Capitán convoca a Morlet, “… ponga mi apellido en vez del de Emile Fradin…”, (hecho relatado y publicado por el canónigo Cote, “Glozel, 30 años después“, 1959; todas las personas “metidas” en el medio científico conocen la importancia de ver su apellido mencionado en una publicación); Morlet se niega. Luego el padre Breuil escribe un artículo a favor de Glozel pero sin mentar el apellido del Dr Morlet, quien a su vez se subleva y acusa al padre de querer arrogarse el descubrimiento.
El padre también se volverá en contra de Glozel.
¡Estamos muy lejos de los argumentos científicos!
Los grandes mandamás de la prehistoria, en un principio muy favorables hacia Glozel, cogidos desprevenidos por este fabuloso descubrimiento, hallándose “fuera de juego“, se deciden en contra de Glozel. Tanto más que el mismo periodo un epigrafista eminente, René Dussaud, acaba de publicar oficialmente que la escritura nació en Fenicia, 1 600 años antes de Jesucristo (después del hallazgo del sarcófago del rey Ahiram de Byblos, cubierto de inscripciones). Ahora bien el Dr Morlet fecha las tablillas grabadas en 5 o 6000 años antes de Jesucristo.
Los dos descubrimientos se contradicen y esto va a desencadenar una verdadera guerra entre los hombres de ciencia. Los glozelianos y los antiglozelianos se afrentan, Glozel se convierte en el caso Dreyfus de la arqueología.
En esta guerra, todos los golpes ( bajos ) están permitidos, cartas anónimas, insultos, etc. ; algún día incluso el Dr Morlet sorprende a miss Garrod, secretaria del padre Breuil, en flagrante delito de falsificación durante una encuesta de la Comisión de indagaciones hecha in situ ( nombrada por el Dr. Capitán, ¡¡¡ imparcialidad cuando te apoderas de nosotros !!! ). El Dr Morlet, Emile Fradin se ven arrastrados por los suelos, todo está aprovechado para deshonrarlos, “¡calumnien, calumnien, siempre quedará algo! “
El Presidente de la Sociedad Prehistórica de Francia acude a Glozel, paga 4 francos de entrada al museo (someramente organizado por Emile Fradin para satisfacer el número creciente de visitadores, curiosos de ver estos fantásticos objetos tan controvertidos), luego pretende que le enseñan cosas falsas. Demanda contra X por “empresa pecuniaria para enseñar los productos de una mixtificación“.
El 25 de febrero de 1928, la policía de Clermont-Ferrand se presenta para indagar en casa de los Fradin; su objetivo: encontrar el taller donde Emile fabrica sus objetos. Rompen las vitrinas, ciertos objetos, maltratan al pobre Emile y se llevan más de 200 objetos, con el pretexto de fecharlos a pesar de que en aquella época no se conocía ningún procedimiento para conseguirlo.
El 4 de junio de 1929, Emilio Fradin se ve inculpado de estafa, el juez de instrucción le va a sonsacar durante las 63 horas del interrogatorio. Quieren que confiese haber fabricado estos objetos, pero este joven campesino del Borbonesado, ignorando todo de la prehistoria, tiene su conciencia para sí mismo, no ha fabricado estos objetos surgidos de la noche de los tiempos.
Su correo está abierto, la policía le vigila sin cesar para sorprenderlo en flagrante delito de fabricación y verificar si entierra los objetos él mismo.
Total, al cabo de dos años, la inculpación se termina por un sobreseimiento. Por fin, Emile Fradin puede gozar de la vida, se casa y tiene familia. El Dr Morlet sigue las excavaciones, siempre a costa suya, durante 16 años. Encontrará más de 3 000 objetos, hasta el año 1941 cuando la ley Carcopino fue votada. De ahora en adelante está prohibido excavar el suelo francés sin autorización del Estado. Esto pone fin a las excavaciones de Glozel. El Dr Morlet muere en 1966, no verá el reconocimiento de Glozel.
En 1972, Henri François, ingeniero en la Comisaría de la Energía Atómica, visitando Glozel, saca muestras y las manda para fechado a 3 laboratorios extranjeros. Se utilizará el método de fechado al carbono 14 para los huesos grabados y la termoluminiscencia para las cerámicas y la terracota.
Para los tres laboratorios independientes, los resultados son claros e irrebatibles, ¡ Glozel es antiguo !
Henri François escribirá a Emile Fradin : “…Sólos unos atrasados mal informados podrán pretender todavía que Vd es un falsario, las comprobaciones de medidas hechas con independencia en cada laboratorio son perfectas e indiscutibles…”
Los resultados son los siguientes:
- los huesos tienen entre 15 000 y 17 000 años,
- las cerámicas tienen 5 000 años,
- las tablillas grabadas tienen 2 500 años.
En 1974, un equipo del Centro de Investigación Nuclear de Grenoble analiza el emplazamiento con magnetómetro, demostrando que todavía quedarían objetos ocultados.
En 1975, después de un congreso de arqueometría celebrado en Oxford, la autenticidad del sitio se pone en evidencia. El Estado reconoce la autenticidad de Glozel, pero la comunidad científica sigue dudando.
Desde 1983 hasta 1990, nuevas excavaciones fueron emprendidas, curiosamente, en varios kilómetros del campo de los muertos, luego, ningún resultado fue publicado ( ?? ? ).
Entonces ¿por qué? Cito al Sr Remy Chauvin, biólogo, “padre espiritual de los herejes en Francia“: “… Si no publican puede que hayan encontrado cosas que les molestan, entonces ¿por qué? ¿Qué es lo que temen?
¿Temen disgustar a algunos viejos profesores, temen arruinar las teorías vigentes?
Pero ¿es que las teorías científicas son monumentos religiosos?
¿Qué hay en Glozel para levantar un ataque tan violento?
¡Hagamos excavaciones metódicas y racionales en el sitio en donde Emile Fradin las hizo ! … “
Emile Fradin se vio proponer cantidades fabulosas por sus descubrimientos, pero no cedió ningún objeto. El 16 de junio de 1990, recibió las Palmas Académicas.
En 1995, después de la difusión de una emisora televisada, el resumen provisional de las investigaciones precedentes se publica por fin, pero no revela nada, sino lo que ya se sabía, es que hay una gran disparidad en la edad de los objetos de Glozel.
Más de 3 000 objetos han sido hallados, vasijas, tablillas grabadas, piedras pulidas, joyas de hueso, puntas de flechas, agujas, y no parece que los signos escritos hayan sido superpuestos a grabados animalistos anteriores.
Todos los huesos, humanos (no perteneciendo a esqueletos de hombre moderno), y de animales (transformados en herramientas, joyas, algunos de ellos llevando signos de escritura), todos, presentan una fosilización avanzada.
Las hachas de piedra pulida tienen el filo poco usado y por consiguiente se supone que son votivas.
Los guijarros, grabados particularmente con espléndidos renos, produjeron la admiración de los especialistas en arte prehistórico.
Los objetos de cerámica, ídolos, vasos mortuorios con máscaras extrañas desprovistas de boca y las famosas tablillas cubiertas de inscripciones todavía desconocidas, fueron fabricados en un horno ovalado que en principio fue confundido con una tumba.
Aún si no queda ninguna duda sobre la autenticidad del sitio, Glozel conserva todavía muchos misterios.
Efectivamente, debido sin duda a la fuertísima radioactividad natural de la región, los fechados son muy inconexos, y cuesta trabajo entender y a fortiori explicar la presencia en un mismo lugar, de objetos viejos de 17 000 años, 5 000 años, 2 500 años, 1 500 años ¡e incluso de la Edad Media!
Queda también el enigma de la escritura que se encuentra en huesos grabados de 17 000 años, hasta ahora sin descifrar… Presenta grandes semejanzas con:
- formas muy antiguas de la escritura fenicia.
- Pero también con cierto número de inscripciones alfabetiformes halladas en sitios magdalenienses, en Portugal, en Rumanía y en Francia.
¿Acaso sería Glozel un antiguo lugar de culto, mágico, en donde estarían reagrupados objetos de diversas procedencias?
Debe estar conectado para enviar un comentario.